Sans no tiene opción, La mala suerte quiere abrazarlo.Lo hará, si al final podrá ver a Aliza...
—...Maldición, está bien—cede el esqueleto.
Provocó una leve risita por parte de la malévola humana. Parecía disfrutar tener el control, disfrutar ver a los demás ceder...
—Al final, terminaste obedeciendo. ¡Qué extraño! Creí que eras un esqueleto, no un perro —lo miraba con satisfacción repulsiva.
—Si yo soy un perro... entonces tú eres una verdadera perra, Heh.
—¡Cuida tu sucia boca! ¿¡No ves que estás hablando con la persona que tiene la vida de Aliza en sus manos!? —se exaltó indignada. El comentario del esqueleto le ofendió hasta la sangre.
—Claro que lo sé, y por esa misma razón, ¿Porqué debería hablarte bien, eh? Idiota. Acaso quieres que te diga algo como... ¿Cariño, no maltrates a mi humana, por favor?
De algún modo, la reacción de la humana era de esperarse.
—¡Maldita sea...! No vuelvas a hacer eso, fue asqueroso... creo que... vomitaré.. bleeghh
—Esa es la descripción gráfica perfecta de cómo te conocí, igual de repugnante —reía con descaro Sans.
—¿¡Qué acabas de decir!?
Su carácter, es fácil de provocar.
—¡¿QUIENES SON LOS PERROS QUE LADRAN SIN CESAR?! ¡INTENTO CONCENTRARME EN COCINAR! — interrumpió una aguda voz—... ¡OH! ¡ESO RIMA! ¿DEBERÍA CONSIDERAR VOLVERME UN MONSTRUO RAPERO?
—Hey paps —saludó a su hermano.
—...¡OH! SANS, ERAS TÚ. ¡TE DIJE QUE NO TENDRÍAMOS MASCOTAS! ¿POR QUÉ TRAES A UN PERRO TAN RUIDOSO CONTIGO? —cuestiona sin pizca de sutileza.
Creo que no miró bien que era un humano lo que estaba con Sans y no un perro...
—Pfftt... —no pudo contenerse, y explotó en carcajadas.
No sabía qué era más gracioso. la confusión de Papyrus, o la cara de la malvada humana. Ante esas burlas, ella miró al esqueleto. Le recordó lo que debía hacer... la sonrisa de Sans se desvaneció.
—Eh... Paps, tengo algo que decirte.
La humana se veía expectante, escuchando con atención. Sans continuó.
—Sabes... sobre la humana... —balbuceaba, evitando el contacto visual.
—¿QUE OCURRE CON LA HUMANA, SANS? OH... TAMBIÉN LAMENTO HABERLA CONFUNDIDO CON UN PERRO. ¡FUI GROSERO! —dijo Papyrus.
—Nah, no te equivocaste, bro. Lo que tenía que decir, es que la humana irá de paseo conmigo. tenemos unas cosas que... aclarar —dijo clavando su vista en la sorprendida humana.
—OH... ¿OK? SUERTE ENTONCES, HERMANO. ¡ADIOS! —se despidió el gran esqueleto.
Ahora, los dos perros gruñían.
—¿Qué pretendes, escoria? Esto no era parte del acuerdo...
—Que me traigas a Aliza de nuevo —se encogió de hombros.
—¿No quisiste aceptar, eh? Supongo que me dejé llevar muy pronto —dijo la humana mientras tomaba una piedra del suelo.
—¿Que harás? ¿Me tiraras esa piedra como una idiota?
—Ya quisieras, a los perros les encanta ese juego. Pero...—ella se golpeó fuertemente el brazo con la piedra.
Una herida bastante dolorosa a la vista, pero esta humana disfrutaba la sangre...
El esqueleto quedó en silencio. No podía soportar eso. Se acercó y la tomó del brazo.
—Maldita sea... déjame ver.
—¿Que pasa? ¿Te preocupas? Ja.
—Por el bienestar del cuerpo de Aliza, ¿Acaso crees que me preocupo por ti? basura...
La humana bufó con fastidio.
—Llévame con ella. Me rehúso a seguir órdenes de una escoria como tú. Ríndete...—gruñó Sans.
Si el esqueleto no hace lo que ella quiere, ¿Qué se supone que haga? Su objetivo se desmorona. Pero, no se dará por vencida tan rápido. Será mejor que juegue un poquito más...
—Oh, qué lástima. Tendré que rendirme... te llevaré con tu humana —murmuró la copia barata de Aliza.
Ambos comenzaron rumbo lejos de casa, El lugar de donde vino la copia, y donde está Aliza. ¿Podrán encontrarla? ¿O es otro plan de la humana malvada? Ella llevó al esqueleto a un lugar bastante seco y árido. Parece que antes ese lugar fue brillante, según un vago recuerdo de Sans.
—Mírate, será imposible encontrarla con esa cabeza hueca que tienes...
—Imposible será que salgas viva cuando la recupere.
La humana malvada quedó callada.
Sans miraba alrededor, ese lugar era familiar. Aunque, debido a su estado actual, (Psicópata desquiciado con pérdida de memoria y déficit de atención)... no recordaba con exactitud que fue ese sitio.
—¿Qué es eso? —fijan su vista hacia delante.
—Es obvio que es un ascensor. ¿Eres idiota?
Era extraño ver un ascensor en medio de la nada, sin embargo, no le preocupó demasiado. La humana estaba raramente callada. Nadie sabe lo que planea, aunque en definitiva no es algo lindo.
Ambos entraron al ascensor, ya que estaba abierto. Por suerte, aún funcionaba. Algo considerable... ¿Quién podría usar un ascensor en medio de la nada? De ser que nadie lo use, No estaría en funcionamiento. El ascensor llevaría a un lugar en el que esté Aliza.
—¿Cómo funciona esta porquería? —preguntó ansioso
—Igual que tu cabeza, dale un golpe y funciona —dijo ella.
Luego de eso, Sans golpeó brusco los botones del ascensor. y *Clin* encendieron.
—Déjame encargarme —se aproximó la humana al botón, empezando a bajar.
—¿A donde nos llevará esta cosa? —duda el esqueleto.
—El lugar donde naciste —hizo saber ella.
—¿Dónde nací? —repitió Sans.
—De la basura.
Repentinamente, se escuchó un sonido y las puertas del ascensor se abrieron con lentitud.
—¿Un laboratorio? —murmura el esqueleto, mirando alrededor.
Su voz hizo eco en la sala. La malvada tonta que estaba a su lado hace un segundo, desapareció igual que Aliza.
—¿Sans? —se escuchó una voz, una voz dulce y familiar.
El esqueleto la reconoció al instante.
Sin embargo, había algo extraño en el ambiente. Algo no estaba bien.
ESTÁS LEYENDO
Quiero comerte sin cortarte |SansxAliza Horrortale|
FanficLuego de evitar ser comida o asesinada por cualquier monstruo, decide convivir con ellos. Por suerte, logra salir ilesa. Un día, un monstruo intenta asesinarla, pero se sorprende cuando Sans aparece. Aunque... resulta que no es lo único que hace San...