♡Fastlove ♡ || kokonui [TERMINADA]

XII.

—Odio a ese maldito bastardo.— Hajime se quedo mirándose frente al espejo, tenía marcas en el cuello, clavícula, hombros, pecho, abdomen, muslos e incluso en cerca del tobillo tenía dos pequeños chupetones.

—¿Tendrá un fetiche con eso?— Rin sostenia una copa observando a su amigo que solo usaba unos bóxer. En la mañana recibió una llamada de Hajime pidiendole que fuera por él envio la dirección y ahora estaban en el departamento del pelinegro.

—Supongo que si, las veces que nos hemos visto me deja un recuerdo.

—¿Te marca como de su propiedad?—Hajime guardo silencio ¿y si eso era? Seishu quizá se enamoro de él y por eso hace eso.

—¿Se puede enamorar al primer acostón?

—Sería estúpido aunque puede pasar. ¿Te dijo que se verían después?

—No.—Hajime se coloco un sueter de cuello largo para ocultar sus pecados. Aunque pareciera extraño, no le dijo absolutamente nada solo le acompaño al estacionamiento vieron a Rin llegar y se fue. Tampoco durmieron juntos entendería si fuese la primera vez que no era el caso en ellos.— Supongo que esta bien, yo no quiero involucrarme con un hombre, ni siquiera se porque cedí.

—Es verdad, siempre estabas rodeado de lindas chicas y las follabas en cambio ahora un chico lindo te hace morder la almohada ¿que mierda Koko?— Rin comenzo a reirse, Hajime rodo los ojos resignandose a la imprudencia del rubio con mechas azules.

— Ja ja ja muy gracioso. El punto es que fue un desliz solo curiosidad no volverá a repetirse, yo soy heterosexual, tengo novia y la amo.

Hajime no debió haber hablado por solo hablar, se comió cada una de sus palabras, cuando días después llamo a la puerta del rubio, apenas la puerta se abrió y se lanzó a los brazos de Seishu.

—Ahhhh Ahí.—  Hajime gimio alto, cada golpe en ese lugar lo estaba llevando a un viaje del cual no quería regresar.

Las embestidas de Seishu aumentaron, fue una sorpresa abrir su puerta e inmediato sentir los labios del pelinegro sin embargo no se aparto continuó besando y manoseado el cuerpo del pelinegro. El agujero del Hajime lo apretaba, es tan estrecho que lo enloquece, goza ver su culo levantado mientras aprieta fuerte las sabanas, abrazo la cintura de Hajime con su brazo levantando su torso.

—Vamos hacerlo juntos.

—Ya no saldrá nada.— Hablo entre jadeos, erizo su piel al sentir la calida respiración de Seishu en sus hombros. Echo su rostro hacia atrás buscando la boca del rubio.

— Eres un desastre.—Paso su lengua por la mejilla del azabache, volver un desastre de fluidos y lubricante a Hajime le divierte, escuchar jadear y decir su nombre entre gemidos y sollozos son música para sus oidos.

Seishu golpeo el dulce punto de Hajime una y otra vez aumentando su brusco ritmo, tomo el miembro goteante de Hajime bajaba y subia coordinado con sus embestidas. El pelinegro se retorcía de placer, lloriqueba pidiendo más y más, su razonamiento una vez mas se habia ido a la mierda solo pensaba en lo bien que se sentia cuando Inui se deslizaba dentro de él tocando ese lugar tan desconocido y maravilloso, tener sexo con mujeres no se comparaba a lo que tenia con Seishu, la rigidez de sus pezones se fue ahora gemia cuando lo tocaba o retorcia. Se corrio cuando la embestidas llegó más profundo y más violenta, aquel orgasmo se sintio majestuoso, sentía como el pene de Seishu palpitaba en su interior.