La Voz

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-Es una chica muy linda ¿no lo crees?
-¿De que estas hablando?
-Ella podría hacerte muy feliz mi amor
-No comprendo... Natalia... Yo
-Es joven, tiene una belleza natural, me. recuerda a mi.
-Natalia por favor...
-Se que cuidará bien de ti.

Despierto muy confundido, no comprendo mi sueño. Veo el reloj, son las 5:36 am, me levanto de mi cama, mi vista es borrosa asi que decido bañarme para relajarme un poco.

Ya extrañaba soñar con Natalia, sentir sus manos acariciando mi cara y esos suaves labios despidiéndose de mi.
Aun no creo estar preparado para un nuevo amor.

Me veo al espejo. Me refleja diferente, me siento diferente ¿será por la llegada de Saira? No lo creo.
Salgo y camino por ese largo y estrecho pasillo blanco lleno de fotos de mis amigos, de mi pequeña hermana y de mi amada. Una puerta se abre a mi derecha, de donde sale Saira totalmente despeinada, con una pijama rosa y tallandose uno de sus ojos junto con un gran vozteso. Al verme se queda viendome fijamente con una extrañeza en su mirada, su cara se vuelve roja y cierra la puerta con gran fuerza. Prefiero no molestarla asi que continuó mi camino. Me siento en el sillón mirando la foto en mi collar, no se que tiempo ha pasado pero Saira ya está con su uniforme y bien peinada enfrente de mi tratando de llamar mi atención con su mano.
-Dante, ¿Dante? El desayuno ya está listo.
Al reaccionar lo primero que puedo ver son sus ojos un poco preocupados. Al ver que por fin reacciono sonríe y me lleva a la mesa, me sirve un omelette de tres quesos y un café. Ella se sirve el suyo y me desea un buen provecho.
Esta niña alegra un poco esta casa, es una joven realmente bella, con un espíritu fuerte, sera una gran compañera para mi.
Es hora de irnos. Yo tomo mi maletín y Saira su mochila. Subimos al auto y partimos a su escuela. Todo el camino mi acompañante se la paso cantando toda canción que sonará, a decir verdad canta muy bonito.
-Tienes una bella voz Saira
-Gracias... Mi madre me enseñó a cantar cuando era niña, era muy divertido cantar con ella * dijo iluminando su rostro de gran alegría al recordarla*

Llegamos a su escuela, todos miran fijamente hacia nosotros, es un poco incomodo, Stockharth abre la puerta, me da un beso en la mejilla y sale del vehículo dirigiéndose hacia sus amigas, las cuales no dejaban de reír.

Giro mi dirección y parto a mi trabajo. Jessi me recibe en la puerta y me acompaña hasta mi oficina en donde me da los reportes semanales. Termino de leer y bajo a sala de juntas en donde esta lleno de nuevos empleados. Ahora debo de darles una capacitación y explicarles cual es la manera de trabajar de aquí.
..................
Estoy tan cansada, como quisiera dormir un poco más son casi las 6:00 am debo apresurarme para ir a la escuela. Me levanto, parezco zombie, no puedo ni caminar bien. Por fin puedo llegar a la puerta, la abro y veo a Dante frente de mi viéndome a los ojos ¿Porque Dante esta en mi casa?... Espera ¡Ayer me mude a su casa! ¿Es decir que? ¿Dante me esta viendo en pijama y con mi cabello hecho un desastre? Siento como mi cara se calienta, un escalofrío invade mi cuerpo. No puedo dejar que me vea así y lo único que se me ocurre es azotar la puerta en su cara y correr al baño a bañarme. Es tan relajante sentir el agua correr por mi cuerpo, el calor me invade. Me siento viva.
Salgo de la ducha y me veo al espejo desnuda y debo decir que me encanta modelar y hacer caras raras en el espejo. Me visto y me hago una cola de caballo para al fin salir y ver a Dante.
Al salir veo cuidadosamente los cuadros colgados en la pared, Dante al parecer tiene muchos amigos pero en la mayoría de las fotografías se encuentran una chica que no conozco y Natalia.
Dante se encuentra en el sillón viendo algo con mucha atención, no lo molestare, al parecer no ha notado que estoy aquí ;Mejor preparo el desayuno.

Comienza a preocuparme ese hombre no se ha movido por un tiempo.

-Dante, ¿Dante? El desayuno ya está listo ¿estas bien?

Gracias a Dios, ha reaccionado.

Tomo mis cosas y Dante me lleva a su auto... Me encanta, es un auto negro muy elegante, sinceramente no se de autos pero de verdad me gusta. Dentro, Dante hace sonar música y no puedo evitar cantar y lo mejor es que me dice que tengo una bella voz. Durante el camino me atrevo a sacar mi celular y tomar una fotografía con mi amor platónico y no dudo en enviársela. Al llegar mis amigas no pueden creer que llegue en auto y que alguien con el sea quien me acompañe. Me despido con un beso y bajo del auto apresurada.

Mis amigas me saturan de preguntas ; ¿Quien es el? ¿es tu novio? ¿te acostaste con el y ahora el te trae? Etc etc.
Al explicarles todo lo sucedido, no lo podían creer, era la envidia de mis amigas. Todo el día estuve respondiendo preguntas, unas mas absurdas que las otras pero fue divertido.

Al llegar la hora Dante vuelve en su auto y me lleva a mi nueva casa.

-Dante ¿en que trabajas? Siempre he tenido esa pregunta
-Soy psicólogo, además de dar conferencias, aveces motivador y estoy en proceso de escribir un libro acerca de muchos trastornos mentales.
*me dijo mientras guardaba una bolsa negra *

Al llegar a casa Dante toma la bolsa y coloca algo en la mesa que esta en medio de la sala y se va a su habitación.
La curiosidad me vence y corro a ver que era ese objeto... Una lágrima escapa de mi ojo; era la foto que tome hoy en un porta retratos.

¿Te Acuerdas de mi?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora