ೋ• Compañeros predestinados •ೋ

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Se sentía muy triste con la información que le acababa de dar su hermano, pensó que había dejado a esa persona y sus malas intencionadas acciones en el pasado, pero no. Estaba muy frustrado y tenía unas inmensas ganas de llorar.
Gustabo intentó calmarlo y detenerlo de querer ir a ver cómo había quedado su tienda, ya que lamentablemente por el momento no podría hacer nada; le convenció a duras penas el que no saliera hasta que atraparan a ese lunático pero para nada le había logrado calmar. Decidió salir a tomar un poco de aire fresco para calmar su pesar pero por alguna extraña razón en vez de dirigirse al jardín fue hacia la oficina de Viktor y cuando menos sintió estaba tocando la puerta. Solo de pensar en verlo hizo que se le cristalizaran los ojos por las lagrimas retenidas, se le hiciera un nudo en la garganta y le temblara su labio inferior por las ganas de querer llorar.

Le abrieron la puerta y sus ojitos empezaron a buscar a su peligris en la habitación hasta que conectó su mirada con la de él. Pequeñas lágrimas se derramaron de sus ojos por lo que sentía, pero al ver la mirada cálida y preocupada de Volkov le hizo sentir en el fondo que de alguna manera todo estaría bien. Se sentía a salvo.

Al ver esas lágrimas bajar por sus mejillas hizo que Volkov quisiera asesinar a quien le haya hecho llorar y su tigre parecía estar de acuerdo con él ya que hacía todo lo posible por querer salir y cazar a quien haya hecho llorar a su compañero. Se puso de pie y ordenó que se retirarán para quedarse a solas con su Horacio; todos salieron excepto Sunny, quien con delicadeza empujó hacia dentro de la oficina a Horacio y cerró la puerta detrás de él.

Camino hacia su compañero hasta quedar uno frente al otro, dejando apenas unos centímetros de distancia entre ellos. Los ojitos de su compañero no paraban de llorar por lo que en silencio levantó ambas manos y las posicionó en sus mejillas; le destrozaba ver a su compañero tan triste, suavemente retiró las lágrimas que se derramaban por sus mejillas con sus pulgares. Se vieron fijamente sin decir nada por varios segundos y con delicadeza le dio un beso en la frente y acto seguido le abrazó.

Fue todo lo que necesito para romperse en llanto, Horacio enterró su rostro en el pecho del peligris y le abrazó con fuerza. Lloro por todo; la frustración al ser tan ingenuo, la tristeza por descubrir como quien consideró su amigo le traicionaba, el dolor de ver como todos quienes conocía lo rechazaban y la profunda soledad que sintió al ver que en realidad las personas no eran lo que aparentaban ser, eran una mezcla de emociones que le provocaba que no parara de llorar.
Volkov no hizo ninguna pregunta, sólo lo sostenía y le devolvía el abrazo con fuerza mientras acariciaba su espalda. Le rompía el corazón escuchar a su compañero llorar pero ahora mismo no podía hacer nada más que consolarlo.

Perdió la noción del tiempo de cuanto había estado llorando entre los brazos de su peligris, sorbió su nariz con mocos y por fin dejó de llorar. Levantó su mirada y se percató de que su Viktor lo veía con una calidez que le hacía querer llorar de nuevo. Sin soltar su abrazo se puso de puntillas y le dio un pequeño beso en los labios, provocando que V le regresará también el beso, pero no deteniéndose ahí.

Horacio cerró sus ojos hinchados y sintió como Viktor le daba un beso en sus párpados, luego en su frente y mejillas, dándole por último un beso esquimal. Se sentía tan apreciado.
Se aclaró la garganta - G-gracias por consolarme, mi hermano me contó sobre lo que ocurrió con la tienda y quién lo hizo... también me dijo que te contó porque me mude aquí - le murmuró. El peligris asintió con la cabeza y esperó pacientemente a que continuara.

- Bueno, no hay mucho que decirte ya entonces. Quería salir a tomar un poco de aire fresco para calmarme pero cuando menos sentí vine a buscarte - comentó con un hilo de voz. Luego de un rato estar abrazados sin decir una palabra, le surgió una duda. - V-volkov, emmm el que seas mitad tigre oh bueno, no seas del todo humano... ¿Hace que me sienta tan atraído hacía ti? ¿Expulsas feromonas o algo así? - le preguntó, haciendo que Volkov riera. Es tan adorable pensó, a la vez que levantaba una de sus manos y las posicionaba en su mejilla. Negó levemente con la cabeza.

Los ojos del Alfa [En revisión] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora