Good Old-Fashioned Lover boy - Stony AU omegaverse

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La tensión en el área de trabajo de Steve era algo palpable a medida de que notaba que su compañera de trabajo pretendía pasar mucho más tiempo junto al alfa, lo embadurnaba con su horrible perfume barato y siempre que estaba en el restaurante solía hacer uso de la peor de las personalidades, fingiendo ser linda y hasta infantil solamente para ganarse el favor del rubio.

- Por cierto Steve, mis padres quieren que vayas a cenar el viernes en la noche.

- ¿El viernes?

- Si, me han pedido que le avisara que tienen una buena noticia para ti.

- Vaya, no había esperado a que me llamaran tan pronto a su casa, ahí estaré.

Dijo el rubio prestando atención nuevamente a su visitante, las cosas entre ellos iban viento en popa, salían, saludaba a los padres del omega, pasaban el rato en el parque, el cine o caminando en el parque, aunque una tarde que ambos acordaron tomarse un día libre fue sorprendido por Steve con un sencillo pero bastante romántico picnic en el parque donde siempre se reunían, no podía sacar de su cabeza aquel mantel a cuadros rojos y blancos, una cesta de picnic, algunos platos de la vajilla de su madre, algo de jugo y los mini sandwiches como aperitivo, nunca nadie en la vida le había dado una sorpresa como esa y lo adoraba, adoraba cada milímetro de alfa que era Steve Rogers, tanto que por unos segundos olvidaba que esa molesta rubia hace apenas unos días le había declarado la guerra por el corazón del rubio quien no estaba de nada enterado.

Y no podía simplemente hacer a Steve su novio, los escándalos y el hecho de que Von Doom siguiera rondando su casa y espacio de trabajo hacían bastante complicado el hecho de que pudieran comenzar a salir sin que les acosaran o suponieran que ese alfa era el causante de su rompimiento haciéndolo el malo del cuento. Por otro lado estaba Sharon, quien ganaba credibilidad del rubio con esa fachada de inocencia.

- Entonces, cariño, te veo el viernes, y nos vemos mañana, me despides de Bucky.

Sin más procedió a seguir su rutina y a salir del restaurante.

- ¿Has comenzado a salir con él?

- ¿Qué te dije la última vez Sharon? Lo que haga con Tony o la relación que decidamos llevar no es para nada de tu incumbencia.

- Yo solo preguntaba, si no han comenzado a salir pensaba que sería lindo si me acompañaras mañana a unas tiendas departamentales, ví unas camisas para ti que estoy seguro que te encantarían.

- No gracias, no me gusta mucho ir a esa clase de tiendas, son demasiado grandes y no me gusta caminar demasiado en esos sitios, me estresa la gente y además mañana he quedado en salir con Tony...

- Ese omega te roba demasiado tiempo y solo te da largas... ¿No crees que esté con su ex mientras te hace pensar que está disponible para que sigas como su perro faldero?

- Sharon...

- Está bien, está bien, solo digo, las noticias dice que Victor aún lo busca pensando en que pueden solucionar sus problemas y volver a comprometerse.

- Pero no nos consta, es mejor esperar, y bueno, no puedo reclamar nada a Tony, somos amigos antes que pareja o algo formal, así que está en su derecho.

- Así cómo tu lo estás de poder salir con una amiga.

Aquello le hizo volver su vista a la rubia quien sonreía.

- Gracias, pero prefiero mantenerme al margen contigo ¿Te parece colegas de trabajo?

- Bueno, por algo se empieza.

Dijo la mujer encogiéndose de hombros, ese hombre sin duda era un hueso duro de roer en cuanto a su idolatría por el castaño que le visitaba a lo mucho una hora en el trabajo.

Cuando volvió a casa, Steve tomó su teléfono para marcar ese número que ya sabía de memoria, eran pasadas las ocho así que sabía que Tony estaría esperando por esa llamada.

- ¿Cómo va tu noche?

Ya ni siquiera hacía falta saludar.

- Horrible, Victor se apareció en el taller donde estaba con mi padre, pero afortunadamente después de una discusión y una llamada a seguridad se fue, no sabes lo mucho que deseaba que fueras tu quien me hacía esa visita.

No iba a mentir, esas palabras le alegraron.

- Parece que no se cansa.

- No, es realmente molesto.

- Creí que buscaba hablar las cosas y que pudieran arreglarse.

- Digamos que no es del todo un genio, vino a rogar que por lo menos le hiciéramos un préstamo para conservar el edificio principal de su corporación, aún no es de dominio público, pero he oído de mi padre que por mal uso del dinero se encuentran en quiebra.

- Entonces ahí está el por qué de su insistencia contigo para que pudieran estar juntos.

-Pero está claro que no, sabes que ya tengo otros intereses y él no encaja en mi mundo, aún si el busca hacerse un espacio a la fuerza.

- Parece demasiado decidido a no dejarte ir en un rato, y menos ahora que tiene tantos problemas financieros.

- Tienes razón, no va a dejarme en paz al igual que los medios, a menos que les dé una buena razón para dejarme en paz de una vez por todas, que se les acabe la noticia, que pueda hacer que Victor se aleje y que esas molestas cámaras por fin dejen de sacar conclusiones, notas falsas y sus estúpidas especulaciones.

- Lenguaje...

- ¿Enserio? ¿También vas a reprenderme igual que a tu amigo?

Steve rió.

- Bueno, quiero que todo el mundo me deje en paz para poder seguir sin que nadie a mi alrededor salga perjudicado. Steve, eres importante para mí y no quiero que esas sanguijuelas te lastimen con sus comentarios...

- Pero entonces ¿Qué tienes en mente? Habías dicho la parte de dar una buena razón, pero después no me dijiste nada.

- A eso iba Rogers, pero no es algo de lo que se deba hablar por llamada, es algo que amerita una reunión de emergencia.

- ¿Reunión de emergencia?

- ¿Estás en casa?

- Si, llegué hace un rato.

- Estaré ahí en treinta minutos.

Y sin más, la llamada terminó y Steve se dirigió a la cocina para no recibir a su visita con las manos vacías.

Continuará...