15- Notas misteriosas.

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En la mañana, cuando Yeimy volvía de correr como normalmente lo hacía; Martín, su chofer, la esperaba en la puerta de la casa con un ramo de rosas rojas.

- ¿Y eso? - sonrió ella en cuanto se acercó. - ¿Tiene una enamorada?

- Pues... Son para usted señora - contestó él con una sonrisa apenada. - El mensajero las trajo, y perdón mi intromisión, pero no dice de quién son, solo que van para usted.

Yeimy frunció el ceño; tomó las flores y observó que traían una nota blanca como las del show.

"Buenos días reina"

- ¿Quién las trajo?

- Pues un mensajero señora - volvió a decir él; alzando las cejas por la pregunta.

Mientras tomaba un baño para sacarse el sudor; pensó que quizá... Las flores las había mandado Charly en forma de símbolo de paz.

Bajó hacia la sala una vez estuvo lista; preparó a los gemelos y les dio de desayunar.

- ¿Hoy viene Charly? - preguntó Mateo mientras se sentaba en el sofá.

- Si - contestó Yeimy, encendiendo el televisor. - ¿Por qué?

- Porque cada vez que viene te arreglás más de lo normal - sonrió Erick.

- Eso no es verdad - frunció el ceño.

- Si lo es - sonrió Mateo.

- Estoy normal - dijo intentando sonar serena.

- Ajá... - dijeron ambos en coro, con los ojos achinados.

La puerta sonó. Ambos niños corrieron hacia ella; ansiosos por la llegada de sus amigos.

- ¡Vane! - gritaron los dos en cuanto la vieron.

- ¡Hola! - sonrió ella en cuanto los vio.

Los tres niños se abrazaron en la puerta y luego corrieron hacia el jardín.

Yeimy observó a Charly desde el otro lado de la puerta con una mirada neutra. Hizo un gesto con la cabeza para que pasara.

- ¿Cómo estás? - preguntó él.

- Bien - contestó ella sin mirarlo.

Charly se adentró a la casa y sin esperar una palabra de su parte, se puso en marcha hacia el jardín, pero esta acción fue interrumpida por la voz de esta mujer.

- Charly, ¿te puedo hacer una pregunta? - dijo mientras fruncía el ceño pensativa.

Él se dio la vuelta y alzó las cejas, seguido a un asentimiento lento.

- ¿Vos me has estado mandando rosas rojas con notas?

Una sonrisa salió de sus labios.

- No - negó. Rascó su ceja y mordió sus labios. - Quizá fue algún fan.

- Eso mismo me dijo Sebas...

Él asintió.

- Pero esas notas no me convencen. Además, son las segundas que me mandan y esta vez llegaron a mi casa. Un fan no pudo haber sido.

- Si pensás que fui yo... Estás equivocada princesa - dijo para después fruncir los labios. - Yo jamás te regalaría rosas rojas - sonrió.

Yeimy asintió con un poco de pena. ¿En qué estaba pensando? ¿Charly regalandole rosas? ¿Para qué?

- Si, tenés razón, perdón por pensar que vos...

- Yo - susurró interrumpiendola. - Te regalaría jazmines, porque son tus favoritos.

Somos vos y yoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora