Últimamente veía más a Alma pues tenía presentaciones en la Ciudad de México.
Y Sebastián estaba ocupado todo el tiempo pero ahora sí le contestaba los mensajes y cuando no podía, le marcaba por las noches para contarle su día. Con eso le bastaba a Ari.
Sebastián amaba las cámaras y las cámaras lo adoraban. Daba entrevistas y lo hacía con tanto entusiasmo que querías saber más de él.
El público lo amaba y eso le encantaba, parecía que había nacido para ese trabajo.
-Se te da muy bien el medio - le dijo Ari.
-Siempre fue mi sueño. Supongo que por eso se me da bien.
Sin embargo, él odiaba estar frente a las cámaras. En su vídeo musical salía incómodo, no había manera de ocultarlo.
-Prefiero no salir yo. - le decía a su representante que era una chica de la comunidad, sólo así había aceptado que alguien llevara su carrera.
-¿Y cómo venderemos tu imagen Ari? Nadie te conocerá si te quieres mantener en el anonimato.
No sabía cómo explicar que odiaba verse. Se veía triste, aún tenía esa tristeza consigo, sí, estaba mejor, pero no podía ocultar que tenía una tristeza profunda.
Sin duda le seguía afectando no hablar con sus padres, sobretodo con su madre.
Ya había salido del hogar donde creció, no dependía de ellos económicamente pero aún quería platicar con ellos.
Aún tenía presente la mirada decepcionada de su madre. Nada le afectaba más que eso.
Quería decirle que hacía un esfuerzo descomunal por ella todos los días, que no había tomado una gota de alcohol en ese tiempo. Porque quería que se sintiera orgullosa de él.
Pero no lo hizo, no le habló ese día ni los siguientes.
Se tragó su dolor y siguió adelante.
Tenía ya su primer sencillo oficialmente. Se presentó en un programa de televisión para cantar su canción.
De toda la prensa el vídeo musical y en general del proceso, su momento favorito seguía siendo estar en el estudio grabando.
Entendía que no podía sólo vivir de grabar en el estudio, tenía que estar en constante movimiento para promocionar lo que grababa allí y eso... no me le gustaba, para nada.
Dió resultado después de unos meses tenía más y más presentaciones, tenía un EP que ya había grabado. Las canciones que estaban en él eran las que más reproducciones tenían en su canal de Youtube fueron las que grabó como demos esa vez de la ruptura con Temo, cuando pensó que hizo algo de provecho con todo ese dolor.
Conectaron con la gente, le decían que llegaba su música en el momento que habían terminado su relación en mensajes y comentarios.
Era raro, tenía en ocasiones un teatro lleno pero en la calle nadie lo reconocía. Parecía que sólo lo conocían en el mundo digital.
Aún así lo invitaron a un gran concierto con sólo artistas LGBT.
-Pero no entiendo ¿Por quién estoy aquí?
Llevaba preguntando lo mismo una y otra vez a los organizadores del evento y nadie le daba una respuesta clara.
Su representante Melisa, sólo le dijo que era una gran oportunidad presentarse.
-Debes ir, se reunirán bastantes cantantes más reconocidos que tú, sin ofender. Y eso atraerá gente a tu música, público nuevo.
-Sí lo entiendo pero ¿Cómo conseguiste que me invitaran a ese concierto?
ESTÁS LEYENDO
De noche vienes ; Aristemo
أدب الهواةAri tenía una rutina, comodidad, un hogar, costumbre, certeza acerca de todo. Y Temo se lo había arrebatado.