-Teresa, la causa del accidente fue porque se inició un incendio en la cocina encendida, tu accidentalmente y por descuido dejaste la perilla de cocina encendida-confesó Juan Carlos con tristeza
Los hijos de Don Verduras estaban sin palabras ante tal confesión. Teresa se sintió miserable. Ella, inconscientemente, causó el incendio
-Pe... Pero yo.. yo me... no no yo lo había apagado- decía desconcertada - yo estaba en el baño y de pronto Laura gritó que había fu... fuego y yo salí y... y no, de pronto-cerró los ojos recordando - vi la sala y los pasillos incendiandoese y me desvanecí
-Se que es difícil Teresa, pero te estoy diciendo la verdad. Ese fue el informe que me dieron los bomberos al apagar el incendio. Pero yo te lo oculté porque sabía que te iba a poner mal - explicó don Verduras
-No puede ser-empezó a llorar-yo fui la culpable de que mi hija estuviera en peligro-se sentó mareada-estoy mal, mi hija... mi bebé, lo siento, lo siento, fue sin querer, yo no tuve cuidado-se puso sus manos en la cara-¡lo siento hija! - empezó a llorar desconsoladamente
Los tres nietos presentes fueron abrazar a su abuela
¡No te culpe abuela, fue un accidente! - consoló María
-¡A cualquiera le hubiera pasado eso, abuela! - dijo Miguel
-¡Mamá te diría que estuvieras tranquila contigo misma, abuela!- agregó Laura
Don Verduras se quedó en silencio
Llegó de pronto una enfermera.
-¿Quién pasa primero a ver a la paciente?
-¡Yo, por favor! - miró a la enfermera primero y luego volvió su mirada a los hijos de Refugio- ¿esta bien que vaya primero? ¡Por favor! ¡Necesito verla para poder seguir respirando! - pidió desesperado Don Verduras
Nachito y Mundo se quedaron sorprendidos de lo afectado que estaba Don Verduras, él en verdad amaba a su mamá
-Tranquilo, Juan Carlos, nosotros iremos después de ti, ve con mamá - dijo Nachito con compasión
-¡Gracias muchachos! - dijo sollozando
La enfermera guió a Don Verduras. El tenía la esperanza de que ella estaba mejor, pero cuando la vió, fue peor el sentimiento de verla tan maltratada y vulnerable. Nunca se perdonaría no haber ido tras ella con prioridad.
-La paciente está adentro señor, en un rato volveré para que salga y entren los demás, aproveche su tiempo - informó la enfermera
Al verla, el se quedó estático por un varios segundos. Su amor, su dulce y tierna Refugio yacía en la cama de un hospital, con golpes en su cara y aferrándose a la vida.
-M... Mi amor-empezó a llorar desconsoladamente - mi señora bonita, ¿quien querría hacerte semejante daño?-se fue acercando a la camilla
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