Capítulo XXVII: No fuiste feliz III

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- A Gusu – Responde con simpleza y Jiang Cheng lo mira fijamente sin poder creer lo dicho.

- ¡Estás idiota! ¿Por qué iríamos a Gusu? ¡Te dije que me llevaras con mi hermano! – Grita, pero WangJi lo ignora concentrándose en el camino - ¿Me estás escuchando? – Pregunta y Lan WangJi niega.

-No suelo hacerlo – Dice con cinismo y Jiang Cheng se frustra mientras mueve la dirección haciendo que WangJi lo fulmine con la mirada y el carro se mueva en zigzag.

- ¡Imbécil!, ¡devuélvete!, ¡detén el auto! – Exige

-WanYin ¿quieres accidentarte? Exactamente que explicación darás por estar en mi asiento de copiloto – Jiang Cheng se tensa - ¿Acaso querías quitarle el novio a tu hermano porque no has conseguido uno? - Jiang Cheng se detiene y vuelve a su puesto, por eso discutieron con Wei WuXian, ¿acaso Wei WuXian le conto a Lan WangJi?

- ¿Cómo lo sabes? – pregunta bajando la voz.

-Wei Ying no dejaba de preocuparse por haber herido tus sentimientos, solo quiere conseguirte a alguien que te haga feliz, es una tontería – Lan WangJi habla y Jiang Cheng solo se queda pensando, ese es su tonto hermano preocupándose por cosas que no debería, a la vez ve un disco en la guantera, HanGuang Jun se lee y no puede evitar querer tocarlo, pero se detiene a tiempo.

- ¿Qué estas planeando? ¿Mi hermano si quiera se accidento? – Jiang Cheng relaja su tono y mira con dudas a Lan WangJi que solo muestra el indicio de una sonrisa.

-Sigues siendo muy ingenuo – Jiang Cheng tensa su mandíbula y es cuando vuelve a buscar su celular, solo para darse cuenta que tampoco lo trajo.

- ¡Maldición! – Refunfuña para sí mismo.

- Wan er – El cambio de tono le da escalofríos – Te dije que tenemos que hablar – Jiang Cheng se tensa, es un completo imbécil, entro a la cueva del lobo por voluntad propia.

- ¿De qué? – pregunta – No hay nada, me usaste y te reíste de mi – Cuenta y mira el anillo en su mano. – Ni siquiera dijiste que me extrañarías, entonces ¿Por qué quieres hablar?, ¿por qué ahora? – pregunta – Si estas preocupado porque le diga algo a mi hermano, no lo hare – Dice porque es cierto, no planea hacerlo.

- No estoy preocupado – Dice finalmente aun sin verlo, en cambio Jiang Cheng puede verlo de perfil.

- ¿Entonces? – Pregunta - ¿Qué quieres? – Esa es la pregunta que siempre lo atormenta.

-A ti – Jiang Cheng aprieta su mano y esta vez hay un cruce de miradas. Jiang Cheng no responde en cambio deja de mirarlo y sus lágrimas cosquillean.

- No lo entiendo – Susurra para sí mismo, pero sabe que WangJi lo escucha, el carro es demasiado silencioso – Tú te fuiste, nadie te obligó a hacerlo, yo… yo te pedí que te quedaras, entonces ¿Por qué? ¿por qué ahora? – Jiang Cheng pregunta y WangJi no lo mira, se concentra en el camino.

-No lo sabía – Explica – En ese momento no sabía que estaba equivocado y tenías razón – Jiang Cheng frunce el ceño.

- ¿Tenía razón? ¿En qué? - Pregunta
-En que solo tú me amas por los que soy, solo tú me escuchas y me has apoyado…

- ¡Detente! – Pide en un grito - ¡Detente! ¡Detén el maldito auto! - Pide.

- ¿Por qué? – WangJi pregunta aun sin obedecer.

-Porque no tienes una jodida idea de lo mucho que espere escuchar esto, pero es tarde WangJi, es muy tarde – Dice y trata de discernir el camino fue el mismo por el que venía con Lan Huan.

-No WanYin, no lo es – Puntualiza en un tono frio.

-Lo es, tu tomaste tu decisión y yo tome la mía, así que déjalo, detén el auto - Repite.

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