A World That Unites Us [Spreen x Juan]

Perdón

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𝗡𝗮𝗿𝗿𝗮 𝗦𝗽𝗿𝗲𝗲𝗻

Tener a Juan cerca de nuevo me hacía sentir completo, mi necesidad de volver a tenerlo cerca de mi me cegó por completo, estaba tan angustiado por lo que le pasará a él que no me di cuenta del mal que me hacía a mi mismo. Tenía la cabeza tan nublada, me había comportado como hace algunos años... cuando perdí a Conter.

No pense bien las cosas y terminé haciendole daño a las personas cercanas a mi, era un idiota y me había comportado como tal, sabía que marcar a Juan fue un error muy grande pero no tenía idea de que nos íbamos a separar de la nada.

No estaba preparado para esta situación, ya lo había vivido hace unos años pero no recordaba lo mal que la pasaba al separarme de la persona a la cual estoy unida. Mi cabeza estaba hecha un caos, hice cosas de las cuales me arrepiento, tal vez debería disculparme con Mariana y sobretodo Mayichi...

-Spreen?!- La voz de Juan me saco de mis pensamientos, -Sal de esa ducha de una vez! Los chicos ya están por llegar!- Gritó desde las escaleras. Había olvidado que venían a vernos. Cerré el grifo para que el agua dejara de caer.

Apenas si pasaron un par de horas desde que Juan activo los portales, ambos teníamos la ropa mojada por la tormenta que había en el pueblo naranja así que Juan tuvo la gran idea de que fuéramos a su casa... Y si, aunque mi casa estuviera más cerca de nosotros, él no quería desaprovechar la oportunidad de enseñarme su grandiosa construcción al momento, fue totalmente innecesario ir hasta su montaña pero no quería quitarle la ilusión, y no voy a mentir, el santuario que hizo era precioso.

-Ya voy!- Grité para que me escuchara porque yo estaba en el "sótano" de su casa y él en la parte de arriba. Salí de la ducha, me seque con una toalla y me puse la ropa que Juan me había prestado.

Subí las escaleras y me quedé esperando a Juan sentado en la entrada del santuario, este lugar era bastante tranquilo, ahora entendía porque Juan decidió vivir en esta montaña y tan lejos del pueblo, es el sitio perfecto para relajarte y estar tranquilito sin que nadie te moleste.

-Estas reflexionando sobre la vida o que?- Voltee mi cabeza para ver a Juan, estaba bajando las escaleras trayendo en sus manos un par de tazas, -Carre me escribió y dijo que ya estaban subiendo- Él se acercó a mi y procedió a sentarse mi lado, -Ten un chocolate caliente por si aún tienes frío- Me ofreció la taza y yo la tomé con delicadeza, -Le puse algunos malvaviscos- Solté una pequeña risa al escuchar eso.

-Luego debería ir a hablar con Mariana y Mayichi...- Soplé suavemente el chocolate, -Tengo que pedirles disculpas- Sentí cómo Juan puso su mano en mi cabeza para acariciar mi cabello.

-Iré contigo okey?- Que dijera eso me sorprendió un poco, -No quiero separarme nunca más de ti Spreen...- Se acercó a mi y beso dulcemente mi mejilla.

Él era tan tierno... no paraba de sonreírme, lo único que podía pasar por mi cabeza ahora es lo perfecto y especial que es para mí este chico, no lo cambiaría por nada ni nadie en el mundo.

-Juan no sabes lo mucho que te a...-.

-Juuuuaaann! Spreeeen!- No pude terminar de hablar por el susto que me dió ese niño...

-Achooochee!- Juan hablo muy contento. Él se levantó para acercarse a los chicos, yo simplemente lo seguí, y dejé la taza en el suelo, -Tardaron mucho no?- Pregunto curioso.

-Todo fue culpa de Auron, es un viejo que no puede subir unas escaleras- Dijo Carrera acercándose a nosotros. Acaso él tenía un gato en sus manos? Un momento, esa es...