Si me amó.
Narra Evangeline:
—¡Hey!— Russ me cargó desde la cintura y besó mi oreja.
—Creo que tú también me has extrañado— insinué al tocar el suelo de nuevo.
—¿Cómo no hacerlo? Eres una luz en nuestras vidas, por cierto, te ves como una puta diosa con ese nuevo look, Charles lo amará.
—Sin duda lo hará— Mark cruzó la puerta principal y me saludó con un beso en la mejilla y un abrazo duradero.
Pude sentir su corazón latir con rapidez y sus hombros tensarse.
—¿Estás bien?— pregunté deslizando mi mano por su espalda.
—Sí, ¿Por?— negué y le resté importancia.
—¡Hasta que llegan!— Hans salió de la cocina con un delantal blanca y un sartén sucio— ¿Trajeron los camarones?— Russ levantó una bolsa congelada y asintió.
—Aquí están, guapo— se puso de puntillas para besarlo en los labios, alcé las cejas y Mark rio burlón cuando Hans le apretó el trasero.
—No puedo ver eso— Honee hizo una mueca, seguro recordó nuestra charla de sexo y la poca discreción de Hans con respecto a lo que hace con su novio—Por cierto, Russ ¡¿Por qué hay una fotografía mía y de Newt en el celular de Hans?!
Russ se rascó la cabeza con nerviosismo y empujó a mi hermano de regreso a la cocina para evitar los reclamos de Honee.
—Ehhh... ¿Quién es Newt? Mejor dicho ¿Quién eres tú?
—¡Te voy a matar!
—¡Niña salvaje!
—¡No corran en mi cocina! ¡Si derraman algo ustedes limpiarán!
Los tres desaparecieron, no pude ocultar mi risa y volví a abrazar a Mark.
—Puede que a muchos les parezca insoportable este tipo de momentos con sus familias, pero yo amo verlos así— avanzamos hasta la sala de Hans, donde yo estaba viendo una película con Honee antes de que los dos hombres llegaran.
—Cada día es una nueva aventura.
—Eso es un hecho.
—Uh, ¿Y qué tal?— preguntó sentándose a mi lado en el sofá, crucé las piernas y jalé la mantita con la que mi hermana se estaba cubriendo, si bien, afuera hacía calor, Hans había bajado la calefacción, por lo que hacía frío dentro de su hogar.
—Normal, me puse al día con mis hermanos... me comentaron acerca del juicio de papá y sobre qué Stephan ya no está— decirlo era un alivio para mí, seguía preocupada y desconfiando de él, pero al tenerlo lejos podía tener un poco más de tranquilidad— Hunter es el único con quien aún no he hablado, no responde mis llamadas.
—Debe estar disfrutando de Irlanda.
—Eso espero. Y tú ¿Cómo estás?
—Mm, bien, ya sabes... algo... uhm... abrumado por la boda y los exámenes de mis alumnos— quise preguntar sobre más cosas, pero Mark se me adelantó y cambió el tema— ¿Por qué ves esa película tan deprimente?
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La reina de las constelaciones (completa).
Teen FictionEvangeline y Mark han sido mejores amigos de toda la vida, han estados en los buenos y en los malos momentos, conocen las fuerzas y las debilidades del otro. Prometieron nunca abandonar al otro y así ha sido. Hasta que ella no soportó más y se march...