TW: drogación.
Ella recordaba todos los días a Big John, el padre de John B. Delilah lo conocía desde que tenía memoria, él siempre estuvo allí junto a Sidney.
Recordaba cuando él desapareció también, fue un impacto en su vida, un shock, pero tenía que ser fuerte porque su mejor amigo estaba destruido.
Delilah recordaba que cuando se fue, ella no pudo hacer nada por su amigo. Nada. Ella estaba con las cadenas que le puso su padre, no podía acercarse a John B sin lastimarse las muñecas, o peor, lastimar las de él.
Se sentía tan estúpida cuando se trataba de salvar a sus amigos con su cuerpo. Lo haría, sin dudarlo, pero le costaba. Le costaba entregarlo.
No podía separarse de ella, eso era peor que las demás corten su piel. Mucho peor.
Aún así, Delilah estaba volviendo hacia su casa siendo acompañada por JJ. Claramente ella no lo invito pero esté se colo y no le importo los reproches de la rubia.
JJ sabía muy bien lo que es ser maltratado por tu propio padre y no tener a nadie quien te defienda, ni poder defenderte.
No negaba que odiaba dejar a la rubia sóla con Alan, pero claramente tampoco quería causarle problemas. Él sabía perfectamente que si la llegará a ver con un Pogue, es capaz de matar a su propia hija.
Por esa razón Delilah nunca invitaba a su casa a los Pogue. Kiara era la única que en vez en cuando iba, pero la Mendes hacía todo lo posible para que Alan no vea a unos de sus amigos, ella sabía lo que él era capaz.
ーLo siento. ーdijo JJ. La rubia bufo.
ーYa me lo dijiste como veinte veces, JJ.
ー¿Y?
ーY que ya te respondí veinte veces que estaba bien.
ーLilah.ーllamó.
ー¿Hmn?
ー¿Y sí mejor te quedas en la casa de John B?ーsugirió.ーMe quedaré yo también.
ーNo, J. No puedo huir siempre.
ーTu padre no me agrada.ーalegó.
ーMira, otra cosa que tenemos en común.ーrespondió.
Ya habían llegado, Delilah sintió un escalofrío al ver su "hogar". Aquélla casa que parecía tan antigua, pero sin perder el toque moderno. Tan grande, muy grande.
JJ miro a la rubia al ver que se quedó quieta, como si sus pensamientos la estuvieran comiendo la cabeza. No quería entrar, no quería irse del lado del rubio.
En un punto ellos dos ahí eran iguales; ninguno quería ir a casa, siempre trataban de buscar excusas para no ir y quedarse en el lugar que estaban, ya que simplemente sus hogares no se sentía estar como en casa.
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𝐃𝐄𝐒𝐓𝐑𝐔𝐂𝐓𝐈𝐎𝐍 - outer banks¹
RandomCORRIGIENDO 𝐃𝐄𝐒𝐓𝐑𝐔𝐂𝐓𝐈𝐎𝐍 |"Estamos intentando aguantar cuándo ambos sabemos cómo terminará esta historia". 𝐒𝐎𝐋𝐄𝐃𝐀𝐃, lo que ella a sentido desde que era pequeña. Pidiendo todos los días si algún día iba a dejar de sentir ese sentim...