Voto de silencio [Garu y tú]

captítulo diecinueve

Ya era el día de la fiesta, y Ching y Pucca estaban emocionadas viendo que ponerse, yo estaba acostada mirándolas abrazando una almohada, sonriendo viéndolas emocionadas, haciendo que esa emoción se me contagie.

Pucca salió con un vestido en un armador, yo fruncí el ceño, haciendo una cruz negando.

—Buuuh, no, para nada.

Ching asintió mientras se cepillaba el cabello.

—Totalmente de acuerdo, se te verá raro

Ella se miró al espejo, para luego soltar el vestido por donde yo estaba, me cayó en la cara y gruñí, sacándomelo de la cara, dejándolo a un lado.

Solté un bufido mirando al techo, y después mis manos, estaba un poco aburrid, había pasado literalmente una hora desde que habíamos empezado a ver la ropa.

—¿Y tú___? ¿Qué te pondrás?

Ching giró su silla hacia donde yo estabam me encogí de hombros ya sentándome recta viéndola.

—Bueno, vi un vestido amarillo así que probablemente use ese

En el fondo estaba muriendo, esperando que la opción que escogí fuera lo suficientemente buena para impresionar a Garu.

No, no digas eso ___, ten amor propio.

Negué con la cabeza, sacando los pensamientos intrusivos que tenía, me distraje también cuando escuché la puerta del baño, supongo que se fueron a cambiar. Tomé el vestido amarillo, viéndolo en el espejo, mirándome.

¿Será suficiente, yo seré suficiente?

Escuché como a los 10 minutos se abría la puerta, volteé y cuando las vi sonreí aplaudiendo.

—Se ven muy hermosas chicas.

Exclamé, les di una vuelta con mi mano, sonriendo.

—Te toca ____, vamos.

Entré al baño, sacándome todo lo que tenía puesto, mientras me vestía con esto, me miraba al espejo, no puede ser que esté crusificando solamente por él.

¡Me rindo, caí, caí completamente en la locura del gusto!

No les voy a mentir, si estaba algo nerviosa, no sé, quería ver la reacción de Garu, sé que antes no me importaba su existencia, pero ahora que había reaccionado a mis sentimientos, es más fácil pensarlo y hablarlo.

Con Dada, pero hablarlo.

Salí, me miré al espejo y sonreí, no me veía mal, ¿saben qué? Me gusta, por un momento estaba nerviosa, pero ya no.

Mentira si lo estoy.

Jamás me había arreglado para mi, fui a una o dos fiestas, ya que mi papá no me dejaba salir tanto, y quería que me concentrara en mi entrenamiento, pero por esta vez, dejaré eso a un lado y me concentraré en divertirme. Aplaudí, y bueno, bajamos a esperar los invitados. En unos 20 minutos llegaron estos, Abyo puso la música y comenzamos a bailar. Pucca gritó y se acercó a la puerta, supongo que había llegado Garu.

Lo busqué con la mirada, y efectivamente, ahí estaba. Chocamos miradas pero yo la quité rápidamente mirando a Ching. La tomé de la mano y fuimos en medio de todos, bailando y divirtiéndonos. 

Fui a ver ponche, y tomé un vaso para ponerme un poco en el ambiente. Sentí una mano en mi cintura así que pegué un codazo. Volteé y vi que era Garu, se tomó la nariz a lo que yo me disculpé, lo ayudé a pararse lamentándome.

—Lo siento lo siento, no sabía que eras tú.

Él sonrió, señalando con mi dedo el vestido, estaba efectamente sorprendido, ¿pero de buena o mala manera?