25. Crocodile rock

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- No.

Lisa suspira y ríe divertida mientras observa a Kookie y Hoseok negar con la cabeza.

- ¿Tú estás loca o qué demonios te pasa? - dice Hoseok.

- No estoy loca y sí, vamos a hacerlo.

- Lisa... - trata Jungkook pero es inútil, la castaña ya camina hacia el interior del ayuntamiento de Londres con su maletín en una mano.

- ¿No vas a hacer nada? - le dice Hoseok pero el pelinegro se encoge de hombros y niega con la cabeza.

- Es inútil, ¿no la ves?

- ¿Vas a dejar que demuela una obra de arte para hacer una casa de campo? - Kookie ríe divertido.

- Siempre ha pensado en esa casa. Es el sueño de Rosé.

- Sí pero... demoler la mansión Manobal es una locura. Aunque no fuera su estilo... es una auténtica obra de arte. 

- Procura que no trabaje demasiado, ¿de acuerdo? Aún ha pasado poco tiempo desde la intervención.

- De acuerdo, trataré.

- ¡Hey, vosotros dos! ¡Vamos! - dice la castaña volviendo a salir.

- ¡Sí señora! - adoptan una pose militar y entran en el edificio.

Los tres caminan por el recibidor y Jungkook puede ver cómo las miradas de algunos trabajadores se posan en la arquitecta que levanta la mano y saluda con una media sonrisa.

Lisa es una máster de los negocios y es respetada por todo el mundo. Pero Kookie nunca ha tenido la oportunidad de verla en acción. Así que esta imagen de badass de la arquitectura es, sin duda, muy semejante a su imagen de chica mala en el instituto y eso, aunque no lo dirá muy en alto, le hace recordar a la antigua Lisa.

Hoseok y la castaña presentan los bocetos en los que Lisa no ha podido parar de trabajar mientras Rosé y los niños dormían la noche anterior. Tiene unas enormes ojeras que escode tras los cristales de sus gafas de sol, que no se molesta en retirar ni siquiera en presencia de esos altos cargos, pero a ellos no parece molestarles, porque simplemente estrechan su mano y sonríen cuando le entregan el permiso para mandar a la mierda aquella enorme casa que podría catalogarse como patrimonio de la humanidad, en palabras de Hoseok.

Una media sonrisa y otro apretón de manos le basta a la castaña para salir de allí con el documento metido en una carpeta de color amarillo y cuando sale del ayuntamiento, la honorable y respetada Lisa pega un salto y grita como la tonta cría que siempre fue. Así que Kookie y Hoseok sonríen divertidos cuando ella salta alrededor de ellos con una enorme sonrisa en el rostro.

- De acuerdo, ya basta - la detiene Kookie. - Conseguirás que tu única neurona viva termine muriendo - ríe divertido cuando la castaña hace un puchero.

- Estoy feliz, Kookie, ¿sabes lo que esto significa? - él niega aunque sabe de sobra lo que va a decir. - Podré hacer feliz a Rosé y a los niños, ahora voy a darles aquello que les prometí.

Lisa vuelve a reír y se mete en el coche rápidamente mientras Jungkook rueda los ojos y Hoseok bufa, ambos entrando también en el coche. Una arquitecta feliz enciende la radio y reproduce a todo volumen Livin' On a Prayer de Bon Jovi haciendo reír a sus amigos que pronto se unen cantando a todo pulmón mientras conducen por Londres en dirección a la empresa de Lisa.

Cuatro horas más tarde, Lisa y Hoseok ya han armado la maqueta de la nueva casa Manobal Park y comen una hamburguesa que ha traído Kookie quien ahora observa la maqueta al detalle ante la mirada divertida de Lisa.

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