Captain ❁ཻུ۪۪ Kookmin Au ©

Extra I: 1/3

Pequeño giro

—No estoy seguro de esto.

—Vamos, aún eres un profesional —lo animó. 

El pelimorado hizo una mueca inseguro, aun asi agarro el boligrafo y puso su nombre y firma en el papel. La chica le sonrio amigable.

—¡Gracias por inscribirse! Les enviaremos las fechas y la información en unas horas.

Las tres personas salieron del lugar, Jeon estaba algo atontado mientras que Jimin se sentía emocionado por lo que su esposo haría.

—¡Más despacio que tengo piernas cortas!

Chilló la pequeña Jeon que estaba siendo prácticamente arrastrada por el pelimorado por la acera. Jimin se carcajeo viendo a Jungkook pedir disculpas a su hija.

Aun no se acostumbraban a eso de ser padres. Digamos que, ambos eran muy bruscos y brutos; Jae llegó a sus vidas de forma repentina. Se habían postulado para adoptar hace dos años pero jamás recibieron una confirmación y hace unos meses, de la nada, les dijeron que había una niña que estaba esperando ser visitada por ellos.

Ambos entraron en crisis.

—¡Papi Jimin, tenemos hambre!

Pero ahora estaban bien.

Habían acordado dar un paseo por las calles de la cuidad ya que Jeon tenía una semana de vacaciones y quería pasarlo con ellos. Ni siquiera se dieron cuenta que caminaron tanto hasta que vieron la secundaria donde habian ido, Jimin se había emocionado y se acercaron, le explicó a su hija que cuando sea más grande ella estudiaría en ese lugar si quería.

Pero a Jeon le llamo la atención un cartel pegado en la reja del edificio.

"Campeonato de rugby caritativo"

Había sido que, estaban juntando dinero para algunos refugios que necesitaban recursos por culpa del mal clima que dejó varios lugares destrozados. No era novedad, el colegio siempre hacia ese tipo de eventos para ayudar y tener más reputación. Pero algo que llamo la atención de Jeon son las edades.

"Inscripción desde los 27 años a los 45 años"

Y oh dios, Jimin enloqueció diciendo que se inscriba y que convenza a los chicos de su antiguo equipo de rugby de hacerlo también. Había dejado de jugar luego de haberse roto el tobillo y a pesar de que estaba en buena condición física, no estaba seguro de ser tan bueno como antes.

—¿Esta rico?

Jeon miraba con amor como Jimin le daba de comer en la boca a su pequeña. La niña asintió varias veces y comenzó a contar que había echo nuevos amigos en su escuela. Ambos la miraban atentos a cada palabra intentando memorizar todos los nombres de sus amigos.

—Ranita, Yoongi me dijo que vendrá a buscar a Jae en la tarde, quiere llevarla de compras con el ¿Te parece bien?

Jimin asintio comiendo un pedazo de postre. —Vale.

—¿Papi, porque papá te dice "ranita"? —Jae hizo como si tuviera un escalofrio—, son feas.

Jungkook se atragantó con el pastel y miró a Jimin, sabía que ese era un gusto muy, muy preciado del menor y no quería que...

—¿Verdad que sí son feas? —soltó el rubio. Jungkook lo miro confundido. —pero son geniales. Tu padre me dice así porque me gustan mucho las ranitas.

—¿De verdad? —preguntó curiosa— ¿Puedes contarme más?

Y si, Jungkook escuchó mil veces lo mucho que le gustaba a Jimin pero como siempre, se quedó embobado mirando sus expresiones y sus brillantes ojos al hablar sobre ellas y más aún, a su pequeña hija.