10- Mis hijos.

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Allí estaba Yeimy; en una sala de hospital, esperando noticias sobre su nueva sobrina y obviamente en compañía de su amiga Cata; quien había llegado unos minutos después que sus amigos. Los recuerdos ahondaron su cabeza.

Flashback

- No me contesta - dijo con frustración y tristeza.

- Dejale un mensaje Yeimy, tal vez está ocupado.

- Ocupado formando su familia - soltó con una risa de ironía.

- Yeimy, si lo vas a tener es importante que él lo sepa también, sino vas a cargar con la culpa toda tu vida. Yo sé que Charly no se lo merece, pero tiene derecho a saberlo, desafortunadamente.

- Ok, le dejo un mensaje - contestó ella poniendo los ojos en blanco.

"Charly, yo sé que no quiere saber nada de mí y que ahora está centrado en formar su familia con Gema, pero siento que debo decirle esto aunque no quiera porque pues, tiene derecho a saberlo... Estoy embarazada, no le digo esto para que vuelva a mí ni más faltaba, simplemente creí que lo correcto era decirle la verdad, ya verá usted que hace".

- Si, eso está bien - dijo Cata.

Unos minutos después el mensaje fue contestado, pero no como se lo esperaban.

"Con la única persona que quiero formar una familia es con Gema, ya se lo dije. Lo nuestro fue un error y si se considera una persona lista lo entenderá. Haga lo que quiera con ese niño, abórtelo que si quiere, a mí no me moleste más".

Fin del flashback

- Yeimy, ¿querés un tintico? - sonrió Cata.

- Ahorita no Cata - contestó ella con apenas una sonrisa.

- Ok - susurró.

Cata se marchó en busca de su bebida.

Yeimy le marcó a su mamá.

- Mami, ¿cómo va?

- Bien mija, ¿usted?

- Pues, aquí en la clínica, Zul está dando a luz.

- Que maravilla - dijo feliz.

- Ma, le quería pedir de favor... ¿Si podría ir a buscar a los clones al colegio?

- Claro que si mi amor, tú papá y yo vamos a buscarlos.

- Muchas gracias - suspiró Yeimy con los ojos cerrados.

- Yeimy, ¿qué pasa? - preguntó su mamá al notar el tono de su voz.

- Nada... Solo estoy cansada - confesó.

- Me imagino que si mi vida. ¿No querés qué nos traigamos a los niños y nos los quedamos esta noche? Así descansás.

- No, no, no los voy a poner en esas - se apresuró a decir.

- Es que a nosotros no nos molesta - dijo sonriendo.

- Está bien - suspiró. - Pero mañana los voy a buscar y los llevo al colegio.

- Ay, si, está bien - rió Manuela.

Colgó.

- Ey - sonrió con agotamiento en cuanto vio a Jack. - ¿Y bien?

- Es muy hermosa - sollozó con felicidad.

Yeimy lo abrazó con fuerza y le susurró al oído:

- Vas a ser un gran papá.

- Eso espero, es lo menos que se merece esa niñita - sonrió mientras limpiaba sus lágrimas.

- Ay, ¿ya nació? - preguntó Cata mientras caminaba hacia ellos.

Somos vos y yoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora