~Finjamos ser Novios~ Kookmin

18

Les invito a qué comenten mucho.

Narra Park Jimin

Estaba sentado en unas bancas de una cafetería esperando a la persona que había pedido reunirse conmigo hace unas horas mientras bebía un café y una rebanada de pastel de chocolate. Siendo sincero me encontraba con muchos nerviosismos y solo la cafeína podía tranquilizarme en situaciones de esta magnitud.

A lo lejos pude ver cómo Jeon Su-ji venía entrando por la puerta de la cafetería, inmediatamente me paré e hice una reverencia ante el padre de mi amigo.

El día que nos encontró besándonos a Jungkook y a mí fue demasiado vergonzoso, pude sentir mi rostro arder, sentí como si me hubiera humillado frente a él, sin embargo el pelinegro me dijo que me tranquilizara un poco, según Jungkook su padre no era homofóbico por lo que se lo tomaría con calma.

Eso sinceramente hizo que un peso de encima se me quitará, pues si ese no fuera el caso, toda la vida me hubiera recriminado por haber besado a Jungkook en su casa. Pero cuando me llamo para que nos reunamos me sentí muy nervioso y ansioso de lo que podría querer decirme.

—Toma asiento, Park —pidió seriamente y sin corresponder mi saludo.

—¿De que quiere hablar conmigo, Señor Jeon? —mi voz salió un poco temerosa, sentía una fuerte opresión en mi pecho.

¿Qué es todo esto?
¿Acaso me va a dar taquicardia?

—Primero hay que pedir un café, ¿No te parece? —alzó una ceja sonriendo.

Jeon Su-ji era muy parecido a Jungkook, a pesar de su edad era muy atractivo, no me quiero imaginar cómo puede ser mi amigo cuando sea adulto, sin duda seguirá siendo guapo.

—Prefiero que sea directo, Señor —pedí. No quería esperar más tiempo y que los nervios me consumieran.

—Bien —Su-ji se acomodo la corbata y dejo la carta del menú sobre la mesa —Vi que tú y mi hijo se besaron el otro día.

Eso hizo que me sonrojara completamente, mi corazón se sentía que iba a salir de su zona.

—Es porque nos gustamos...

—Creo que te estás confundiendo, Park —respondió Su-ji. —A mi hijo no le gustas.

—¿Ustedes cómo puede saber eso? —para este momento una mezcla de enojo y rabia se habían acumulado en mi pecho.

—Jungkook me lo dijo. Él sabe que tú tienes sentimientos hacia él y por eso te está correspondiendo, para que no te sientas mal, no quiere verte triste si te rechaza y por eso finge que le gustas...

En ese momento, me pare de mi asiento furioso, se que lo que estaba diciendo Su-ji era mentira, Jungkook al mirarme, abrazarme o incluso besarme me transmite muchísimos sentimientos, pude sentir como su amor iba floreciendo de poco a poco, como comenzaba a ponerse nervioso por mi cercanía o celoso cuando me encontraba hablando con otro chico.

—Todavía no termino, Park —me pidió que me sentará. Hice eso pero a la fuerza.

—Hable rápido.

—Incluso si no me crees, pero es cierto lo que te digo. Mi hijo pronto estará de novio ya que gusta de Nayeon, él me lo comentó y me pidió que agendará una cita con élla —esto no puede estar pasando.

No sabía que decir, simplemente me quedé en shock.

—Tambien está la cuestión de ser Actor. Estar a tu lado, ayudándote a que puedas conseguir pagar la deuda ha provocado que deje de seguir sus sueños para apoyarte, Alejate de Jungkook para que pueda seguir con su sueño de ser actor, hazlo por él y por ti y busca tu felicidad. Yo te ayudaré a pagar tu deuda, solo no te interpongas en el camino de mi hijo y déjalo ser feliz con Nayeon.

Después de eso no había querido escuchar más, estaba muy furiosa por el comentario de Su-ji, pensé que era falso hasta que unos días después vi a Jungkook tomado de la mano con Nayeon, ahí caí en cuenta de mi verdad y lo falso, mentiroso que era Jeon Jungkook.

Huí del lugar llendo a la casa de Tae en donde me iba quedar por esta noche. Al llegar ya estaba más tranquilo así que no quise comentarle mucho a él sobre lo que estaba pasando, claramente Tae me encontró raro pero le mencioné que estaba cansado de estar bailando todo el día, y en parte era real.

—Jimin, ¿Puedo confesarte algo? —preguntó Tae.

Ambos estábamos acostados en la cama boca arriba mirando hacia ningún lado.

—Si, Tae —le mencioné girando mi cuerpo hacia él.

Él sonrió con timidez.

—Estuve hablando con Jungkook todos estos días... —eso provocó que yo arrugara mis cejas —Creo que me gusta.

Me quedé sorprendido por la situación, un nudo se me formó en la garganta y tenía muchas ganas de llorar. Tiene sentido que Tae me diga esto, porque yo aún no le he hablado nada sobre lo que ha pasado con Jungkook y yo, pero al igual me duele todo esto.

—¿Crees que debería invitarlo a salir? —se cubrió el rostro ligeramente sonrojado.

—¡Haz lo que quieras! —alce la voz y me pare de la cama para marcharme de su casa —¡Y si quieres quédate con él!

Salí corriendo de su habitación, Tae estaba confundido así que intentó perseguirme.

Narra Jeon Jung kook.

—¡Ábreme la puerta, Jimin! —toque la puerta de la casa de Tae un par de veces.

Sabía que estaba aquí, pues Tae por la mañana me había comentado que Jimin le había pedido que si se podía quedar ahí con él.

De pronto vi como Jimin salió de la casa de Tae un poco enojado, se paró cuando me miró, pero igual siguió con su caminó hacia las peligrosas calles. Tiempo después pude alcanzarlo en mi coche.

—Súbete —le ordené pero siguió caminando —Es muy peligroso para que estés a estas horas aquí.

—No me importa —contestó ignorandome e intentando caminar más rápido.

Lo único que pude hacer para que no siguiera caminando era interponer me con la camioneta en su camino y luego bajarme para convencerlo de subirse conmigo o si quiera hablar de la situación que se sale de contexto.

—Jimin, por favor déjame explicarte bien las cosas, mi amor —lo acaricié del brazo.

—No me molestes —intentó irse pero lo detuve por la cintura.

—Por favor —le pedí nuevamente pero ahora envolviendo mis brazos en su cuerpo.

—No me interesa lo que me tienes que decir, ya veo que eres un mentiroso que le gusta jugar con mis sentimientos —intentó quitarse.

—Claro que no es así —dije en susurro a su oído, recargandome en su hombro —Ya te lo había dicho, me gustas mucho.

—Pues ya no te creo —esta vez pudo quitarse de mi agarre —No me gusta que me mientas, ¿Porque no me dijiste que te hablabas con Tae? ¿Que pasa con Nayeon?

—¿Haces todo esto por celos? —alzó una ceja —Te recuerdo que solamente somos amigos, no te deberías de enojar por esto, y ni siquiera te debería informar de las cosas que hago, no soy de tu propiedad, eres simplemente mi amigo.

De pronto los ojos de Jimin se pusieron cristalinos.

—¡Vete al carajo Jeon Jungkook! —me propinó una cachetada —No quiero volver a verte en mi vida, has dañado mi dignidad y mis sentimientos y yo no merezco que me traten de esa manera.