Capítulo 24: Feliz navidad

89 10 0
                                    

Era el día veinticuatro. Navidad para ser precisos.

Wooyoung despertó a mi lado en aquella cama, pero me sentí mal por él. Había dormido sin camiseta ni una manta que lo cubriera del frío, pues el roce de la tela con su piel hacía que sus heridas dolieran más de lo que podía soportar.

En cuanto lo vi, lo abracé, procurando no tocar ninguna zona que pudiera causarle demasiado dolor. Quiero creer que mi abrazo lo hizo sentir más cálido.

Buenos días, Sannie. - Recuerdo que me dijo al despertar.

Creo haberlo besado, pero no estoy demasiado seguro. Tampoco recuerdo las demás cosas sucedidas esa mañana, lo cual me hace sentir realmente mal con él y conmigo mismo. ¿Por qué no puedo recordar lo que deseo recordar? ¿Por qué no puedo olvidar lo que quiero olvidar? ¿Por qué solo las cosas negativas permanecen en mi cabeza?

Sé que luego del almuerzo, el cual tampoco recuerdo, Wooyoung terminó de ayudar a Yunho y Seonghwa con la improvisada decoración. Mi esposo estaba usando una camiseta enorme, lo recuerdo bien. Decía que esa le hacía menos daño.

Recuerdo que habíamos hecho un árbol con una vieja camiseta de Mingi y un pantalón de Hongjoong, y un pequeño santa con los calcetines de Yeosang. También recortamos trozos de las sábanas de la habitación de Jongho para hacer torpes copos de nieve y colocarlos en la pared.

Sé que no suena nada lindo, pero era nuestra pequeña navidad en honor a ellos.

Sé que mientras los tres discutían sobre la decoración, un hombre de blanco llegó hasta nosotros. Él me llamó con su dedo y me indicó que debía entrar a la sala de visitas. Me extrañé de inmediato, pues no tenía a nadie fuera y no creí que el tío de Yeosang quisiera volver a visitarme luego de la pérdida.

Al entrar, me sorprendí al encontrar tras la vitrina a Maddox y Lee, quienes vestían suéteres navideños con agujeros y gorros que seguramente habían sido usados ya demasiadas veces.

¿Maddox? ¿Qué hacen ustedes aquí? - Fueron las primeras palabras que lograron salir de mis labios. No podía asimilar el hecho de que estuvieran allí incluso cuando no tenían motivo alguno.

Lee quería ver a sus tíos. - Me contó con una sonrisa falsa. En sus ojos se podía ver aún la tristeza, pero la forma en la que sus brazos sujetaban a Lee, quien miraba el lugar como si no lo recordara, me aseguraba que no lo dejaría solo ni un momento.

Pero el hombre de blanco solo me ha llamado a mí...

Lo sé. Me dijeron que ver a Yunho sería peligroso, pero dejarlo solo también. - Me contó. - Uno de cuatro no está tan mal. ¿Verdad?

Asentí con dolor, pero sí que lo estaba.

Luego de la muerte de Mingi, Yunho ha estado algo agresivo. - Le expliqué con calma, para que así pudiera comprender lo sucedido. - Me odia, así que intenta hacerme daño. Wooyoung y Seonghwa lo controlan. Por ello no te han permitido verlos. Tal vez intente hacerles daño.

Él no dijo nada durante un buen tiempo, tal vez porque necesitaba analizar lo sucedido.

¿Ellos... tardaron demasiado en morir? - Me preguntó con preocupación mientras dejaba a Lee en el suelo, quien comenzaba a corretear por la sala que estaba completamente vacía.

En realidad no todos. - Expliqué. - Jongho tuvo la mayor suerte. Y la tos de Mingi fue mucho más rápida que...

Me callé instantáneamente.

Entiendo. - Me dijo, pero vi el dolor en sus ojos.

Pero Yeosang... - Susurré. - Estuvo muchos días tosiendo y nunca lo notamos. Supongo que estábamos muy concentrados en nosotros mismos. - Miré a Maddox con dolor. - No lo demostró, pero sé que sufrió mucho.

LetalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora