Martes, 19 de noviembre del 2019
Noto que Tristán y mi esposa se miran un par de veces en lo que va de la reunión. Y sentí la sorpresa en su voz cuando lo vio aparecer, y sus ojos se encontraron como si estuvieran conectados, como si desearan más que estrechar sus manos. Los observo y no logro entender desde cuando tienen este tipo de relación, quizás él ayudó a su hermano a ocultar lo que tenía con mi esposa.
Salgo de mis cavilaciones al oír que tienen que firmar unos documentos.
—Los firmará conmigo —afirma Noemy con total tranquilidad.
—Yo no firmé documentos contigo —espeto, aguantándome la cólera.
—Porque te mandé con otra persona —me sonríe con fingida intención.
—Hay algo que me llama la atención. Tristán, tu familia no usa tecnología, ¿por qué compraste las acciones?
—Simple, no trabajamos el área de crear tecnología, pero la utilizamos. Podría servirnos en la editorial.
La familia Scott es de las tantas familias prestigiosas e influyentes de esta región, ellos desde el inicio han trabajado en la editorial y aman la lectura como nadie. Aunque el padre de los Scott dirigía la empresa, su hermano menor se dedicaba a las acciones legales de esta. Él no quería estudiar administración de empresas o literatura inglesa, él quería ser abogado y de él, Dante y Tanza sacaron el amor por lo que hacen.
—Las compré por eso y porque el señor que las vendía es amigo de mi tío y me lo comentó —explica trayéndome devuelta.
—Si no te conviene pueden comprarlas —digo lo que en su momento me ofreció Tanza.
—No se puede —interviene ella—, si las compramos no sería ganancia para ninguno.
—¿Y por qué me lo ofreciste a mí?
—Te quería lejos, era capaz de comprarlas con mi propio dinero con tal de no verte y sigo pensando igual.
Me mantengo callado después de eso, mientras hablan de lo necesario que Tristán debe conocer y saber de la empresa; también inconscientemente miro un par de veces a Dante, quien ni siquiera conversa con mi esposa. Solo ella con Tristán se miran, con bastante disimulo, el instinto me dice que ocultan algo y estoy casi seguro que fue quien ayudaba a su hermano en la relación con mi mujer; por eso se conocen bien.
—Tristán, ¿me acompañas? —se levanta de la silla con una postura seria.
—Vamos. Dante veré lo del papeleo, te aviso si te necesito.
Desaparecen tras la puerta.
—Tu hermana se lleva muy bien con Tristán —expreso mi molestia que es injustificada.
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¿Existe una segunda oportunidad?
Разное«Lo acabas de decir te amaba, esa mujer que hacía eso desapareció el día que se fue de tu casa. Arruinada y destruida, en ese momento nació esta mujer; la que ves ahora». Ella y él, dirían que no estaban para nada destinados a estar juntos si no fue...