Casi Ángeles - 5 temporada [MI VERSIÓN] (Mini historia)

Capítulo 23 [Revelaciones]

Thiago sigue llorando la partida de Mar, sentado en el piso, apoyado en la pared, al lado del reloj, contento porque haya sido elegida para ser el nuevo ángel de Eudamon pero destrozado por su partida y por haber reaccionado tan tarde. 

Pero desgraciadamente no tenía tiempo ni para llorarla ya que Luz y su gente seguían tratando de entrar y parecían estar a punto de lograrlo.

Así que se levanta con su traje negro ya desarreglado y va hacia la ventana.

Luz: ¿Cuánto más va a tardar? -Le pregunta al cerrajero.

Cerrajero: Ya va, ya va, solo me faltan dos tornillos para sacar la cerradura.

Thiago mira la altura, asomándose.

Thiago: Bueno, al menos hay unos arbustos abajo.

Luz: Vamos.

Cerrajero: Ya esta, solo falta uno.

Thiago empieza a subirse por la ventana.

El cerrajero esta desatornillando el último tornillo.

Thiago: Uhh. -Dice suspirando de miedo al sentir más que nunca la altura subido en la ventana.

Cerrajero: Ya esta.

Los soldados entran por la fuerza en masa haciendo que se caiga la cerradura de la puerta.

Luz: ¿Dónde está?

Teo: O más bien ¿Dónde están? ¿No estaba acá también Don Thiago?

Luz: Fue el portal. -Dice a señalándolo furiosa. -Por eso vibro todo. ¡Fue este MALDITO portal!

Teo: ¿Y ahora como proseguimos señora?

EN EL PATIO.

Thiago: Au. -Dice hundido en los arbustos. -Tengo ramas hasta en donde a Pinocho no le crecían. -Se saca una rama en la que estaba tumbado. -Ay, ya hablo como Mar.

Se levanta de la tierra, sale de los arbustos y empieza a ir al muro apretándose en el brazo derecho, abajo del hombro, ya que de todas las raspaduras que se hizo, ahí tenía la más grave y le empezaba a sangrar.

Una vez en el muro vio que la seguridad estaba muy reforzada, había francotiradores casi por cada metro del muro, y soldados que patrullaban de aquí por allá, no podría salir de ahí como un salvaje o antisocial, así que trata de limpiarse un poco el traje con las manos, y camina recto e imponente hacia el portón.

Thiago: ¡VOSOTROS! INEPTOS -Les grita a los guardias del portón. -ESTAR ATENTOS POR SI VEN A MARIANELLA. Yo voy a fuera porque tengo una pista de donde puede estar su guarida, pero en mi ausencia quiero UN POCO de inteligencia por parte de ustedes ¿esta bien?

Los soldados: Sí, Don Thiago. -Dicen al unísono.

Thiago: Ahora abrirme el portón ¡Y apartaros de mi camino!

El portón se abre y suena:

Luz: ¡No dejen escapar a Don Thiago! -Por todos los Walkie-Takie de los solados.

Thiago: Oh, oh.

Thiago sale por la pequeña abertura de las puertas abriéndose y empieza a correr mientras éstas se empiezan a cerrar. Los soldados exteriores apuntan a Thiago, incluyendo los francotiradores, por lo que Thiago sabiendo que no hay más salida se cubre con los brazos, cerrando los ojos, esperando su fin. Todos los soldados disparan, uno tras otro, una y otra vez, y los disparos rebotan en él como si tuviera un campo de fuerza, al igual le pasó al Profe después de regresar del otro plano tras su encuentro con el Tic Tac oscuro.