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A la mañana siguiente todos estaban en el desayuno, estaban comiendo felizmente mientras el sonido de los cubiertos era el único que se escuchaba. El rey quería hablar, saber cómo la habían pasado ayer.

ㅡ ¿Cómo estuvieron ayer? ¿Se sintieron cómodos? ㅡ la mayoría asintió.

ㅡ Había muchos niños con los cuales jugar papá, mira, me regalaron una... ㅡ Sam​ gritó y se levantó de la mesa al ver ese animal rastrero que sacaba su lengua cada tres segundos.

ㅡ Park​ Yeong ¡¿Qué haces con esa cosa?!

ㅡ No es cosa papi, es una serpiente de río, son inofensivas... los niños del pueblo tienen muchas y...

ㅡ No la quiero contigo, dasela a la servidumbre para que la tire...

ㅡ Sam, calmate, conozco esas serpientes, son inofensivas y... ㅡ la mirada furiosa y llena de miedo de Sam dio directo en los ojos del rey el cual soltó un suspiro. ㅡ Es mejor no preocupar a papi ¿si?.

ㅡ Pero a mi me gusta y la quiero. ㅡ el niño llenó sus ojos de lágrimas y el rey sentía que se le partía el corazón.

ㅡ Eh hablado Yeong. ㅡ dijo con voz autoritaria. El niño comenzó a llorar y se fue corriendo a algún escondite.

Todos en la mesa presenciaron esa escena, Sehun no dijo nada, claro le tenía miedo a las serpientes y todos esos bichos que, en su infancia, su hermano ChanYeol se encargó de dejarle en la cama o en el baño provocando gritos y llanto. Al recordarlo solamente pudo ocultar una sonrisa de nostalgia, cuando eran tres hermanos, así era mejor la vida, antes de Xiumin, y lo mejor de todo... antes de Sam, sin duda una vida sin Sam sería lo mejor del mundo.
Xiumin tampoco dijo nada, lo único que le provocaba ese animal era recuerdos dolorosos, ese día en que perdió a su amado esposo y a su primer hijo, al final... podía recordarlo y no llorar, las terapias habían servido para este momento, esperaba que así siguiera.
ChanYeol solamente siguió comiendo, su hijo era su viva imagen, le gustaba ser curioso, sentirse libre... pero también sabía en carne propia lo que era ser el último lugar, que uno de sus hermanos fuera catalogado el perfecto, el correcto... le dolía, y le dolía que todos fueran en contra de sus pensamientos, el solamente quería ser libre, pero en este mundo, en el mundo de la realeza... no se podía.

***

Los sirvientes buscaban a Yeong por todos lados, no sabían nada de él desde el desayuno y la comida iba a ser servida. ChanYeol decidió buscar en un lugar, quizás podía estar mal, porque nadie sabía de ese lugar más que él y su amado hermano JongDae.

ㅡ ¿Estás aquí, Yeong? ㅡ dijo fuerte mientras escuchaba hipidos. ㅡ Ya te escuché, vamos sal de ahí. ㅡ el niño salió con su serpiente en la mano mientras ChanYeol le daba una sonrisa cálida. ㅡ ¿Cómo llegaste acá?

ㅡ Así como tu llegaste también. ㅡ ChanYeol comenzó a reír y cargó a su hijo mientras miraba el lugar, hace mucho tiempo no venía acá.

ㅡ No me la quites, fue un regalo de mis amigos, ellos... tienen mi edad, ellos también estudian... ellos son como yo. ㅡ Chan se sorprendió al ver el grado de pensamiento que tenía su hijo, él veía a todos iguales y siempre debía de ser así, sin duda tenía un pensamiento parecido al de su hermano JongDae.

ㅡ Lo sé hijo, pero debes entender que tu padre Sam tiene miedo de que algo te pase, además... A tu hermana también puede darle miedo, a tu tío Sehun también le da miedo esos animales. ㅡ el niño se entristeció, pero tenía que aceptarlo.

ㅡ De acuerdo. ㅡ le dio la serpiente a su padre, Chan se sentía destrozado, pero debía de obedecer a Sam.

***

ChanYeol estaba en el balcón admirando la noche, las estrellas, en su mente seguían esos recuerdos de Baek, bailando, cenando, divirtiéndose. No podía dejar de pensar en esa noche, incluso pensaba en ya no volver, pero esos dos boletos... le hacían pensar que sería una noche inolvidable.

ㅡ ¿Podemos hablar? ㅡ El rey se sobresaltó al escuchar a Sam y asintió volteando.

ㅡ Sí, dime Sam. ㅡ​ el esposo soltó un suspiro y trataba de ocultar la obviedad del asunto del que iba a hablar.

ㅡ ¿Ya pensaste lo de tu hermano? ㅡ Chan no entendía a qué se refería. ㅡ Me refiero al matrimonio.

ㅡ Sam, te dije que no tocaras ese asunto, yo después lo iba a ver...

ㅡ Pues lo vas a ver ahora y yo decido que se case. ㅡ dijo con autoridad en medio de una discusión.

ㅡ Sam. No puedes decidir el futuro de mi hermano, puedes decidir las cosas de los pueblos, pero no de mi hermano.

ㅡ ¿Te parece poco lo que me hizo ayer? ㅡ Chan lo recordó y negó.

ㅡ Entiendo que fue de mal gusto, pero ninguno de los dos me dijo que había pasado. ¿Cómo quieres que sepa el contexto de las cosas si ni uno no otro quiere hablar? ㅡ dijo a bajo tono, pero teniendo ese tono de querer gritar.

ㅡ No tienes que saber los detalles. ¿Que no te has dado cuenta que tu hermano me odia? Me odia desde el día en que llegué.

ㅡ Mira, Sam, no voy a discutir contigo el futuro de mi hermano, así que...

ㅡ Así que ¿Qué? ㅡ dije enfrentando a su esposo con la cabeza hacia arriba y cruzado de brazos. ㅡ ¿Vas a dejar que todos se enteren de cómo es tu familia? Si mañana no dices nada en el consejo sobre su compromiso... todo el pueblo sabrá que tu y yo no nos queremos, ni siquiera nos toleramos, que todo es una farsa, ademas de tus hijos ¿te gustaría ver a esos niños destrozados? Ver qué todo ese amor es falso, ver que su familia... sus padres, no existen. ㅡ ambos se miraban a los ojos, ChanYeol no se contuvo y doblegó, se fue sin decir nada. ㅡ sé que lo harás. ㅡ sonrió con malicia viendo como su esposo se iba.


***

ㅡ Los barcos con mercancía están en el muelle esperando a ser descargados, su majestad.

ㅡ Manden a gente joven y adulta capaz de hacer el trabajo, distribuyan por todos los pueblos las raciones y la paga será de cien monedas para aquel que vaya a ayudar. ㅡ decía el rey serio en medio de todos los informes, a lado estaba Sam escuchando todo y como firmaba todos esos papeles.

ㅡ Rey Park. ¿Todo se encuentra bien? ㅡ el mencionado solamente asintió.

ㅡ No hay nada malo. Eso sería todo. ㅡ sonrió desmotivado, recogió algunas cosas y se levantó. ㅡ Una cosa más... llamen al príncipe KyungSoo, desposará al príncipe Sehun, mañana mismo. Por favor, preparen la cena de bienvenida para las nupcias. Permiso. ㅡ se fue sin ver a nadie más, los tres consejeros se miraron entre sí y el cómplice miró a Sam​ el cual le sonrió triunfador.

ㅡ Entonces al final logró convencer al rey, príncipe Sam.

ㅡ Te dije que cedería, ahora toca ver el rostro de Sehun cuando se entere.

ㅡ ¿De qué tiene que enterarse? ㅡ las dos personas se detuvieron y se sobresaltaron. Sam​ miró a Xiumin caminar con sus sirvientes.

ㅡ De nada. Solamente hablábamos, una conversación de dos personas. ㅡ volteó los ojos Sam​mientras Min se quedaba confundido. ㅡ no seas un metido. ㅡ Rodeo a las tres personas, el consejero siguió atrás de Sam​ llegando a los campos de flores que tenían como jardines traseros.

ㅡ Al menos no dije nada imprudente, pero igual, Yo sé que a Xiumin le tomará por sorpresa esta noticia y entonces sabrá que yo gané, Sehun fuera del camino y yo podré apoderarme de todo.

ㅡ Es muy inteligente, príncipe Sam. Una vez que el príncipe KyungSoo llegue aquí, lo pondrá de su lado y entonces... destruir a la familia real. ㅡ Sam​ sonrió con triunfo y asintió.


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