Captain ❁ཻུ۪۪ Kookmin Au ©

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Las manecillas del reloj parecían ir más lento, podía ver exactamente el polvo volando a su alrededor y una que otra pelusa. Sus manos estaban apoyadas en su regaso, no se cruzaban. Estaba derecho como una tabla.

Se sabía de memoria la habitación. Cada mancha de humedad, cada grieta, las telarañas, todo. Nada cambiaba desde hace años.

—No te distraigas.

Su mirada se dirigió al suelo. Notó que seguía igual de sucio que siempre, era un poco, solo un poco razonable si bien entraban cientos de personas a la semana ¿no debería haber alguien que limpie el lugar?

—Jimin.

Miró ahora si al hombre. Sigue igual que siempre.

Nada cambiaba.

Ni el, ni sus emociones, ni su baja autoestima.

Nada.

—¿Quieres empezar contándome algo en específico o quieres que pregunte?

Arrugó su nariz. Era una pregunta difícil, tenía tanto que decir pero le causaba un poco de vergüenza; sin embargo, que él pregunte también lo ponía de los nervios.

—P-puede preguntar.

Lo vio hacer una mueca.

—¿Cómo estuvo tu semana?

—Extraña.

El hombre se acomodó en la silla, dándo a entender que tenia su total atención.

—Estoy rodeado de gente —siguió— buenos amigos... pero me siento tan vacío —rió sin ganas—, yo lo intento, de verdad q-que lo intento pero no puedo no sentirme tan triste cuando todos están riendo.

Tomó un gran respiro, sus manos ya comenzaban a apretar su camiseta.

—¿Hay algo que te molesta en especial? —inquirió el otro.

Su vista se perdió unos segundos en el ventanal detrás de él. ¿Le molestaba algo? Seguramente muchas cosas, pero estaba claro que había algo que era aún más pesado que todo lo demás.

—Jungkook.

—¿Te molesta Jungkook?

—No, no. El solo... solo es tan perfecto, tan correcto —sollozó— y yo soy tan inútil, tan insuficiente que creo que no merezco ni verlo.

—Jimin, habíamos hablado sobre esto —el psicólogo se quitó los lentes—, avanzamos incluso un poco ¿Que te hizo retroceder?

El rubio sollozó las fuerte, las lágrimas ya bañaban su rostro. Lo sabía, sabía que este era un gran retroceso y una caída al suelo en seco. Sin embargo, no pudo evitar no compararse compararse las amigas y amigos de Jungkook, no pudo no sentirse tan efímero a lado de ellos. Se sentía tan jodidamente angustiado al respecto.

—L-lo siento.

—No tienes que disculparte conmigo —él suspiró—, es para ti y por ti Jimin.

—Mamá cree que estoy mejor —susurró minutos después.

Seokjin asintió, se enteró por boca de la misma madre del chico que penssba que su hijo había echo un gran progreso. ¿Cómo se sentiría el saber que Jimin estaba más hundido que nunca?

—¿Cree que es correcto esconder esto? Yo... no quiero que llore.

—No puedo decirte que es correcto y que no en tu situación Jimin. Pero, pienso que si no quieres contarle todo solo menciona una parte. Debe estar atenta a ti por cualquier cosa que pase ¿si?