•Especial•

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"On the rise and fall"

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Daeyon dejó que los chicos se bajaran del auto, viendo al otro lado de la calle a Rian y Renjun. El atardecer estaba en su punto, es en lo que Haechan se fijó al mirar el cielo con una sonrisa. Iba de azul celeste con blanco, créditos de su hermana que lo vistió. Jeno se veía mejor desde que llegó con Mark, era como si este hubiera encontrado una mágica receta para sacar sonrisas; el encantador de Lee's. De una forma u otra los hermanos estaban felices de ver que todo marcha viento en popa. El plan era disfrutar el nuevo parque de atracciones que abrieron a unas cuadras de casa y hoy sería el día. Estaban preparados para comprar lo que quisieran, vestidos casi tan urbano como los skaters que patinan allí, frescos y con las mentes despejadas. La promesa hecha antes de salir era disfrutar el presente sin remordimientos, que el cumpleaños terminara siendo memorable.

Ren se escabulló en el grupo mientras todos hablaban sobre lo que querían hacer comprando las entradas. Era inmensa la parcela, habían cientos de personas ahí, calculó Haechan desde su posición.

-Chicos, sugiero que no nos separemos demasiado o terminaremos perdidos.-Dijo el moreno, tomando su brazalete como el resto. Todos están de acuerdo.

-Entonces, eso nos lleva a probar los mismos juegos. Hay tantas atracciones, ¿Por dónde vamos a empezar?-Consulta Ning, arreglando su cabello.

-¡Las que elija el cumpleañero!-Exclamó Yujin sonriente. El grupo voto a favor, avergonzando a Jeno.

-No tengo que elegirlas todas yo, puede que la primera y el resto ustedes.-Comenta y terminan por tomarle la palabra para ser equitativos.

-¿Y bien?-Preguntó Rian, impaciente. Quería subirse a todos los juegos, hace tantos años no salía a divertirse así.

Jeno enrojeció. Si bien no tenía problema en que sus hermanos fueran anfitriones y que se encargaran de todo, ellos no sabían lo que pasó entre Rian y él. Era la primera vez que convivían desde ése día, al final no pudo enviarle el mensaje de disculpa ni llamarla. Verla le era difícil, cuestionandose si estaría molesta con él, por qué aceptaría, si la hizo sentir mal esa noche... Hay muchas incógnitas que trata de ignorar para no romper la promesa hecha antes de salir. Sin darse cuenta estaba sujetando con fuerza la manga del jersey de Mark.

-La montaña rusa.

El grupo se emocionó emprendiendo camino a la atracción de gran altura. La fila no era tan larga como creyeron, en cinco minutos estaban tomando sus asientos individuales en una fila. La temática era de hielo y las decoraciones eran tonalidades frías, que se perdían en vueltas, túneles y topes de la montaña. Cuando inició el recorrido todos estaban a la expectativa hasta que el viaje empezó a tomar altura y las caídas eran increíbles. El grupo gritaba de adrenalina y a la mitad vinieron los giros de cabeza donde Jeno sintió que moriría de lo rápido que iban. Ni siquiera miró por encima de su hombro por temor a perderse de alguna sorpresa. Al bajar la velocidad y detenerse en la salida, bajaron como un par de barajitas que se llevaría el viento, eso sí, sin poder dejar de reírse de sus reacciones.

Luego el debate del siglo encabezado por Rian y Mark sobre qué seguía, hasta que hubo una conclusión y eligieron el barco. Las vistas eran altas y los balanceos de la tripulación dejaban a unos sobre otros, aterrados. Renjun sintió que le caería encima a alguien si solo se desabrochaba el cinturón. Pero fue el comienzo porque todo se puso mejor a medida que se subieron a más atracciones.

-¡Tomen, sus helados!-Anunció Yujin, pasando varios conos. Haechan le ayudó en la tarea.

Cuando no tenían el peligro de devolver lo que comieran, se sentaron en varias bancas al comprar helados. El moreno entregó el de Injun, observando a éste volverse un ocho. Casi termina el suyo y el chino sigue batallando para no ensuciarse las manos porque se ha tardado tanto que ha comenzado a derretirse. En su poca paciencia el castaño niega, acabando su helado y sosteniendo la mano de Renjun que sujeta su cono, para deslizar su lengua y recoger todo el helado que se se chorrea a los lados. El mayor está escandalizado pero más ruborizado de lo normal, presenciando cómo con una facilidad asombrosa resuelve su problema. No sabe si agradecerle.

Love²/ NaHyuck- RenHyuckDonde viven las historias. Descúbrelo ahora