4. Cómo charlar

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— ¿Qué te parece si empezamos por hablar? Antes que nada —preguntó el castaño incómodo.

—Oh, cierto, cierto. Lo siento. Okay, eh... para crear un vínculo especial con alguien necesitamos que hagas lo posible por saber los intereses de la otra persona y encuentres cosas en común con él, ¿de acuerdo? Mi primer consejo aquí es que no mientas por querer impresionarlo, si algo no te gusta y a él si no forces a que te guste igual. Se dará cuenta tarde o temprano y terminará por arruinarte tu posible futura oportunidad.

— ¿Y cómo precisamente voy a iniciar una conversación con él si no sé que tenemos en común?

—Bueno, mi juego es el viernes y él estará ahí. Tienen un juego, un lugar y un amigo en común. Empieza con ello.

—Bien, eh... hola, soy Bucky. Bonito clima para el juego de hoy, ¿no es así?

Steve quería reír a carcajadas por la sonrisa forzada de su amigo.

—Uh... ¡perfecto! Ahora dilo como si no pareciera que te da asco conversar conmigo.

— ¡Steve!

—Vamos, tú puedes hacer mejor que eso. Hazlo de tal manera en que no se sientan incómodas o forzadas las cosas. Solo imagina que soy una otra de tus chicas.

—Está bien, está bien. —suspiró cansado— Es bonito como se ve la cancha al atardecer, ¿no es así, Sam?

—Si, es bonita la vista. Bucky, ¿verdad? —extendió su mano para saludarlo al igual que Wilson siempre acostumbra.

—Sip. ¿Te gusta mucho el fútbol americano como a Steve?

—En realidad no. Soy más de atletismo que de anotar con una pelota. ¿Y tú?

—No sé nada de esto. Solo vengo porque Steve quiere esté aquí y porque sino venía iba a recordármelo con sus ojos de perrito triste durante toda la semana.

— ¡Hey, Bucky! Eso no-

—Shh, Steve no te salgas del papel. —lo interrumpió con un dedo sobre sus labios.

—Y dime Bucky —resaltó el nombre del castaño con irritación provocando una risita de parte Barnes— ¿qué es lo que te gusta hacer entonces?

—Amo leer. Libros de historia generalmente, aunque a veces los de misterio o romance son entretenidos igual.

— ¿Y qué tipo de libros de historia te gusta leer?

—Sobre la Primera o Segunda Guerra Mundial específicamente. Sé que son de las peores cosas que le han pasado a la humanidad pero mi abuelo participó en la segunda y mi padre fue a vietnam, así que crecí con las historias que mi padre me contaba de ambos. Me gusta entender los conflictos políticos y el razonamiento humano para comprender las causas de conflictos tan grandes como esos y así poder hallar una manera de explicarle a las personas de alguna forma todo esto para que en el futuro estos no se repitan.

—Vaya, no pensé que fueras del tipo historiador.

—Es para lo que estudio. Quisiera escribir mi propio libro o trabajar con National Geographic algún día y hacer un documental.

—Soy un tonto en historia. Luego podrías hablarme de alguno de esas guerras que dices.

—Dudo que Sam sea tonto con la historia Steve. —negó Bucky divertido.

—Es cierto. Es igual de listo que tú. Ambos se llevarán increíble. —aseguró con una pequeña sonrisa.

— ¿En serio? —preguntó con la mirada iluminada de esperanza.

—Si. —asintió con la cabeza— Estoy seguro.

—Gracias, Steve.

—No hay de que Buck.

╰✮╮

El viernes había llegado y Bucky no había podido visualizar a Sam entre tanta gente en el público. Steve le había dicho que llevaba una camiseta color vino pero ni con eso Bucky pudo encontrarlo antes de que iniciara el juego. Rendido, Bucky se sentó en las gradas a observar el partido sin más. Steve le había comentado que al ser de primer semestre, el partido era insignificante en realidad, pero que con esto determinarían quienes se irían y quedarían en el equipo antes de enfrentarse ante otras universidades en competencias más importantes. La Universidad de Princeton se había ofrecido para llevar a sus jugadores y jugar un partido amistoso.

Bucky no podía entender del todo lo que pasaba en la cancha pero solo sabía que la multitud gritaba como loca cuando cierto rubio que conocía muy bien tomaba el balón y corría como el diablo para anotar. Bucky no podía evitar sonreír ante el reconocimiento que Steve estaba teniendo finalmente después de todos esos años en Brooklyn cuando lo vio sufrir. Estaba orgulloso de él.

Cuando el partido acabó, la universidad había ganado y se habían reunido todos para levantar a Steve en hombros y lo llevaron a recorrer un pequeño tramo de la cancha en círculos para celebrar. Bucky bajó de las gradas y corrió hacia el grupo de jugadores para felicitar a Steve cuando una mano lo detuvo por el hombro.

—Yo no haría eso si fuera tú. Te ves buen chico y todos los tipos de allá solo son idiotas.

—Eh... ¿disculpa, tú eres...?

—Natasha Romanoff.  —se presentó la pelirroja con una pequeña sonrisa y golpeándolo ligeramente en el hombro— Soy amiga de Rogers. Créeme que no quieres ir allí. Solo conseguirás que lo molesten o te ofendan. Esos festejos son muy exclusivos para ellos. Como dije, idiotas.

—Bucky Barnes —se presentó con un pequeño apretón de manos— también soy su amigo.

—Wow, ¿tú eres Bucky? No sabes lo mucho que Rogers nos cuenta de ti. Se nota que te estima mucho.

Barnes no pudo evitar sonrojarse hasta las orejas imaginando a Steve hablarle a sus amigos sobre él.

—Eso creo. Solíamos jugar juntos cuando éramos niños y Steve no podía salir de su casa sin terminar estornudando. —sonrió con cierta nostalgia— Nadie en el vecindario quería jugar con él y su mamá nos preparaba galletas mientras nos sentábamos a colorear en el piso de la sala. Eran buenos tiempos.

—Es lo más tierno y cursi que he escuchado hoy, ¿sabes?

—Lo siento.

—Está bien, no te disculpes. Me alegra saber que a parte de Sam, Thor, Bruce y yo, tiene alguien más que se preocupa por él. No como esos estúpidos de abajo. Cuando lo conocí pensé que sería igual que ellos: descerebrado, mimado y sin humildad. Pero cuando Sam lo invitó a mi recital de ballet y me trajo un ramo de flores sin pedirme mi maldito número o coqueteándome, empecé a verlo distinto. Es especial.

—Sí, supongo que es por eso que lo admiran mucho.

— ¿Tú lo admiras?

Bucky vio reír a Steve a la distancia mientras sostenía su casco con el rostro lodoso, y en ese instante solo podía recordar al pequeño Steve con un ojo morado y el dibujo de Coney Island más bonito que había visto entre sus manos.

—Si. Mucho.

Bucky sintió las comisuras de sus labios elevarse tras decir eso pero tan solo le restó importancia.













Natasha que es una parte importante en mis historias, no saben como la amo :') .
Espero y les haya gustado el capítulo de hoy y recuerden que en mi perfil de tik tok (lwtbarnes) hay un video con el aesthetic de la fic por si quieren darse una idea de cómo me imagino la historia.

No se olviden de compartir, votar y comentar.
Nos leemos luego <3
—stuckyftlarry

One Month to Fall | StuckyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora