El día nueve fue una tortura.
Me abracé a la cintura de mi novio con lentitud al despertar y suspiré al sentirlo acurrucarse en mi pecho. Una sonrisa se formó en mis labios.
Despierta, amor. - Susurré mientras dejaba un beso en su cuello. Él no se movió, así que lo besé de nuevo. - Bonito, es tarde.
Lo sentí removerse entre mis brazos y dejar escapar un suspiro antes de acercarse más a mi cuerpo, ocultando su preciosa cara en ahora mi cuello.
Buenos días. - Susurró con voz ronca.
Creo que estuvimos abrazados durante unos veinte minutos, pero no lo recuerdo bien. Sé que hablamos animadamente sobre nuestros deseos para Navidad. Faltaban solo quince días para eso.
Me gustaría describir esa charla, pues fue una de las mejores que tuvimos en los días que pasamos allí, pero no la recuerdo muy bien.
He olvidado tantas cosas que no debería...
Creo que deberíamos salir. - Me dijo mientras entrelazaba nuestras manos. - Seonghwa y Hongjoong vendrán a llamarnos pronto.
Y recordé la noche anterior. Y mi corazón volvió a estrujarse un poco.
Decidí no mencionárselo a mi novio, debía respetar la decisión de los mayores del grupo de tener el secreto para ellos solos, aunque no estuviera de acuerdo con sus motivos detrás de ello.
No me importa. Quiero abrazarte un poco más. - Murmuré, pero alguien nos llamó en ese mismo momento.
¡Woosan! ¡A desayunar! - Exclamó Yeosang.
Wooyoung y yo dejamos escapar un quejido al mismo tiempo antes de levantarnos de la cama y vestirnos. Cuando salimos, mi novio envolvía mi cintura y dejaba besos en mi mejilla, lo cual me encantaba. Amaba sentir que él me amaba.
Fue entonces cuando noté que Hongjoong y Seonghwa no estaban allí, y también recordé que no habían sido sus voces las que nos habían llamado para que fuéramos a desayunar. El resto desayunaban en la mesa pacíficamente.
¿Dónde están Seonghwa y Hongjoong? - Recuerdo haber preguntado.
Están durmiendo. - Me respondió Yunho sonriendo, pero aquella sonrisa era falsa.
Hongjoong hyung no durmió muy bien anoche. - Nos explicó Jongho. - Tuvo fiebre, vomitó un par de veces y la tos lo estaba ahogando, así que Seonghwa hyung le hizo compañía.
Intenté no llorar ni demostrar tristeza en mi rostro, aunque me dolía. A Hongjoong no le habría gustado verme así.
Comimos en silencio, porque no había motivos para sonreír y mantenerse optimistas si nuestro capitán no estaba allí. Mingi le llevó algo de comida a él y a Seonghwa, y al verlo salir de la habitación, lo primero que hicimos fue preguntarle cómo estaba Hongjoong. Nuestro amigo solo nos hizo una seña para indicar que no muy bien, pero tampoco del todo mal.
Nos quedamos en el salón durante una media hora más, pero no recuerdo que dijéramos nada.
¡Hey! ¿Por qué parece que ha muerto alguien? - Preguntó Hongjoong con una débil sonrisa mientras salía de la habitación, siendo ayudado por Seonghwa. Creo que fue un comentario bastante cruel.
Hongjoong ya no caminaba con pasos seguros. En realidad, parecía que estaba a punto de caerse. Estaba tan pálido que asustaba, se veía cansado, y enormes manchas de sangre cubrían su camiseta. Estaba despeinado. Su voz era ronca. Su sonrisa era falsa.
ESTÁS LEYENDO
Letal
FanfictionCuando un grupo de ocho chicos se ven atacados por un extraño virus mortal que ha acabado con más de la mitad de la población mundial, se ven obligados a afrontar una inminente realidad para la que ninguno estaba preparado. Solo les queda apoyarse l...