Reporte de Misión (Aizawa Shouta x T/N) +21

Cap 14: Reencuentro Inoportuno

Bo horneaba otra cantidad de bases de tarta para las tartaletas de fresas que más tarde T/N debería entregar. Por otro lado, Camaleón estaba acomodando la casa, ya había limpiado el suelo y lavado las ventanas.

Tenían una rutina que a ambas les resultaba agradable. Se levantaban a las 5am, la más joven salía a correr unos 20 minutos, luego volvía a casa y estiraba los músculos, la adulta la esperaba con un instrumento largo de metal con el que compartía nombre. Ya habían pasado varias semanas desde que vivían juntas, a diario Bo le enseñaba nuevos movimientos y la entrenaba sin piedad, le ayudaba a potenciar su don tanto como podía, pero aún debía permanecer desnuda para camuflarse mientras se movía, para su fortuna, ahora podía cambiar su camuflaje conforme se movía y podía copiar algo que tocara con la espalda, lo que explicaba el que se volviera "invisible" cuando se volvía plana y se adhería a las superficies. Las texturas habían sido más dífiles para ella, pero podía imitar las ranuras de la madera y la grava. También había estado practicando su estado "calcomanía", al que llamaba así en honor al don de su padre, intentaba quedarse del grosor de un papel sin adherirse para que Bo la doblara y la escondiera, pero en ese estado tampoco podía moverse. Entrenaban sin derecho a rendirse, la vieja se detenía cuando veía que la joven no podía continuar ya que su cuerpo no le respondía. A pesar de evitar dejar marcas, era casi inevitable, las cotillas y el rostro de la menor siempre tenían un ligero rasguño o moretón a consecuencia de su entrenamiento.

Luego de los arduos entrenamientos, ambas descansaban y Bo, luego de ir al parque a alimentar aves, la estaba enseñando a meditar para sanar todo el dolor de las cosas que había sufrido y hecho; el estado de meditación la había ayudado a muchas cosas, podía contarle a Bo todo lo que sentía y esta la escuchaba sin juzgar, juntas preparaban los alimentos del día y la menor le suplicó a su acompañante que le encontrara un trabajo.

- Bueno... creo que podrías hacer las entregas de los pedidos de postres que a diario me piden. – Bo tenía años dedicándose a la repostería, su don le ayudaba, a pesar de que nunca supo cual era exactamente el funcionamiento de su don, sabía que podía producir postres y dulces, pero no sus ingredientes por separados, además eso le quitaba una enorme cantidad de energía, a pesar de que sus hijos le pagaban los gastos públicos y eran quienes se encargaban de llevarle personalmente sus alimentos, ella trabajaba para mantener sus vicios, era adepta al sake y al tabaco de pipa – Aunque haya comida suficiente para ambas, creo que así podrías ganar tu propio dinero para comprarte tus cosas.

- ¿Mis cosas? – T/N no había tenido algo tal como SUS cosas, eran cosas que robaba, compartía o le prestaban - ¿Qué podría necesitar yo?

- No lo sé... tal vez productos para ese cabello tan bonito, pero tan desarreglado que tienes, zapatos, vestidos, collares, no lo sé. Estás en la edad de la vanidad.

Tal cual como la abuela se lo había propuesto, T/N cumplió con sus obligaciones, a diario muchas madres ordenaban cualquier cantidad de postres precocidos para la semana y así tenerlos en caso de querer ponerles bento a sus hijos. Siempre tenía bastante por entregar, además de que, el tiempo que tardaba usando el transporte público lo invertía en leer todos los libros que Bo le pedía. La meta era leer uno en un periodo de quince días, pero las dificultades que tenía para comprender las oraciones complejas englobadas en un párrafo eran demasiado para ella. Solo sabía las operaciones matemáticas y leer para guiarse, no había tenido la necesidad de leer para interpretar. Recordó su niñez cuando perdía la adherencia al quedarse dormida y llegó por primera vez a la universidad, había sido tan sencillo escuchar y entender las sofisticadas palabras del hombre regordete que explicaba una clase maravillosa que ahora apenas recuerda de que iba.

- Hoy vendrá mi hijo a verme – Bo hablaba mientras llenaba el bolso que T/N usaba para llevar los paquetes -, creo que pasará aquí la noche. ¿Crees poder esconderte todo ese tiempo?