Destinados / Lewandowski x Gavi

Lavanda

Lavanda

(Robert Lewandowski)

-¿Lawenda? ¿Acaso tu pequeño amigo confianzudo sabe el significado de esa palabra en polaco?- le entregué una copa de vino a mi hermana Milena, ella me miraba fijamente como si quisiera analizar mis pensamientos haciéndome sentir nervioso –es lavanda en español si no me equivoco; madre, usted que opina?

Mi madre y mi hermana estaban de visita por unos días en Barcelona, pero sobretodo el mayor propósito de su estadía era saber mi situación actual tanto en lo profesional y como estaba lidiando con mi reciente divorcio, además estaba a cargo de dos pequeñas niñas. En medio de las miles preguntas que me hicieron comenté sobre mi compañero del club que no podía sacármelo de la cabeza últimamente, llamando la atención de mi hermana mayor.

-a mi me parece que Robert se lleva muy bien con aquel jovencito – mamá nos enseñó una fotografía donde Gavi se había lanzado en mi espalda; ella dejó a un lado su teléfono móvil, acarició con ternura mis mejillas y me dio un beso en la frente – lavanda... siempre tenías una debilidad con esa flor, recuerdo cuando apenas naciste y no parabas de llorar hasta que tu padre llegó a visitarnos con un ramo de lavandas, el aroma de esa flor te tranquilizó de inmediato

-papá siempre mencionaba que lo más probable es que tu Omega tenga ese aroma- Milena susurró lo último con una sonrisa triste al evocar la memoria de nuestro padre- sería irónico que él pueda ser tu Omega destinado

Suspiré al escucharla, maldiciendo lo bien que me conoce mi hermana mayor. Aquel comentario me recordó el agradable aroma de la joven promesa del fútbol español, Gavi, cada vez que me llama y se lanza hacia mis brazos podía disfrutar de su agradable aroma a lavanda.

Soy consciente que desde la primera vez que lo ví mi alfa interior lo reconoció y reclamó a Pablo como mi Omega pero a pesar del instinto, mi parte racional me resondraba por aquellos sentimientos hacia el joven.

El silencio fue roto por la melodiosa voz de mi madre, excusándose su pronto retiro para ver a sus nietos que dormían en el sofá con la televisión prendida. Milena seguía observando fijamente y una sonrisa traviesa apareció en sus labios.

-ahora que mamá decidió quedarse una temporada contigo para ayudarte con mis sobrinitas, será un buen momento para que le des prioridad también a tus sentimientos- le dio un sorbo a su copa, disfrutando del licor mientras me daba un guiño

Quería contestar aquellas palabras que me dedicaba mi hermana mayor pero el sonido de mi teléfono llamó mi atención, no pude evitar esbozar una sonrisa al ver el remitente y el mensaje.

Lawenda, no encuentro mi identificación. Mañana me acompañas a sacar uno nuevo por favor. Con amor, Gavi