Por una parte pensaba: Está más que bien disfrutar de el sexo libre y sin ataduras, yo era consciente de eso y el hecho de no tener que dar explicaciones a nadie me agradaba aún más.
Ya de por sí la gente te juzga o te mira mal por tener esa moral o esos pensamientos más abiertos, pero bueno qué podía esperar... Ahora todo lo que haces es muy cancelable y si no, también lo es.Por suerte no vivía de los demás.
Hasta ahí todo perfecto, pero cuando el sexo ya no es exclusivamente "sin ataduras" lo volvía todo más complicado. Y me refiero a Rodrigo De Paul en concreto. Ya no sabía dónde meterme la moral, porque todo lo que había pasado estos últimos días era de no creer que era yo misma.
No sé cómo habíamos terminado, otra vez, en el mismo círculo. Rodrigo y yo, teniendo sexo en el lugar más recondito del complejo universitario, a solo unas cuantas hora de debutar en una final del mundo. No pude resistirme ante este hombre, el verle esos ojos cafés y esa sonrisa engatusadora y ese cuerpo tallado... no me podía negar, aunque quisiese.
Me gustaba. Y mucho.
¿Qué si era una cualquiera? No lo era, yo estaba soltera y sin compromiso, ¿Qué si era una mala persona por revolcarme y besarme con no uno, si no dos hombres que tienen novia, y otro esposa y además, son amigos? Si, esa puede ser que sea cierta. Soy una mierda.
Todo empezó con Rodrigo diciéndome que tenía un dolor en la espalda y que era urgente que vaya con el a revisarlo. Yo siguiendo mi trabajo fui, quien iba a creer que los dos, nuevamente, estaríamos frente a frente y sin ropa haciéndolo como adolescentes.
Nos encaramos mutuamente, en el sentido que yo le dije que sabía que era él con el que tuve sexo en aquel baño de Doha, y él diciendo abiertamente que lo traía loco desde que me vio y no se pudo resistir, además del alcohol que hizo su parte en todo esto. Fue entonces cuando el silencio y la tensión sexual se sentía en el aire era arrasador.
Cuando no se pudo aguantar más, pasó... lo que tenía que pasar. Y bueno, me reconfortaba decirme que si se tiene que pudrir todo, que se pudra de una vez, total la cagada ya me las mandé no puedo deshacerlo, era mejor enfocarse en lo bueno que en lo malo ¿No?. Después vería como hacía para solucionarlo...
Si es que había alguna solución. Pueden juzgarme, pero ese hombre frente a mi tiene algo que llama a mí cuerpo, mí mente, hacia él quiera o no. Pero por otra parte, la razón y el hecho de que también me había besado con Emi de la misma forma apasionada que Rodrigo, lo complicaba mucho más.
Los necesitaba y quería a los dos y me odiaba por eso.
Cuando terminamos la sesión de pasión, no hubo palabras. No había duda alguna de que estábamos haciendo mal las cosas, él salía con Tini... Y ella comparado conmigo, bueno, yo no era nadie. Me tape el rostro mientras el se vestía de nuevo— ¿Que estamos haciendo... está mal esto. Estoy en el trabajo y no puedo permitir que esto pase, soy una tarada.
Se acercó a mí y me quitó las manos de la cara, haciendo que vea sus ojos culpables y entristecidos. Me abrazo tiernamente.
— Estoy hasta las manos Malia, no puedo parar de pensar en vos desde que nos vimos en la fiesta... Es que.. ¡Si, soy un pelotudo pero...! Tampoco le puedo decir nadie ahora, no cuando este equipo también depende de mí, menos a ella... Pero vos, dios, no sé, no puedo pensar cuando estás cerca o cuando tus manos tocan mí piel, me volves loco de una manera que no puedo explicarlo.—me besó y yo me dejé — Soy una mierda, pero no quiero que esto termine.
Estaba procesando cada palabra que me había dicho. Y tenía razón, yo tampoco quería que esto termine, pero... No quería lastimar a nadie, ni salir lastimada, ambos éramos una mierda.
ESTÁS LEYENDO
𝔘𝔫 𝔪𝔢𝔰 𝔪á𝔰. (''𝔇𝔦𝔟𝔲'' 𝔐𝔞𝔯𝔱í𝔫𝔢𝔷) 𝐓𝐄𝐑𝐌𝐈𝐍𝐀𝐃𝐀
Fanfic𝐓𝐄𝐑𝐌𝐈𝐍𝐀𝐃𝐀 || Editando Capítulos. 📍"Lo único que desearía es...Un mes más." Fecha de inicio: {13.dic.2022}✓© Fecha de finalización 【17.ene.2024】 ""¿Podrá el amor superar las barreras que el mundo les impone o sucumbirán ante la presión de...