My Little Hope

Secreto

Hace dos días sufrí un desmayo justo frente a Jonás, me sentí muy apenado cuando desperté en la casa grande. Tanto que solo me disculpe y regrese a mi lugar, lo último que deseo es meter en problemas a Jake, sé que ya lo problemas que tiene con su hermano son más que suficiente para mantenerle la cabeza ocupada y Jonás pues me siento mal por hacerlo perder el tiempo. En este lugar hay demasiadas cosas que hacer y tuvo que dejar sus cosas por cuidarme mientras estaba inconsciente.

Suelto un suspiro y le doy un vistazo al reloj que tengo en la habitación, ya casi son las dos de la madrugada y yo no he podido pegar el ojo en toda la noche, tomo una manta y salgo de mi habitación. Camino hasta el pórtico de la cabaña donde está la cocina y mi habitación y me siento en una mecedora de madera que siempre está allí, la noche es algo fría por eso tome la manta. Sostengo la taza con leche tibia que me prepare, pero siendo sincero no tengo deseo de beberla, suelto un nuevo suspiro y me muevo en la mecedora en un vaivén.

Por primera vez en todo el tiempo que llevo en esta situación me gustaría saber quién fue la persona con la que me acosté, me gustaría saber su reacción al saber lo que está pasando. Aún sigo sin recordar cómo fue que hice todo lo que hice, pero ahora hay algo que no me deja arrepentirme. No sé cuándo empecé a tener este sentimiento, pero deseo tanto que este pequeño ya esté en mis brazos, quizás sean las hormonas o mi sentimentalismo, pero quiero ya que el tiempo pase y.... ¿Qué carajos es eso? Me pongo de pie al ver como algo se mueve en la oscuridad de la noche, doy un paso al frente tratando de ver mejor de que se trata. Retrocedo lentamente al ver que la sombra se mueve hacia mí, desde muy pequeño le he tenido miedo al vaquero sin cabeza. Una de las madres sustitutas con la que estuve solía asustarme con eso, trato de mover mis pie, caigo y apenas puedo arrastrarme.

— ¿Estás bien?— dejo de moverme cuando escucho esa voz.

— Oh por Dios, casi muero del susto— me sostengo el pecho aun en el suelo.

— Lo siento— dice el rubio acercándose más— uno de los guardias tuvo un percance así que hago su ronda— dice ayudándome a poner de pie— ¿Por qué estás aquí a estas horas? La noche esta fría— dice viéndome con sus ojos serios.

— Oh, lo siento, volveré a dentro de inmediato— digo tratando de entrar, pero soy sostenido.

— No he dicho que no puedas estar aquí, solo es extraño que estés tan tarde— habla viéndome.

— No puedo dormir— hablo acomodando la manta en mis hombros.

— He... puedo hacerte una pregunta— dice gerente.

— ¿Qué sucede?— pregunto.

— Es sobre Jake— habla indicándome que me siente donde estaba antes.

— No me gustaría ser el causante de que vuelvan a pelearse— digo viendo al rubio.

— Solo quiero preguntar ¿Qué clase de relación hay entre ustedes? Jasón jamás fue alguien que se preocupara mucho por los demás, pero incluso decidió romper su voto de silencio hacia la familia y me llamo por ti— dice como si no entendiera lo que pasa con su hermano.

— Jake y yo somos solo amigos, hemos trabajado juntos en el mismo lugar por casi dos años, aunque antes de eso ya lo había visto un par de veces, una de mis amigas es amiga suya y así nos conocimos, es alguien agradable y si sé que es alguien difícil al principio, pero es un buen amigo— respondo con sinceridad.

— Me gustaría saber ¿Por qué tuviste que venir aquí?— dice haciendo que me sienta incómodo y me remueva en mi lugar.

— He... yo... no es nada malo— digo sin verlo a los ojos— yo... prometo que no se meterá en problemas, si fuera así no habría permitido que Jake me enviara aquí— hablo rápidamente.