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*Pov Jimin*

Una semana después.

Era de madrugada, no podía dormir. Está era una de esas tantas noches que tenía insomnio y no podía dormir.

La razón era muy evidente, hoy era mi cumpleaños. No era un día que yo odiara pero si un día que no me gustaba que llegara.

Me levanté de la cama, fui directamente al baño. Estaba seguro que no dormiría en toda la noche y a pesar de que quería hacer algo para distraerme no tenía nada que hacer, tampoco tenía ganas de hacerlo.

Prácticamente hoy tendría que ir y aceptar de una buena vez mi realidad y dejar de aferrarme a los recuerdos. Suspire y me lave el rostro, mire a través del espejo. Mi rostro tenía un aspecto cansado y serio al mismo tiempo.

Suspire y salí del baño, me aliste rápidamente y a pesar de que era de madrugada no me importaba.

Salí del departamento y baje hasta la planta baja del edificio. Antes de salir suspire y me alenté a mi mismo a caminar. Sin un rumbo fijo empeze a caminar por las diferentes calles.

Sin darme cuenta me encontraba en la puerta de la casa de mi abuela. Me detuve frente a la puerta. No estaba seguro de hacerlo, pero debía hacerlo. No podía aferrarme a recuerdos que a pesar de que eran lo único que me quedaban de el.

Entre, la casa estaba muy oscura, no se escuchaban ruidos.

Empeze a caminar en dirección a la entrada, abri la puerta. No había nadie. Eso me tranquilizó.

Camine hasta llegar hasta el fondo. Abrí la puerta, todo estaba en completa oscuridad.

Camine hasta llegar a un cuarto, todo estaba bastante solitario, como si nadie estubiera ahí.

Suspire y camine hacia las camas.

Todos los recuerdos pasaron por mi cabeza. Suspire. Esto a pesar de que era duro para mí, debía hacerlo. Debía dejarlo ir.

Me senté en su cama y deje que los recuerdos me invadieran, cada segundo era tan doloroso. Tener que aceptar que ya no habría alguien en quien podía apoyarme.

Sin darme cuenta ya estaba llorando. El nudo en mi garganta se formó bastante rápido.

_Es tan doloroso recordarte. A pesar de que eso me hace sentir bien, no es lo mismo cuando se trata de aceptar y dejarte ir. _hable, mi voz salió bastante ronca. Suspire y trate de tranquilizarme.

_Hoy es el último día en el que puedo recordarte. Debo dejarte ir, más tarde te iré a visitar y cumplire mi promesa. No quiero que me odies, esto es bastante egoísta y lo sé pero no puedo seguir lastimandome por llevarte junto a mi. _trage el mundo en mi garganta y limpie mis lágrimas.

_Como lo hize con todos en su debido tiempo también debo hacerlo contigo. _hable y tome aire. _Mis logros, mis metas, mis sueños y todo lo que llegue lograr hacer siempre te lo dedicaré a ti. _hable y sonreí, al imaginarme que el estaría ahí, sonriéndome mientras me aplaudía. _No te preocupes. Vendré cuando te necesite. Creo que a pesar de que yo no lo demuestro. Creo que sabes que muchas veses trate de rendirme. Tantas veces que necesite que me dijeras esas palabras de aliento pero ya no lo aras, ahora yo mismo seré el que me aliente. _suspire y me levante de la cama.

_Esto es una despedida, solo significa que te dejare ir. Ya no me lastimare en recordarte ppero siempre te llevaré conmigo. _hable y me seque las lágrimas.

Suspire por última ves y salí de la habitación.

Camine hacia la salida y salí de la casa, hacía frío pero era lo que menos me importaba. Ahora era momento de seguir sin esa constante sensación de aferrarme y extrañar algo.

Tu Amor Es Cinsero?_|~•Jimsu•~|_"Hibrido"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora