╭══════ .✧. ══════╮
[ 🥀 ]
— ¡¡¡NETEYAM!!! — Grito Ao'nung con todas sus fuerzas, al ver a la familia Sully sobre una roca rodeando a quien sin duda, era su chico.
Salto de su Ilu tan rápido como se acercó a aquellas rocas, lanzándose a un lado del Omatikaya que para ese momento ya tenía los ojos cerrados provocándole un escalofrío por todo el cuerpo y mucho temor. No dejo que su familia se acercará, emitiendo un montón de feromonas a su alrededor para repeler a cualquiera que se atreviera a acercarse.
Jadeo con pánico y apego su oreja al pecho de Neteyam, escuchando como su corazón aún latía, pero cada vez más lento.
No, no... no ¡no! ¡¡NO!!
¡¡Se negaba a los deseos de Eywa si estos eran los de llevarse a SU chico!!
Le tomó entre sus brazos y lo giro un poco contra su cuerpo, apegandolo a su pecho mientras le revisaba la espalda, aplicando presión en más de un punto en busca de alguna perturbación.
No dejo de insistir y hacer presión hasta que sintió algo diferente y presionó, aplicando los conocimientos de medicina espiritual que había aprendido de su madre gracias al cielo.
Tan pronto como hizo aquello Neteyam mostró signos de vida, vomitando sangre con coagulación sobre el suelo y parte de su cuerpo, pero eso era lo que menos le importaba.
Este volvió a respirar algo forzado pero con regular normalidad, descansando entre sus brazos.
Le tomó de la nuca y le beso en la frente, dejando escapar algunas lágrimas de agradecimiento a Eywa por no llevárselo con ella.
Neytiri pareció llorar desconsoladamente tras él, probablemente agradecida con que haya salvado a su hijo.
Lo cargo entre sus brazos, sabiendo que este no estaba del todo a salvo y que tenía que ser llevado ante su madre tan pronto como fuese posible.
Siseo a todo aquel que tratara de tocarlo mientras subia a su Ilu, llevandoselo con él. Le valía una mierda si estaba siendo hostil contra la familia de su chico o un punto dios, él estaba primero.
Así se lo llevo hasta alcanzar a ver a su madre, quien enseguida noto su desesperación y le siguió.
Se movilizaron hasta la isla y dejó a Neteyam rápidamente sobre un sitio suave y seguro en la arena, dejando que su madre lo revisará después.
Le tocó buscar todo lo que su madre necesitaba con rapidez y urgencia, sin meditar o detenerse hasta que la vida de la persona que más le importaba dejase de estar en peligro.
Solo fue hasta caída la noche, que se pudo relajar un poco.
Se mantenía al lado del Omatikaya, mirándolo dormir con vendas por todo el pecho y la pierna, respirando muy lentamente. No soltaba su mano en ningún momento y nadie, absolutamente nadie, lo haría moverse de su lado.
— ¿Porque tenías que ir tu solo hasta allá? — se quejó en voz baja y destrozado, sin dejar de derramar lágrimas.
Su ángel... su chico... su precioso gatito salvaje con pequitas de sol, casi lo perdía...
Si hubiera tenido tan solo un estúpido descuido...
Negó ante el pensamiento, sin dejar que este le invadiera. No había manera en el mundo que dejara a Neteyam morir.
Todavía tenía muchos besos que quería robarle y mucho tiempo de su vida por dedicarle como para perderlo.
— ¡hermano! — movió las orejas escuchando la voz exasperada de Lo'ak, seguido de toda la familia Sully hasta el marui donde estaban ambos, su casa.
Siseo en respuesta sin dejar que este se acercará, mostrando los colmillos con su alfa al 100% alerta.
Lo'ak se detuvo ante su reacción, jadeando evidentemente cansado... probablemente habían corrido todos hasta allí después de terminar esa estúpida guerra.
— si lo tocan no pienso responder amable — gruñó en defensiva, no iba a dejar que nadie tocará a Net por nada del mundo.
Y al parecer se dio a entender correctamente, porque ninguno dio un solo paso más para acercarse.
Neytiri le siseo un par de veces con toda la intención de acercarse, pero Jake Sully la sostuvo y la detuvo. Lo mejor que hizo.
Porque en ese momento, se atrevía a enfrentarse a ella sin importarle el miedo y respeto que le haya tenido hasta ese día.
— ...¿Ao'nung? — escucho tras de si, obligándolo a ver a Neteyam rápidamente al reconocerle la voz.
— aquí estoy, aquí estoy — respondió con rapidez, besandole la mano y llevando la palma ajena a su mejilla para que sintiera su calor. Pará que supiera que estaba con él.
Sus ojitos se abrieron con debilidad y le miró, dedicándole una sonrisita débil que le rompió el corazón y provocó que volviese a llorar por verlo así.
— ¿Porque lloras? — murmuró este con debilidad y su bocecita dulce e ignorante ante el filo de la muerte, mientras le acariciaba la mejilla sin fuerza alguna.
— por nada gatito... sigue durmiendo, yo estaré aquí contigo, ¿si? — le pidió con dulzura y todo su amor al límite para no mostrarle lo roto que estaba. Ahora más que nunca lo necesitaba en una pieza y presente.
Neteyam pareció hacerle caso, puesto que tras un tonto balbuceo queriendo decir te quiero se volvió a dormir, dejándolo tranquilo.
— ustedes dos... — murmuró Neytiri, antes de con claro dolor, hacer que el resto de su familia saliera, entendiendo la situación.
Al quedar solos siguió rezando y velando por Neteyam, esperando que al día siguiente esté se encontrará mucho mejor.
Pasase lo que pasase, él no se iba a ir de su lado.
╰══════ .✧. ══════╯
ESTÁS LEYENDO
🌱🍂 Hijo de Omega 🍂🌱
Fanfiction《Omatikaya》 Ellos eran diferentes a los metkayina. Colas pequeñas, delgados, de tonos azules que tocaban al cielo nocturno, pertenecientes de bosque y no de mar. Hijos de tierra, como los llamarían algunos pertenecientes a los mares. Una familia...