▸ 𖥻 𝗙𝗘𝗡𝗜𝗫 ˑ 𖦹
━━ 𝘵𝘩𝘦 𝘤𝘩𝘳𝘰𝘯𝘪𝘤𝘭𝘦𝘴 𝘰𝘧 𝘯𝘢𝘳𝘯𝘪𝘢.
El rey fénix, con plumas de oro y ojos llameantes,
vuela con un fuego eterno que nunca se apaga.
Renace cada amanecer, llevando una cor...
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ACTO UNO | CAPÍTULO 16 ❝ Realidad ❞
Decir que no estaría feliz seria una gran mentira.
Durante los últimos quince años los Pevensie y yo reinamos como nunca. Peter venció a los gigantes del norte. También Susan, Edmund, el señor Tumnus y yo visitamos Calormen. A decir verdad, me encanto su volcán que era mas conocido como La Montaña Llameante de Lagour, Calormen era increíble, pero su heredero al trono; el príncipe Rabadash no era muy amable que digamos.
Secuestro a Susan ya que ella no quería casarse con el, lo cual, me enfado mucho, si una dama se niega hay seguir esa orden, el respeto ante todo. Pero claro, aquel príncipe orgulloso y cruel no era bueno para Susan. Al final tuvimos que escapar de Tashbaan y nunca volvimos ahí.
Aunque bueno, el príncipe con su orgullo herido armo un ejercito para atacar narnia y aun así salio derrotado.
Y se lo había advertido con mi fuego al quemarle el cabello, pero nadie hace caso a un " niño ave inmaduro " .
Después de eso, durante seis años les enseñe las leyes de narnia y su historia, desde sus primeros reyes y príncipes hasta la invasión de la bruja.
No había estado en la biblioteca de Cair Paravel desde hace mucho tiempo, y cuando estuve ahí, todos los recuerdos de Aslan enseñándome junto con otros reyes, invadieron mi mente.
Era lindo recordar el pasado junto a Aslan, era muy lindo que ese niño pequeño tuviera el valor para subirse a su lomo y correr por las montañas del Sol.
Ahora mismo corría escaleras abajo para llegar al establo, pues los hermanos dijeron que me apresurara para atrapar a un ciervo blanco.
— ¡Apresúrate, Zylan! —escuche gritar a Peter.
— ¡Ya voy!
Corrí mas rápido y pude observar a los reyes de Antaño esperarme en sus caballos.
Habían crecido demasiado, mientras que yo seguía pareciendo un " adolescente ", como me decía Susan, pero aun así era mucho mayor a ellos.
— Vamos lindo, ¿qué esperas? —hablo Edmund.
El ahora tenia veinticinco años. Mi relación con él era distinta, desde que Aslan se fue, me dedique a ser su amigo y cuando tenia quince años lo empece a cortejar, y con la ayuda de sus hermanos pude por fin estar con el.
Le había propuesto que fuera mi pareja en el verano, en la cima de las montañas del Sol, observando el amanecer y la vida de nuevas flores de fuego.
El acepto, y después de eso apreciamos el bello amanecer.
— Sigo pensando que es mejor que yo vaya por el ciervo —exclamo Edmund.
— Vamos Ed, sera divertido ir todos juntos —Lucy comento entusiasmada.
