El Rancho de los Sueños

Cosecha

Finales de agosto 1844

Pasaron dos meses de pura tranquilidad.

Ni siquiera vino Jones a ofrecerme oferta por el rancho. Me sentía inquieta y todo iba tan bien que me parecía sospechoso.

- Te quieres estar quieta... Aún es de noche - se quejó Abby adormilada

Me giré hacía ella y le di un beso.

- Lo siento mi amor, es que estoy nerviosa... Aún creo que tiene que ocurrir algo malo -

Ella me acarició el rostro

- Ya lo noto - dijo con una sonrisa - Ven aquí... - dijo mientras me hacía poner mi cabeza en su pecho, me acariciaba el cabello y tarareaba una canción

Rodeé su cintura con mis brazos y me relajé

- ¿Mejor? - preguntó

- Uhm - mientras me dormía

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Me despertaron las caricias de Abby sobre mi espalda.

- Buenos días, preciosa - dijo Abby cambiando las caricias por pequeños besos

- Buenos días mi amor, te noto animada - dije en un suspiro cuando noté su mano subiendo por el interior de mis muslos hacia mi centro

Su simple roce hizo que se me escapara un gemido.

- ¿Le apetece jugar señorita Brown? - pregunté mientras me daba la vuelta

- Contigo siempre - y se lanzó a besarme

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Un par de horas después bajamos al salón y Abby se fue a realizar sus tareas.

Yo fui al establo a buscar a James, porque teníamos que vigilar el maíz, para su recolecta.

- Buenos días Maeve, te veo relajada - dijo James sonriendo

- ¿Otra vez nos has escuchado? - pregunté avergonzada

- Tu te has vuelto silenciosa, pero no se que le harás, que ella grita que da gusto... -

- No le digas nada a Abby, por favor, la última vez le dió tanta vergüenza, que no me dejó tocarla en tres días... Anda vamos a desayunar -

Me gustaba la confianza que teníamos, me sentía como si James fuera mi hermano.

Mientras tomábamos el desayuno.

- He pensado que podríamos ir al festival de la cosecha... - dijo tímidamente - Podría hacer pan de maíz y tartas de manzana... Además habrá baile... -

- ¿Tu quieres ir? - Abby asintió - Pues iremos y nos divertiremos, pero primero James y yo vamos a ver si podemos empezar a recoger el maíz -

De camino al maizal

- ¿Sabe que le has echo un vestido para ese día? - preguntó James

- No... Es una sorpresa y cuidado no se te escape -

Llegamos al campo y empezamos a revisar el maíz y llegamos a la conclusión que en dos días podríamos empezar a recoger.

- Acompáñame, hace unos días vi un manzano, recogeremos un saco para Abby, cuando pruebes su tarta de manzana, no querrás comer nada más - dije señalando en dirección al árbol

Al acercarnos vi una pequeña silueta familiar

- ¿Alo? -

- Haw Maeve, mucho alegre ver ti -