-Esa es otra noticia- miré a mi familia quienes aún estaban muy sonrientes -No somos pareja.
La cara de mi mamá y mi abuela fue todo un poema, mis hermanos solo nos vieron sorprendidos pero no dijeron nada.
-¿Cómo que no son pareja? ¿Dónde lo conociste?- mi papá sonaba enojado, creo que jamás lo había escuchado así -Allison
-Miranda nos presentó- mentí, si les decía que lo había conocido en un bar seguramente nos terminarían matando a ambos.
-¿Cómo que no te vas a casar? En mis tiempos primero se casaban y luego tenían hijos, no al revés
-Pero eran otros tiempos abuela- la miré fastidiada.
-¿Dónde planeas vivir?¿Quién te va a ayudar cuando nazca?¿Qué es eso de él por su lado y yo por el mío?- mi mamá estaba alarmada, parecía que en cualquier momento le daría un ataque.
-¿Qué están diciendo?- Chris no entendía nada, todos habíamos estado hablando en español. Le expliqué la situación para que supiera que mi familia estaba enojada y que preguntaban si nos íbamos a casar y otras cosas.
-Oigan, creo que Al siempre ha hecho todo bien, fue la única de los tres que se graduó sin ningún retraso y la única que se animó a salir de aquí, además, no se les olvide que yo también me embaracé antes de casarme, bueno, Sebastian era mi novio, pero eso no importa, yo te apoyo hermana- sonreí y abracé con fuerza a Ana -Y Chris, bienvenido a la familia- mi hermana también lo abrazó.
-Yo también te apoyo, chaparra, será divertido tener otro sobrino o sobrina- Ramiro me abrazó, ahora con delicadeza y ternura, hizo la misma acción con Chris, solo que dejó de lado la delicadeza y la ternura.
-Solo quiero decirles que no pienso dejarla sola en ningún momento, además de que no estaremos cada quien en su casa, estamos viviendo juntos- las palabras de Chris parecieron calmar en ambiente un poco, pero solo un poco porque cuando mi mamá y mi abuela me encontraron sola siguieron con el tema de querer que me casara con Chris, a lo que les expliqué hasta el cansancio que no me casaría con él.
Por la noche, ambos regresamos a mi habitación, Chris se había ido a poner el pijama al baño mientras yo lo esperaba recostada en la cama revisando mi teléfono, cuando él terminó se recostó junto a mi.
-Lo siento, por todo lo de hoy, no creí que reaccionarían así- él no decía nada, solo me veía mientras seguía hablando.
-No te preocupes, en realidad, creí que sería peor- me sonrió haciendo que la pena por lo que pasó por la tarde se esfumara.
-Yo creí lo mismo- le sonreí de vuelta acomodándome debajo de las sábanas -Buenas noches Chris
-Buenas noches Al- cerré los ojos dispuesta a dormir cuando sentí un suave beso en la coronilla. De nuevo sentí un ligero cosquilleo en el pecho.
Por la mañana, de nueva cuenta desperté con el fuerte pecho de Chris frente a mi, mejor dicho, yo estaba sobre su pecho, mis brazos estaban rodeando su torso mientras que su brazo izquierdo me tenía sujeta suavemente, de verdad podría despertar así por el resto de mi vida.
Despacio y cuidando no despertarlo, me levanté de la cama para ir a ducharme. Me duché lo más rápido que pude y cuando salí lo encontré despierto, tenía la espalda en el respaldar de la cama mientras revisaba su movil.
-Buenos días- sonrió al verme.
-Buenos días- me sequé el cabello bajo su atenta mirada -Si quieres puedes ducharte, en un momento bajaremos a desayunar- él solo asintió y unos minutos después lo escuché encender la ducha.
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No me digas que me amas
Chick-LitCuando Allison, una decoradora de interiores y Chris, un abogado, se encuentran esa noche en el bar jamás habrían pensado que terminarían unidos de por vida por cosa de un par de horas. ¿Podrá Allison hacer un espacio en su corazón para Chris? ¿Dej...