Capítulo 1

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El hombre llegó a casa temprano, y se quedó mirando a su hijo jugando en el césped con su último muñeco. Estaba hablando solo y riendo mientras disfrutaba sin más de su mundo de fantasía. El hombre sonrió con cariño; un poco más alejado estaba su hijo mayor, que miraba con seriedad a su hermano. El hombre vio como tras mirarlo con rabia, sin motivo alguno, o tal vez simplemente porque la veía feliz, iba hacia él y le quitaba el muñeco para lanzarlo al pequeño lago que había en el jardín. El pequeño corrió hacia el muñeco para rescatarlo, el padre preocupado salió de su escondite y llegó al niño antes de que cayera al lago.

-¡JAKEY!, no puedes coger el muñeco-

-Es mi muñeco- el niño seguía moviéndose para poder llegar a donde se encontraba el muñeco.

-Se ha hundido, calabaza- El hombre necesita algo para alcanzarlo

-Toma papá este palo para que puedas agarrarlo, al pobre Jake se le ha caído mientras jugaba-

El padre vio como Jake se tensaba entre sus brazos y como miraba a su hermano. Esperó que la delatara, que dijera que había sido su hermano quien había tirado el muñeco, desde que su hijo, por una vez, dejara de callar los agravios de su hermano mayor y pensara en su felicidad. Pero Jake solo asintió y miró a su hermano sonriente, aceptando sin más lo que este decía.

-Gracias por traer el palo- dijo un Jake temeroso

Lo cogió con sus pequeñas manos y con la ayuda de su padre sacaron el muñeco del lago, cogió el muñeco empapado y entró a la casa para limpiarlo.

-Lo he visto todo-

-Él...- Heeseung miró a su padre, desafiante.

-Ojalá un día Jakey se canse de defenderte. Estoy cansado que siempre se mantenga al margen en lo referente a ti-

-Lo siento papá- Heeseung sonrió con cariño a su padre, trató de parecer perfecto- Ha sido sin querer... no sé que me ha pasado...- mientras hablaba trataba de llorar para darle más dramatismo- No lo volveré a hacer.

Pero el padre sabía que lo hará una y otra vez, siempre es así.

-Solo deseo que un día sea al revés, y que te vea a ti hacer algo por tu hermano- el padre cansado, se pasa la mano por el pelo- entra a la casa, hablaremos más tarde de tu castigo.

Heeseung asintió y con rabia en los ojos entró a la casa. El hombre se quedó observando a su hijo mayor, con la vaga esperanza de que fuera a pedir perdón a su hermanito, pero sabía que no lo haría. Heeseung tenía la fea costumbre de tratar de demostrarle siempre, que era mejor que Jake y para hacerlo casi siempre intentaba destruirlo.

No sabía cuánto más aguantaría Jake, pero esperaba que un día dejara de callar por no hacerle daño a su hermano, y le plantara cara.

Complete mess | Sungjake |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora