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ㅡ Vamos Suho, levantate. Tienes que desayunar algo. ㅡ Suho negó aun estando en la cama envuelto en las sábanas, Baek fue a su lado y se sentó. ㅡ ¿Aún no quieres hablar de lo que pasó ayer? ㅡ acarició el brazo de su amigo el cual volvió a negar. ㅡ tranquilo, no quiero presionarte. Hoy... hoy es el cumpleaños de ChanYeol, lo llevaré a otro lado a cenar y darle su regalo, puedes quedarte en casa, no quiero que estés con tu padre o en el teatro pasando frío e incomodidad.

ㅡ No, hoy... tengo cosas que hacer con mi padre. Los dejaré solos, así que no te preocupes por mi.

ㅡ Suho, por favor. Quedate aquí.

ㅡ Tranquilo, estoy bien. Deja de preocuparte por mi. ㅡ se destapó y sonrió, era una sonrisa triste, pero tranquilizaba a Baek.

ㅡ Ooh, Suho ㅡ Baek hizo un puchero y abrazó a su amigo. ㅡ no tardes tanto en decirme lo que pasa. ㅡ Suho negó aunque su amigo no podía verlo. ㅡ Por favor, desayuna algo. Yo voy a preparar todo para la cena con ChanYeol. También tengo que mandarle una carta, espero que pueda responder. ㅡ se levantó y salió a comprar algunas cosas, Jun no podía salir de la cama, le dolía mucho seguir pensando en Sung.













***









ChanYeol estaba en el consejo, Sam después de tiempo también estaba ahí.

ㅡ ¿Todavía no hay razón de ese oro? ㅡ los consejeros negaron.

ㅡ No hay problemas con los papeles, su majestad, incluso revisamos las de hace cinco años y no hay nada. Ninguno tiene más dinero que otro aquí, al parecer todo está bien. ㅡ el rey golpeó la mesa molesto.

ㅡ ¿Cómo puedes decir que está bien? Ese oro no pudo desaparecer solamente así, debe haber una explicación... Si ese oro no aparece por ningún lado es porque no fue registrado y fue robado... pero entonces ¿dónde está? ㅡ los consejeros se quedaron callados.

ㅡ Por favor, tienes más oro deja de hacer un alboroto por eso. ㅡ decía Sam cruzado de brazos mientras miraba a otro lado.

ㅡ ¿Más oro? Sabes que tenemos que mantener este reino ¿no? El pueblo depende de nosotros y no sólo es este pequeño pueblo, hay más al rededor. ㅡ dijo ChanYeol igual de enfadado, Sam lo miró entrecerrando los ojos.

ㅡ No me vengas a gritar a mi por tu falta de competencia Park ChanYeol. ㅡ los consejeros se sorprendieron por la contestación.

ㅡ Sam, no te metas en estos asuntos qué no son de tu...

ㅡ ¿incumbencia? Claro que lo son, yo te dije que llevaría la administración del oro porque tu tenias otras cosas que hacer...

ㅡ Y lo hice...

ㅡ Pero siempre te metías, firmabas papeles a lo estúpido y no te dabas cuenta de lo que hacías, no me dejabas entrar a algunos consejos y estos tres no me daban nada de información. No vengas a culparme a mi porque yo no tengo la culpa de nada. ㅡ enfrentó Sam mientras ambos se miraban, ChanYeol se doblegó y se sentó.

ㅡ Lo siento. ㅡ dijo casi en un susurro, Sam rodó los ojos y salió del lugar mientras los consejeros no decían nada. ㅡ es todo, vamos a dejar ese tema. ㅡ los consejeros asintieron, Im, Chan y Han salieron mientras que el mayor consejero se acercó a hablar.

ㅡ Su alteza, sé que no debería meterme, pero... ¿No cree que sería mejor un divorcio? ㅡ Chan volteó a ver al consejero Yoo. ㅡ su padre lo hubiera preferido hacer. El joven príncipe Sam, cree que tiene todo en las manos sólo porque es esposo del rey, pero realmente no, él no tiene nada.

ㅡ Yoo ¿Tu sabes de donde viene, Sam? ㅡ el consejero asintió suavemente, ChanYeol se sorprendió. ㅡ ¿enserio? Dime... hablame de él, MinSeok y KyungSoo dicen que no lo conocen, jamás fue a una fiesta entre reinos, qué no es de un reino lejano, mucho menos cercanos.

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