Liv ya no está. Joder. Liv ya no está. Eso me repetía una y otra vez, en aquel espantoso granero. Estaba tumbado, de cara al techo, viendo aquellos tres rostros que tanto quería... El frío se apoderaba de mí, me puse la chaqueta de Maddie. No me atreví a mirar abajo... No quería ver aquel cuchillo atravesando mi piel. Pensé en quitármelo, pero aquello iba a ser peor, me desangraría, tenerlo ahí taponando la herida, aún podía salvarme.
Podía quedarme allí tirado, esperando a mi muerte, o podía sacar fuerzas donde no las tenía, tratar de moverme, y buscar ayuda. Me levanté, no sé cómo, pero me levanté. Me aterraba dirigirme a la puerta, ya que los cuerpos de mi amiga y sus padres estaban colgados más arriba, pero... No había otra forma de salir. Por suerte, las piernas aún me funcionaban, seguía mareado. ¿Cómo demonios había creído que podía ganar contra Markus? Aunque bueno, aquella había sido toda mi falsa confianza puesta en práctica, la poca que pude reunir.
Cada paso que daba, iba dejando un rastro de sangre, y me dolía la herida, podía notar el cuchillo en cada pisada. Logré salir del recinto, encontrando un camino por el que ir, sin tener que atravesar todo un bosque. ¿Estaba cerca de algún pueblo o similar? Mi cerebro quería pensar en Maddie, o mi corazón más bien, en lo destrozado que estaba, pero me negué. Dejé la realidad de lado por un instante, no podía pensar en Liv, ni en sus padres, ni en nada, solo... Solo en sobrevivir.
Anduve durante un rato, pero ya casi no podía más. A lo lejos empezaba a ver un par de casas, pero no iba a llegar, era imposible. En pocos minutos perdería el conocimiento si seguía andando, casi me hice a la idea, iba a morir allí. En mitad de un camino de tierra, casi llegando a alguna parte. ¿Dónde? Jamás lo sabría. Tenía la garganta seca... El aire me sabía a sangre, era extraño. Luego empecé a oír un zumbido... Supuse que mis tímpanos estaban fallándome, y que pronto quedaría aturdido del todo, pero... No, se oía cada vez más fuerte, y venía de arriba... No lo podía creer.
Era el zumbido de un dron, volando, sobre mi cabeza. Pude notar cómo me estaba analizando, giraba alrededor, casi me sentía como la Tierra, teniendo a la dichosa luna dando vueltas todo el rato sobre el planeta.
- Eh... ¡Eh...! – Le hice señas.
Luego, a lo lejos, pude ver a dos críos, que se acercaban, confusos. Uno era pelirrojo, el otro rubio... Ambos con el mismo jersey y el mismo abrigo, lo único que les distinguía era el pelo, por lo demás eran idénticos. Uno de ellos llevaba el mando del robotito en las manos, sin duda, el dron era de ellos. Les hice señas de nuevo. Se quedaron a pocos metros de distancia.
- ¿Estás bieeen? – Gritó uno de ellos.
- Ah... - Me miré por fin la herida - ¡No, n-necesito...!
- ¿Qué necesitas? ¡Dilo alto, no te oímos!
- N-n-neces... - Pude notar cómo mi cuerpo dijo "basta". Todo se volvió negro, todo. Y un instante después, abrí los ojos, una luz zumbante iluminaba mi rostro. Oía una voz... ¿Maddie? No... No era ella. ¿Por qué iba a ser ella? Qué estúpido... Me enderecé un poco, estaba... ¿En un hospital?
- ¿Hola? ¿Cómo te sientes? – Parecía una enfermera.
- Ah... ¿Dónde estoy? – Mi vista todavía se estaba acostumbrando.
- En el hospital, tenías una navaja clavada en el abdomen, además de la amputación de dos dedos. ¿Recuerdas eso?
- Sí... - Ya no llevaba mi ropa, solo unos calzoncillos y una bata de hospital. Tenía media mano cubierta de vendas y una gasa sobre la herida del cuchillo – Perdona la pregunta, esto... ¿Cómo he llegado aquí? – Debería estar muerto, al menos ese parecía el plan de mi cuerpo.
![](https://img.wattpad.com/cover/303225118-288-k56089.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Maddie
RomanceSamuel siempre creyó que tendría una vida plana, sin muchas emociones, aunque eso cambió tras conocer a Maddie. Apareció un día en aquel pub, charlaron un rato, se cayeron bien. Pero al oírla cantar, su corazón dio un vuelco, se enamoró de ella, ni...