Garu se paró, extendió su mano hacia mi y yo la tomé, parándome lentamente mirándolo fijamente, hasta ya estar de pie.
No podía dejar de mirarlo, no tengo idea porque.
Sé que era correspondido porque él también me estaba viendo de la misma manera que yo, los dos no sabíamos porque, pero, así fue, estábamos sumidos en la mirada del otro. Reaccioné cuando Pucca se le abalanzó encima a Garu, besándolo y abrazándolo fuertemente. Miré a Abyo y a Ching quienes estaban mirándome.
—¿Estás bien? te vimos algo perdida —Exclamó Ching acercándose a mi, colocando su mano en mi frente.— Te ves pálida y perdida.
Pestañeé un par de veces, negando sonriendo nerviosa, y es verdad, me había sentido un poco rara, como que me dieron escalofríos o algo por el estilo, jamás me había sentido así.
—Si, no sé, como que perdí un momento mi mente. —Confesé, sentándome por un momento, mirando al suelo. —Solamente perdí un momento el aliento.
—Siente orgullo,___, nadie le había dado tanta pelea a Garu
Abyo dijo emocionado, alzando su mano para que chocara, choqué un poco abrumado, para luego voltear a verlos, sonriendo levemente.
Miré por última vez a Garu y Pucca, Pucca estaba de espaldas. El mencionado alzó la mirada, volviéndome a ver, yo sólo lo miré de arriba a abajo y me fui con los demás ignorando su mirada.
Caminamos por el pueblo hasta que escuchamos como todas las chicas iban corriendo hacia el muelle, empujándonos y corriendo hasta este, una literalmente pasó encima mío, me tomé el brazo ya que me empujó un poco fuerte.
—¿Qué está pasando? —Traté de divisar algo colocándome de puntillas. —¿Es algo malo?
Fui interrumpida cuando un barco enorme llegó, era bastante, demasiado llamativo.
Muchas chicas gritaron, haciendo que me tape los oídos frunciendo el ceño. Este paró y un señor con cabello blanco, sacó un control. Música fuerte comenzó a sonar, bajé mis brazos y vi como comenzaban a salir guardaespaldas. De la nada, salió un chico vestido, estaba extremadamente lleno de joyas, con unas gafas de sol, y un peinado que se veía, raro. Me acerqué a Ching y me puse a su lado un poco curiosa preguntando.
—¿Quién es el?
—¡Es Jackson Williams! Es súper famoso
—¿Ah si, y por qué?
—Hmmm, no lo sé, ¡pero es rico y súper famoso!
Bajó y una fila enorme de chicas se formó para tomarse una foto con él o hacer que les firme el brazo, enarqué una ceja, y fue peor cuando vino una multitud corriendo hacia nosotros empujándonos.
—Una a la vez chicas, el señor William está para todas.
Me quedé seria mirando el gran espectáculo, hasta que volteó hacia mi y puso cara de sorprendido, mirándome con los ojos abiertos completamente, me señaló, me volteé para ver quien era pero desgraciadamente, si era para mi.
—¿Quién es esa hermosa mujer?
No puede ser.
—Ansío tenerla en mis brazos
Se comenzó a acercar, lentamente hacia mi. Todas las chicas me miraron mal, y Ching y Abyo estaban conteniendo la risa, Pucca llegó y al ver todo se tapó la boca con las manos, queriendo reírse también. Miré a algún lado donde pueda esconderme, hasta que vi a Garu, quien me hacía señas para que lo siguiera. El chico cuando estaba a punto de besarme, jugué con un truco.
—Primero tienes que cerrar los ojos, ¿no? —Traté de sonar seductora, sonriendo con mis labios. —Vamos, ciérralos.
El chico sonrió de lado.
—Soy irresistible
Dijo con aires de superioridad, como si él fuera el hombre más guapo que había, enarqué una ceja:
Desagradable.
Coloqué a una chica con cabello azul, en mi lugar, y salí corriendo hacia donde estaba Garu. Comenzamos a correr hacia una canoa, me lancé y me escondí, este comenzó a remar rápidamente adentrándonos en el mar.
—¿Quién es él, y por qué de la nada piensa que todas las vaginas se humedecen al verlo?
Sacó un panfleto, y me lo mostró: era un modelo estadounidense que estaba en la mayoría de portadas allá en su país. Era millonario y tenía una que otra canción, ¿y eso qué?
—Así que es un modelo, interesante.
Arrugué el papel, dejándolo en el suelo de la canoa, no me podía importar menos sus canciones, su dinero, él en general.
Bueno...¿y ahora qué?
Estaba sola con Garu, y el ambiente estaba un poco tenso desde nuestra última interacción.
Me senté, y él se sentó a mi lado, los dos estábamos un poco cansados, y el silencio no ayudaba mucho.
Miramos como lentamente el pueblo se hacía chiquito, no estábamos tan lejos, pero si lo necesario para que no nos encuentren. Tocamos tierra, así que nos sobresaltamos, salimos y vimos que era una pequeña isla, sonreímos mirándolos y salimos, cuando veamos el barco irse, podremos volver al pueblo. Nos sentamos los dos, y comenzamos a meditar, para que el tiempo pasara rápido. No sé cuanto tiempo estuvimos ahí, pero al abrir los ojos, el barco ya no estaba, sacudí levemente a Garu, pero este seguía meditando.
—¿Garu, me estás escuchando? —Lo llamé en repetidas ocasiones, acercándome a él para ver si respondía. —¿Garu?...
Me acerqué para abrirle un ojo, pero antes de eso él ya había abierto los ojos, me quedé fría, los dos nos quedamos así por un tiempo, de nuevo. Yo tenía mi mano en su hombro, y sentí como su mano subía lentamente, hasta mi hombro, para depositar lentamente su mano sobre la mía.
¿Qué fue eso, gustó o no le gustó mi mano allí?
Se paró y miró que el barco ya se había ido, así que, los dos subimos a la canoa y regresamos a la aldea. Cuando fue así, vimos que Jackson estaba tocando de puerta en puerta buscándome, por suerte, la casa de Garu quedaba literalmente en medio del bosque, así que, silenciosamente fuimos para allá.
—Tendré que dormir contigo, genial —Rodeé los ojos, mirándolo. —No creas que estoy concenta.
Exclamé, tocándome el puente de la nariz, ¿este día podía ser más sorprendente? Pareciera que todo estaba conspirando en mi contra.
El golpeó suavemente mi hombro. Cuando llegamos, entré a la casa y vi que era bastante humilde, estaba bonita, de hecho, me pareció tierno, era muy casera y sencilla. Me mostró donde estaba el baño, la cocina, y la cama.
Había una sola cama, y ningún sillón.
Tragué en seco, mirando la cama pensando que podía hacer para evitar dormir con él, ¿decía que roncaba, que me tiraba gases o algo así? Se me venían mil y un excusas pero no sonaban convincentes, es más, no sonaban decentes en general. Lo miré riendo nerviosa señalando el suelo.
—Yo, dormiré en el suelo, no te preocupes, no quiero ser una molestia. —Me estaba ya preparando para dormir en el suelo. —Estaré cómoda.
El negó, tomó otra sábana y almohada y las colocó en el suelo sentándose, interpretando que él dormiría en el suelo.
Yo
no...
—Duerme conmigo
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Voto de silencio [Garu y tú]
FanfictionSer obligada a entrenar por tu padre, tener la presión de ser la mejor ninja, obligada a ser un voto de silencio que no quería, ser de tu aldea y tener la carga de que eres la heroína eran cosas de __ Huang. Con coraje de todos y de todo, dejó su v...