Destined 『Alchemy Of Souls』✔️

18: "Flor"

—Joven amo, es hora de irnos—Me adentré a la habitación de Uk donde se encontraba él con Mudeok.

Había pasado un día desde lo acontecido, me sentía mejor con respecto al dolor de espalda, así que había decidido acompañar a Uk y Mudeok a una fiesta que harían en honor a Uk ya que consiguió ser un nuevo hechicero en Songrim.

—¿Te sientes bien Yeon-soo?–Me preguntó Uk con un tono de preocupación en su voz.

—Si joven amo—Asentí con una sonrisa.

—No podemos dejarla aquí sola—La señora Kim se acerco a mi con una sonrisa.—Nos ha estado ayudando bastante, aunque no me parece que vaya a trabajar aquella fiesta, tienes que descansar.

—No sé preocupe señora Kim—Le dedique una sonrisa.—Ya ne siento mejor.

—Esta bien Yeon-soo—Uk nos dedico una sonrisa.—Cualquier cosa nos avisa.

—Tome joven amo—Mudeok se acercó a nosotros.—Es una pastilla que me dio el señor Heo.

—Oh, la conozco—La tomo entre sus manos.—Vamos a compartirla.

La partió en la mitad y se la dio a Mudeok. Oculte mi sonrisa al ver como la señora Kim se quedó esperando por su pedazo pero nunca llegó y se marchó indignada siendo seguida por Uk que le quería dar el pedazo que le correspondía a él.

—Vamos Mudeok—Entrelace nuestros brazos y caminamos a la par.

La fiesta sería en Chwiseollu, así que nos dirigíamos así allá. Al llegar habían muchos hombres, la mayoría hechiceros de Songrim del Jeongjingak. Había decidido ir para poder ayudar con el servicio, seguramente necesitarían ayuda. Divisé a Yul a lo lejos, me iba acercar a él, pero vi como Mudeok lo hizo primero, así que decidí seguir con lo que hacía. La fiesta iba bien encaminada, todos charlaban y bebían con tranquilidad.

—¿Puedes traer otra botella?—Otra chica que también ayudaba me preguntó.

—Eh, si, no hay problema, enseguida la traigo—Me aleje para ir al lugar al que debía ir, estaba algo alejado de la fiesta así que decidí apurarme.

Todo estaba en silencio, a excepción del lugar donde se celebraba la fiesta. Salir al aire libre se sintió bien, necesitaba respirar algo de aire fresco. Me había quedado en la casa de los Jang durante todo el día descansando a petición de mi hermana, de Uk e incluso de la señora Kim.

—Es una bonita noche—Susurre para mi misma cuando iba devuelta a la fiesta con la botella que me habían pedido.

Iba pasando y había un chico sentado en una banca cabizbajo, iba a dejarlo pasar, pero reconocí su ropa.—¿Joven amo Seo?

—Yeon-soo—Alzó su mirada para verme.—Eres tú.

—¿Qué hace sentado aquí afuera?—Deje la botella a un lado de él.—¿No seguirá bebiendo con los demás?

—No lo creo, ya bebí demasiado—Me sorprendió escuchar eso.—Ya estoy ebrio.

—¿Enserió?—Trate de verlo mejor.—No lo parece.

—Lo estoy—Confesó.—Es por eso que me perdí.

Lo mire confundida sin entender muy bien sus palabras, ante mi silencio alzó su mirada para observarme.

—Me pierdo cuando estoy bajo los efectos del alcohol—Me explico.

—Pero—Observe nuestro alrededor, no había nadie.—No es normal perderse aquí, ¿o si?

Él guardo silencio y volvió a bajar su mirada. Mantuve mi mirada en él durante un par de segundos.

—Vamos, levántese—Agarre su brazo.—Yo lo llevare.

Agarro mi mano detuviendome.—¿Esa botella para que es?

—Me pidieron que fuera a buscarla.

—Entonces debes ir a dejarla—Me miró a la cara. Nuestras manos seguían juntas.

—Ellos pueden esperar—Agarre su mano con fuerza.—Vamos. Siento que esta muy pensativo.

—¿Tú espalda se encuentra bien?—Pregunto con un tono de preocupación.

Asentí, me coloque enfrente de él.—Sino hubiera sido por usted y su ayuda, tal vez hubiera estado peor.

—Pero yo te ataque—Hablo en voz baja.

—Creía que era la enemiga, es entendible—Desvíe mi mirada.—Esta demasiado pensativo, es porque tiene muchas cosas en la cabeza. Intente concentrarse en una sola cosa.

Él me observaba en silencio, sin decir ninguna palabra.

—Ahora concéntrese en mi, solo en mi, y sigame—El bajo su mirada a nuestras manos y acarició levemente mi mano.

—De acuerdo, solo me concentrare en ti—Hablo luego de unos segundos.

Entrelazamos mejor nuestras manos y comenzamos a caminar. Sentí una sensación extraña en mi estomago, estaba nerviosa. Siempre lo estaba cuando se trataba de él, pero ahora más porque ya sé quien es él. Había algo que no recordaba del todo y que me causaba curiosidad.

—Joven amo, tengo una duda—Hable.—Cuando me desmaye, ¿le dije algo?

—Dijo que me amaba.

—¿Qué?—No pude evitar mi sorpresa.

—¿Por qué te sorprendes?—Me cuestionó.—¿Acaso es mentira?.

—Eh, no—Guarde silencio.—Es cierto, yo lo amo.

Él me miro y soltó mi mano. Se giro y saco una flor que se encontraba detrás de él. Se acercó a mi y la coloco por encima de mi oreja. Lo mire confundida ante su acción, pero no pude contener mi sonrojo y sonrisa. Nos quedamos cerca unos segundos más, ninguno de los dos hacía ningún movimiento. Solo nos mirábamos a los ojos.

—Un obsequio—Me dijo luego de unos segundos.—Puedo ir solo, debes hacer cosas aquí, cuídate.

Agache mi cabeza agradecida. Acaricio mi cabello, me dedico una sonrisa y me alejo lentamente. Observe como se marchaba. Él era aquel chico, y poder volver a relacionarme con él era mágico. Mis sentimientos por él seguían intactos, lo espere por un tiempo, hasta que volvió.

Gracias por volver a mi.