3. Cómo empezar

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No es como que Bucky planeara que Steve se pusiera rápidamente manos a la obra con "las lecciones de amor gay" para conquistar a Sam. En realidad, Bucky esperaba no mencionar nada del asunto en absoluto y que su mejor amigo lo olvidara por accidente.

Sin embargo, su enamoramiento por el pelinegro había empeorado conforme los días, pues fue como si a partir del momento en que Steve se lo presentó, no podía dejar de topárselo en todos lados. Al siguiente día de conocerlo, había decidido ir al gimnasio para encontrar algo que hacer por las tardes y distraerse del problema, pero no funcionó al percatarse de que el chico del que más quería huir estaba a metros de distancia de él, sudando y corriendo atractivamente en la caminadora.

Sí, tenía un gran problema.

Pero a pesar de todo, a Bucky aún le quedaba un lugar de refugio de todo lo que estaba pasando en la universidad: el departamento de su hermano Clint. Aunque su hermano de buena fe lo había invitado a vivir con él para que continuara sus estudios sin problema, Bucky odiaba sentirse una carga para él y su prometida. Laura era un gran apoyo para él cuando sentía que necesitaba de esa calidez femenina que su madre le brindaba y Clint estaba más que feliz porque ambos se llevaran bien. En cuanto a su hermano, Bucky lo veía como una figura paterna y ejemplo a seguir desde el accidente de auto de su padre. Lo único que buscaba era esa independencia y estabilidad económica y sentimental que Clint había encontrado con tanto trabajo. Es por eso que Bucky siempre trataba de cooperar con lo que pudiera en casa y no causar problemas como manera de agradecerles todo lo que habían hecho por él.

Con lo único que no contaba es que su hermano fuera a hallar rápido un lugar para mudarse.

—Clint —preguntó Bucky en voz baja entrando al estudio de su hermano tras oír a su hermano colgar el teléfono— ¿tienes un momento?

—Claro Buck, ¿qué sucede? —dijo el castaño quitándose los anteojos y cerrando la laptop para prestarle atención.

—Ayer los escuché a Laura y a ti hablar de lo de la mudanza. ¿Se irán pronto?

La sonrisa de Clint se borró de inmediato al ver la mirada vulnerable y angustiada de su hermano. Sabía que tendrían esa conversación tarde o temprano aunque no la esperaba tan cerca.

—Escucha Buck, sabes que esto iba a pasar. De verdad traté de prolongarlo pero me ofrecieron empleo en Misuri y encontré una zona para vivir perfecta para los dos. Iba a decírtelo más adelante pero... bueno, parece que me ganaste.

— ¿Entonces ese es un "sí me voy pronto y voy a dejarte solo aquí"?

—Bucky —se frotó las sienes empezando a irritarse— no vas a quedarte solo. Voy a pagar tu estancia en las residencias de la universidad y tú lo sabes. No pienso dejar que te falte nada.

Una lágrima resbaló de sus ojos y tras un breve silencio continuó.

— ¿Cuánto tiempo?

—Una semana.

— ¡Clint! —reclamó con la voz entrecortada.

— ¡Lo lamento! ¿Okay? Lamento todo esto, de verdad lo siento. Pero tenemos que seguir con nuestras vidas. Debes empezar la tuya, no puedo estar contigo para siempre.

—Lo sé. Es solo que, y-yo...

La frase de Bucky se vio interrumpida por un sollozo que no pudo controlar. Clint se levantó de su escritorio y corrió hacia su hermano para envolverlo en un abrazo. No había cosa peor para él que ver a su hermano menor tener que enfrentarse a todo solo otra vez.

—Voy a extrañarte. —confesó en voz baja con la cabeza recargada en el hombro de su hermano.

—Yo igual Bucky, pero nada va a faltarte y te visitaré en cuanto pueda, lo prometo. Te lo prometo. —le dijo a su hermano reconfortándolo con suaves palmaditas en la espalda.

╰✮╮

A la mañana siguiente, Bucky se despidió de su cuñada y su hermano y se dirigió a la universidad con un malestar emocional todavía presente en su pecho. La noche anterior había decidido que disfrutaría de la compañía de su hermano todo lo que pudiera antes de que se marchara.

Sin embargo, no dejaría que sus asuntos personales se mezclaran con su vida escolar, ni mucho menos quería que Steve se sintiera mal por él.

— ¡Bucky! —saludó el rubio desde su asiento con su típica sonrisa que terminaba por contagiarle el buen ánimo por las mañanas.

—Estás muy alegre hoy punk, ¿te topaste con alguna admiradora en el pasillo? —cuestionó Bucky arqueando la ceja.

—No, pero ahora que mencionas no saber el motivo de mi emoción, en realidad es porque hoy saliendo de clases toca nuestra primera lección de conquista, ¿recuerdas?

Mierda, pensó Bucky.

—Dios, suena tan horrible cuando lo dices así. —dijo entre dientes con el sonrojo más intenso que Steve había visto en su vida.

—Bueno, ¿qué tal si las llamamos "lecciones de baile"?

—Suena mucho menos espantoso así. Gracias. —asintió.

—Todo sea por mis alumnos. —le guiñó el ojo.

╰✮╮

Cuando sus clases terminaron, Steve le dijo a Bucky que fueran a las gradas de la cancha de fútbol americano ya que era el día en que Thor no dejaba el dormitorio ni a sol ni a sombra.

—Antes de empezar forma con las lecciones me gustaría saber a que nivel estarías dispuesto a llegar con Sam.

—Steve...

— ¿Qué?

—Creo que ya sabes la respuesta. —dijo mirando fijamente al rubio.

—De acuerdo, sexo.

— ¡Steve!

—Bien, las lecciones de baile las separaré en secciones para enfocarnos individualmente en cada cosa que sea necesario aprender. Ahora solo necesito que jures solemnemente que harás todo lo que pida por más vergonzoso que suene y que al terminar las lecciones, irás inmediatamente con Wilson a practicar lo aprendido, ¿entendido?

Bucky suspiró cansado y con una mano tapó su cara sonrojada y alzó la otra al aire.

—Bien, bien. Lo juro, lo juro, ¿okay?

—Ese es mi chico. Ahora... ¿por dónde comenzamos?

Sip, estoy jodido, era lo único en lo que podía pensar Bucky Barnes.














Yo también quiero que Steve me de lecciones de baile UnU.
Espero y les haya gustado el capítulo. En tik tok ya subí un edit con la estética de la fic.

No se olviden de compartir, votar y comentar la historia. Nos leemos luego <3
—stuckyftlarry

One Month to Fall | StuckyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora