"Sin decir una palabra"

Felicidad y Nostalgia

Una boda. Más bien "La boda" en la que dos reinos se unen con una acción en común. Más bien un sentimiento, el amor. Las campanas del reino de los bosques sonaron anunciando el medio día, la hora había llegado. Edegil y Yanessa unirían sus vidas delante de Varda, prometiéndose amor hasta la eternidad. Todo se montó en un hermoso jardín, uno de los favoritos del rey Thranduil. Pusieron tantas flores naturales que eran incontables. Y al centro del jardín una enorme mesa de roble tallado adornada para recibir a los invitados de honor, 16 lugares en total. Alrededor más mesas para la corte y sus familias, consejeros, capitanes de las guardias y demás amigos. Todo un manjar lo que está servido en las mesas del banquete. Un coro de 50 Elfos canta melodías para alegrar el ambiente, todo al compás de los mejores 25 músicos de todo Rivendell. La fiesta perfecta, la boda perfecta. Los invitados se encuentran ya en sus lugares, esperando a que ambas familias reales aparezcan. En la mesa principal un enano y tres hobbits tienen una amigable conversación. Merry, Pipin y Sam de la comarca son los medianos elegantes que recuerdan hazañas y aventuras junto a Gimli, un enano muy simpático que cooperó en la guerra del anillo. La primera melodía Nupcial comienza, y todos los presentes miran hacia el inicio del jardín, por donde entra la familia del novio. Légolas y su hijo Edegil, caminan lentamente seguidos de Thranduil, quien lleva de la mano a su nuera, la hermosa princesa Tauriel, esposa de Légolas, madre del novio, madre de Edegil. Todos saludan a los presentes con una inclinación de cabeza y una sonrisa. Y siguen su camino hasta la mesa principal, donde se sienta El rey Thranduil en una cabecera de la mesa, a su derecha Légolas y Tauriel, junto a ellos Edegil. Después de un rato de conversación, la segunda melodía Nupcial comienza, y marca la llegada de la otra familia real, la de la novia. Por el fondo del jardín y caminando con paso lento y delicado Aragorn rey de Gondor junto a su esposa Arwen Undomiel , detrás de ellos Elrohir y Eldarion, con sus túnicas de Gala. Después de ellos el soberano de Lothlorien, Celeborn junto a la que fuera para el cómo su hija, quien se llegó a convertir en la esposa de su nieto, Norie. La elfa de los ojos intensos como el fuego, la madre de la novia. Ataviada con su vestido azul rey, toda una belleza. Pero nada comparado con la hermosura y jovialidad que irradiaba la novia, Yanessa, quien venía hasta el final, del brazo de su padre Elladan. El primogénito de Elrond, señor de Rivendell. La novia, con su vestido blanco de encaje y bordados con hilos de oro, su cabello trenzado y con adornos de flores naturales, en su frente su tiara de princesa y en sus ojos la felicidad de unirse al quien será para siempre su amor. Toda la familia se sentó, la novia y su padre con lágrimas en los ojos. Pero aun así comenzaron con el banquete. Cuando todos los presentes hubieron terminado de comer, Celeborn se puso de pie, para iniciar con la ceremonia. Caminando hasta una pequeña plataforma, se paró sobre ella y procedió a pedir la presencia de los novios.

- Edegil y Yanessa, ¿podrían venir hasta aquí? Ustedes también, Norie y Légolas- los aludidos se pusieron de pie y caminaron hasta donde se encontraba el señor de Lorien- devuélvanse los anillos de plata- a lo cual ambos obedecieron, a continuación Celeborn procedió a juntar las mano derecha de ambos y a decir la siguiente oración- Elbereth Gilthoniel! Manwë Súlimo! Alae el i erthad uin meleth. (Elbereth Gilthoniel! Manwë Súlimo! Bendice esta unión de amor.) Padres de los novios es su turno.

- Elbereth Gilthoniel, alae el i erthad uin Edegilun ned de Yanessa Imladris (Elbereth Gilthoniel, Bendice esta unión de Edegil con Yanessa de Imladris.)- Exclama Norie poniendo su mano sobre la de los novios

- Manwë Súlimo, alae el i erthad uin Edegil un Yanessa. (Manwë Súlimo, bendice esta unión entre Edegil y Yanessa)- Termina Légolas, poniendo también su mano sobre la de los contrayentes.

Edegil besa en la frente a Yani y coloca el anillo de oro que su padre le ha dado en el dedo índice de su esposa, y dice: Ilúvatar, el galu es el erthad de i... (Ilúvatar, bendice nuestra unión) Yani después de besar la mano de Edegil hace lo mismo con el anillo que Norie le ha dado. Eru, manadhpant del aen... (Eru, que la dicha sea sobre nosotros) pronuncia la elfa. Y ambos, juntan sus manos y a coro dicen un uireb. (Por toda la eternidad) dando así por finalizada su unión, la cual será para siempre. Todos los presentes aplauden mientras los novios se dan un dulce beso en los labios y Norie le pode un collar con dije de una mariposa a Edegil, mientras Légolas hace los mismo con Yani, poniendo en su cuello un colgante con una pequeña hoja verde de dije. Los novios se toman de las manos y los presentes hacen una reverencia delante de ellos. Dos familias se han unido, y dos corazones se han hecho uno solo este día.

Después de varias horas de bailes y vino, se ha hecho de noche pero la celebración aún no termina. Los novios no han dejado de bailar, así como sus familiares y amigos. Norie y Elladan lo hacen ahora, un poco apartados de los demás.

- Mi amor, hay algo de lo que ambos debemos hablar. Sabes bien lo que desde hace tiempo acongoja a mi corazón, ¿No es así Norie?

- Lo se cariño, pero no quiere decir que me agrade.

- Es mi tiempo, ya ha llegado. Mi corazón se siente atraído por el mar, aunque te amo, a ti y a mi hija, sé que estarán bien.

- ¿Creí que me pedirías que fuera contigo?- pregunta Norie muy confundida separándose un poco de su esposo para mirarlo a los ojos.

- No puedo hacerlo, tu corazón aun no lo desea. Pero te esperare allá, ¿lo sabes verdad?

- Te amo Elladan, no quiero quedarme sola.

- No lo estarás, quiero que te quedes aquí, en el reino de los bosques, con tu hija. Aquí tienes gente que te quiere y muchos amigos, así la espera a que tu día de partir hacia los puertos grises llegue, será más llevadera.

- ¿Cuándo partirás?

- Dentro de 5 días, con mi abuelo. Dame un segundo- dice El elfo dejando de bailar- ¡Legolas! ¿Hoja verde podrías venir aquí?- El rubio camina hasta donde ellos se encuentran

- ¿Que sucede Elladan?- pregunta el susodicho al llegar

- En 5 días partiré, hacia tierras imperecederas, junto a mis padres. Y necesito que me jures por tu vida que cuidaras de mi esposa y de mi hija mientras el tiempo se encargue de reunirnos de nuevo- termina Elladan poniendo su mano en el pecho

- Es un honor para mi que me lo pidas, sabes que lo haré, es una promesa.- responde Legolas con una mano en el pecho también

- Muchas gracias, ahora iré a bailar un rato con mi hija, ustedes bailen también, seguro tienen cosas de que hablar- dice dando la mano de Norie al príncipe de Mirkwood- te veré después mi amada

- Claro que si mi amor.

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Bueno aquí esta el capitulo, una disculpa enorme por no actualizar antes.. un beso a todos los que me leen.