Otra Vida ~ [Lukanette +18] - Libro 1

Capítulo 14 - Verdades: Parte 2

POV Marinette 

Nuestro viaje nos llevó a una casa de dos niveles, modesta, pero con todo lo necesario para estar acá cómodamente, había concubinas para ocuparse de nosotras, un cocinero, un ama de llaves, además de todos los guardias que estarían cuidándonos a Kagami, Alya y a mí.

Pasé por la cocina para dejar la horrible tarta en la encimera e irme por unas frutas para olvidarme de aquel sabor. Me encantan los frutos rojos y la decepción que me llevé con aquel postre me puso de malas.

Incluso, hasta me dolía la cabeza por ese viaje, hacía calor y la hinchazón me tiene abrumada. Mis senos me pesan, mi vientre hinchado, dolor de cabeza... Paladar seco, y hasta nauseas.

Me puse a contar los días desde mi último periodo. Se supone, que debería estar en mis días, a partir de hoy.

Estando ya en el segundo piso, percibía unos olores a humedad que me incomodaban aún más, tal vez esta casa tenia mucho tiempo cerrada, y por eso huele así.

Suspiré sintiéndome estresada por tantas cosas a la vez. Tal vez acostándome me sienta mejor.

Pasé un rato así, sintiendo esas ganas de vomitar con cada minuto que pasaba, se sentían unos cólicos en mi estómago que no pude resistir mucho.

Adiviné dónde quedaba el baño de milagro.

Jadeando terminé de expulsar toda la comida de mi estómago, y decidí enjuagarme la boca para limpiar mi amargo paladar, me sentía tan mal, pero seguro pasará pronto con un té de manzanilla.

Dentro de la cocina encontré a una concubina y se alertó cuando vio que tomé una pequeña olla para preparar yo misma mi té.

—Señorita, ¿porqué no le pidió a alguien que le hiciera té?
—Perdón, es que no sé los nombres de nadie acá.
—Mi nombre es Jaqueline, yo le llevaré su té a la habitación.

Antes de salir de la cocina, rápidamente vi un ratón cerca de la torta que había abandonado en la cocina. Olvidé desecharlo...

Me fui hasta la habitación, y en el recorrido me encontré a Alya.

—Tu rostro se ve fatal, ¿te sientes mal?
—Vomité hace unos minutos.
—Mmmm... —Se acercó hacia mi y me observó bien. —Insisto que ya estás encinta. Ve a la cama hasta que te sientas mejor.

Alya me acompaño hasta la habitación y allí me tendí en la cama en la espera de mi té. Jaqueline volvió y yo tomé la taza teniendo el mismo malestar y la necesidad de volver a vomitar a pesar de que no tenía nada en el estómago.

—Cr-creo que... Otra v-vez... —llevé mi mano hacia la boca para evitar hacer un desastre en la habitación.
—Con cuidado, no te vayas a caer. —Alya se levantó de la cama para ir conmigo hacia el baño y vigilarme por si algo sale mal.

Sintiéndome horrible decidí concluir con mi día y simplemente bañarme y tirarme en la cama.

Seguro tomando más té me sentiré mejor, tal vez esa torta que me regaló la princesa Lila tenía algo descompuesto y me ha caído mal.

Tal vez por eso sabía a rayo.

...

Al día siguiente desperté mucho antes de que los rayos solares salieran. Tenía tanto frío como si tuviese fiebre y aún seguía con el malestar en mi estómago.

Aún seguía en cama, me sentía mareada y aturdida por no comer nada desde ayer al mediodía, con mucho pesar me levanté de la cama para ver mi rostro en el espejo, y me espanté al ver mis ojeras completamente moradas y mis mejillas rojas. Es como si hubiese pasado la peor noche de mi vida, pero durmiendo.