El efecto de un deseo

casi un beso y la pelea

De verdad lo decían, se lo recalcaban "dime ¿Cuándo se te va a presentar una oportunidad así?" tal vez tengan razón, veía su techo y se decía así misma —por favor soy tan fea y encima orgullosa, tengo que hacerlo, ceder— sin querer abusar tanto de la auto compasión, suspiraba con la posible situación del querer y poder.

¡No esperaba menos de ella! —Hay Alex de mi corazón ¿Qué se sentirá un beso tuyo? — de más estaba en querer comentarle de su experimento, aunque en el fondo cree que la rechazaría sin ningún tipo de piedad <<actitud que hasta ella misma le daría la razón>> aunque en su mente se dice mil veces "no seas tonta" o ilusa, pero desde que lo vio por primera vez no pensaba en otra cosa.

Como cada día Alex se cercioraba que no hubiera nadie en su entorno, ya en los pasillos tomo a la desconocida y la llevo a su baño para poder lavarse, pero sin tener muchas opciones tuvo que entrar con ella en caso de que venga alguien más —ni se te ocurra mirarme— con algo de desconfianza, logrando que Alex se riera un poco

— ¿ok? Me voy a dar la vuelta y siéntate con toda confianza— sin más solo volteo para ver su celular y con ganas de hacerlo y solo llamo a Amy, pero no contestaba

— ¿si sabes que existe los textos no?

— ¿textos? ¿En qué año te quedaste? — arrugando su expresión como si para ella hubiera pasado mucho tiempo, pero no le quiso responder solo dejo que el sonido del agua hable —si eso pensé— dejando en claro solo la llamo nuevamente hasta contestar

— (¿y ahora qué?) — al escucharla de esa forma no pudo evitar sentirse ofendido con ganas de preguntar que bicho la había picado — (che perdón, pero tuve una horrible pesadilla y no pude dormir bien) — con una voz claramente cansada, ya que ni siquiera había dormido

— pues si la verdad las pesadillas son un problema— acordándose de el mismo cuando estuvo en ese lugar, pero para el si era real y pensaba que tal vez a ella le paso lo mismo —si imagino como podrías sentirte confundida extrañada y hasta sintiéndolo como si fuera real— recordando esos episodios

— (apoco me estas insinuando que me paso exactamente lo mismo que a ti)

Sin más solo confirmo esas afirmaciones como si estuvieran conectados ese miedo en los dos de como cosas paranormales les pasa y se preguntaba ¿Por qué? Ese deseo los afectaba demasiado, por un segundo Amy quería terminar con todo y volver a como estaban, miserables, pero sin el peligro y confusión que estaba sufriendo, aun así, no se atrevía a mencionarle a Alex de esto pues también se trataba de su vida y por esa razón quería irse lejos de todo

— escucha de verdad no sé si me vas a aceptar de nuevo en tu vida por un segundo hasta pensé en volver a como era antes— eso era ridículo ¿había escuchado bien esas palabras? Simplemente no lo creía ¿Por qué el sacrificar su felicidad?

— (si lo hubieras considerado no quisiera saber que yo sea esa razón) — conociéndolo bien ese silencio lo supo interpretar —(al menos dame una razón concreta y si lo haces iré directo a tu casa sin peleas ni incomodidades) — lo había atrapado y como si se leyeran la mente entre ellos solo corto la llamada dando una pequeña risa de su parte.

Con miedo presentía que Amy esperaba ese corte por el también reía por conocerse tan bien, suspirando se imaginaba con ella en un sueño donde estaban en contra del mundo como así fue cuando se conocieron cuando lo defendió por primera vez esa rudeza le llamaba tanto la atención lo intrigaba incluso lo atraía —las chicas malas y tímidas son una combinación muy interesante— pero solo podía escuchar unas risas, hasta notar como la extraña salió de la ducha con una toalla envolviéndola

— ¿apoco te gustan las tímidas y malas? Curioso solo cumplo uno de dos— captando su atención solo esa extraña quería acercarse más el, se podía notar cierta tensión en ellos de alguna forma Alex no la aparto y sin notarlo poso sus labios con los de el de una forma delicada, pero comenzaba a acercarse más y antes de preguntar ya estaba encima —es como si fuera parte de un sueño— intentando quitarse la toalla, pero el solo podía recordarla