Mi Alfa//Omegaverse//Katsudeku

Amor a primera vista?.

5:30 a.m. Botellas de Vino y Alcohol dispersas por todo el interior de esa casa de 3 pisos, sillas y mesas de cristal en pedazos, acompañado de humo a tabaco, entre aquella capa de humo se divisaba una cabellera roja-blanca, sentada frente a la chimenea.

-Izuku.... Izuku...... Jejej...... Ven mi Omega, te extraño mucho, no se por que te fuiste-. Susurraba entre sollozos un alfa heterocromatico completamente alucinando y ebrio. -MUERE IMBÉCIL-. Se escuchó la voz del alfa acompañado de el sonoro sonido de una botella vidriesca estampada con fuerza en la pared más cercana. -Aun me queda tiempo para que regreses y te arrepientas, no te golpeare tan fuerte, solo quiero a mi hijo-. Decía agarrando una de las fotos del pecoso y su hijo, mientras que con un cuchillo augeraba la imagen del Omega.

8:12 a.m. El sol refrescante se colaba por las ventanas de aquel departamento, el cálido silencio reinaba el lugar, hasta que un pequeño grito resonó despertando a todos los habitantes de aquel lugar.

-MAMÁ!!!-. Gritaba entre llantos y sollozos un pequeño pelinegro, al no conocer el lugar en donde había despertado. -Mamá!!!-.

-Ya.. Ya, no llores estoy aquí...... Mamá está aquí-. Susurraba el peliverde abrazando al pequeño alfa. -No llores, estamos con la abuela-.

-Con la abuela?, Pero la abuela no vive con nosotros-.

-Desde ahora en adelante viviremos con ella-.

-Siii-. Grito contento el infante.

-Vamos a preparar el desayuno-.

-Si mami y que vamos a hacer?-. Preguntaba el infante una ves se dirigían a dicho lugar.

-Aun no se lo que tiene tu abuela para preparar-.

Aquella cocina, bueno el lugar donde era la cocina estaba completamente vacio, polvo y telarañas se veían a simple vista en aquel lugar.

-Mamá.........mi abuela es una bruja?-.

-Eh.....n-o, por qué la pregunta-.

-Esque en el cuento que nos leyó la maestra ayer, decía que las brujas tenían las cocinas todas sucias dónde cocinaban a los niños-. Respondió inocente el infante.

-No cielo y no vuelvas a decir eso y menos enfrente de la abuela...... entendido?-.

-Entiendido mami-.

-Mejor nos esperamos a que despierte, para que cocinemos todos juntos-. Dijo el Omega a lo que su cachorro rápidamente salió de ahí para prender el televisor de la sala. En realidad era una total mentira, aquel Omega dijo eso por qué no sabía que más decir, su madre siempre lo regaño por tener las cosas desordenadas y sucias, más tarde ya tendría con que molestar un rato a la peliverde. El sonido de la puerta principal abriéndose, distrajo al Omega, dejando ver a aquella mujer peliverde con 2 grandes bolsas una en cada mano.

-Buenas días, que bueno que ya se despertaron, fue al mercado y traje el almuerzo-. Anuncio la peliverde dirigiéndose a la cocina, dónde guardo todo lo comprado.

Tanto el peliverde como el pelinegro no se esperaban que aquella mujer ya estuviera despierta, y lo más sorprendente ya muy activa.

-Buenos días mamá Inko-. Saludo el pequeño.

-Buenos días mamá -. Saludo el peliverde.

-Mamá Inko se levanta más temprano que tú mami, por qué tú hasta que ya casi voy a la escuela te levantas, cuando no está el señor amargado-.

-Kota, no era necesaria tanta información -. Susurro un peliverde avergonzado.

-Wow, Vero que no has cambiado mucho-. Una sonrisa burlona se dibujo en el rostro de la mayor. -Pero bueno, quien quiere comer Soba!!!-.