Get Out Alive | Thomas Hewitt

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(LEER EL MENSAJE AL FINAL ^^ )

Desde la completa clausura del matadero, la población del condado de Travis se había reducido a un número bastante considerable. Aun así varios habitantes aceptaron en seguir viviendo en dichas zonas a pesar de los constantes avisos de precariedad que habría, es por eso que incluso a pesar de la poca población, el hospital principal del Condado continuó trabajando pues pensaban que sería poco ético quitarles el servicio a la salud a las personas.

Suena irónico que solo el servicio de salud estaba funcionando ya que incluso la parte de seguridad y justicia ya había quedado vacía, siendo reemplazada por un sheriff estafador y prepotente.

El Doctor Miller, un hombre anciano y algo cascarrabias ya tenía años trabajando en el hospital atendiendo y asegurando las vidas de todos su pacientes pero no solo era eso, un detalle muy importante en él fue su verdadera preocupación junto a una necesidad analizar las situaciones.

— Bueno señorita Hewitt... ¿Podría decirme que es esta chica de usted?

— Ya le dije doctor, es mi hija. — Respondió Luda temerosa.

— Sí entiendo señora pero hay ciertas cosas que no me cuadran, usted nunca me mencionó en todo el tiempo que la conozco que haya tenido una hija. — Aquel doctor ya conocía de lejos a Luda, sabía que era una mujer algo inestable de una familia con valores cuestionables.

— Mire doctor, ella es mi nuera, por lo que es mi hija de cierta forma ya que vive conmigo y mi familia desde hace un tiempo. — Luda comenzaba a perder la paciencia, no quería decir un detalle de más que los expusiera a todos.

— Okey entonces cómo es que ella viviendo con ustedes fue atacada de tal forma?

— Un motociclista la asaltó y como Heather se rehusó el maldito le disparó.

— Pero fue en una casa o en donde, ya que la chica no tiene rastros de tierra o algo que verifique que fue al aire libre. — Las expresiones de Luda delataban mucho, el doctor tenía ciertas sospechas de algo que ni él estaba seguro.

— ¿A qué va esto, piensa que nosotros le hicimos esto? — Dijo con un tono de indignación.

— Claro que no, para nada Señora Hewitt, solo que se me hace muy inseguro que motociclistas y asaltantes estén rondando por su casa, si es que ahí fue donde la atacaron. De todas formas igual recomendaría que llamen a un oficial fuera del condado para que se encargue de esto, obvio si quieren presentar cargos. — Buscaba saber cómo reaccionaba la anciana ante la mención de alguna autoridad.

— Nosotros nos encargaremos de contactarlos, por ahora solo quiero estar segura que Heather estará bien, no quiero pensar ahorita en el maldito que la lastimó. — Esa respuesta fue demasiado convincente para el doctor.

— Bueno me parece bien, aun así por ley tendremos que llamar a un familiar de la señorita Hardesty ya que al no ser familiar suyo del todo, es de prioridad informar a alguien de su familia biológica.

— Claro, yo les llamare no se preocupe. — Era evidente que ella no les diría a ninguno de ellos.

— Oh creo que me malinterpreta pero eso ya es responsabilidad del hospital, nosotros nos vamos a encargar de llamarles. — Eso último lo había dicho como un aviso.

Fue entonces cuando Luda comenzó a sudar, no estaba segura en que decir al respecto, si se negaba muy probablemente levantaría sospecha y si no decía nada, atraería la atención de esa desagradable familia.

— También por lo que veo aquí la chica tiene un registro psiquiátrico muy extenso, ella supuestamente debería estar en medicación pero no ha tenido actualización desde hace casi un año, ¿eso es cierto? — A este punto, el doctor ya estaba más interesado en investigarla.