Destinado al Alfa

15. Promesas

Cuando Brent besó a Zasha frente a las cámaras, fue el momento mas insulso y vacio que vivió. No habia nada en ese beso, ni una pizca de gusto como en el pasado.

Y todo lo atribuía a Aria.

Despues de sus besos, no habia nadie mas que pudiera robarle el aliento y meterse en su mente las veinticuatro horas del día.

Durante la fiesta, vió con enfado cómo Aria se divertia con otro, uno que ostentaba ser mejor que el. Un alfa libre, soltero, joven, bien parecido, de buena familia y de gran caracter, incluso parecian el uno para el otro.

Tras ver a su lado, a Zasha que no dudaba en sacar a relucir entre sus colegas y jefes, que estaban comprometidos y prontos a casarse, sintió por primera vez temor de esos planes que en el pasado le parecian estupendos.

Ambos se conocieron cuando Brent visitó el pais de Zasha, allí se grabaron parte de la película que protagonizaba, entonces en una noche de bar, lo conoció, la quimica fue instantánea, bailaron y bebieron hasta terminar en un hotel barato cerca al bar. Para Brent pudo ser un simple acostón con un omega bello, pero fue tarde cuando confirmó que Zasha nunca se entregó a nadie antes. Las alarmas en su cabeza empezaron a advertirle cuando se enteró que el omega provenia de una familia adinerada y con poder en ese país, y si a Zasha le diera la gana, hasta podría morir a manos de mercenarios, pero lejos de su loca imaginacion, Zasha no tenia ninguna mala intencion, de hecho no le reclamó nada y continuaron viéndose.

De este modo, empezaron una corta amistad durante su estadía, hasta que las cosas se dieron solas y se hicieron novios, lo cual era una proeza para Brent, pues luego supo que Zasha era de los omegas solteros mas codiciados y todo debido a que él podia dar a luz vida. El omega era un paquete entero de cualidades que Brent incluso se sintió afortunado de conocerlo. Asi fue que su relacion se tornó seria, Zasha era muy bello y con habilidades domesticas interesantes, buen cocinero en sus tiempos libres y un excelente actor. Brent en poco se acopló a la vida de la familia Huston, quienes aprobando la relacion, fueron quienes lo impulsaron en su carrera artística mas rapido de lo que tenia estimado.

Parecia que su vida se habia solucionado y aunque no estuviera loco de amor por Zasha, sí congeniaban muy bien, asi que pensó que eso era amor.

Nada mas alejado de la realidad.

—Brent, estas muy distraído— Zasha le sacó de sus pensamientos. —Te pregunté si querias bailar— Repitió.

—No me apetece— Respondió seco.

Zasha frunció el ceño y tuvo que llevarlo a un lugar mas discreto.

—Ahora veo que mi aparición aquí si te molestó mas de lo que creí.

Brent bufó, pues eso era mas que obvio.

—Si, me molestó que te metieras en mi zona de confort sin preguntarme siquiera. ¿Qué pasó con eso de respetar espacios y actividades?

—Oye, estas siendo un idiota. Creo que bebiste mas de la cuenta y no pretendo tolerarlo ¡Vete que no quiero verte!— Lo echó.

Lejos de enfadarlo mas, eso pareció lo que buscaba y no dudo de marcharse, ignorando los ojos humedecidos de Zasha.

Brent observó a Aria marcharse o huir de su acompañante, asi que fue mas veloz en seguirlo.

En su camino se interpuso London, quien no dudó en evitarle el paso.

—Quítate o no respondo de mi. Hace tiempo que tengo ganas de partirte esa cara idiota de felicidad que pones— Advirtió Sandini.

—El sentimiento es mutuo, señor Sandini, pero no puedo permitir que siga jugando con Aria...