CAPÍTULO 33

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Cuando llego a casa encuentro a Jake dormido en el sillón, con el cuaderno de bocetos en el suelo y las manos llenas de manchas de pintura. Sonrío y me quedo un rato observándolo, simplemente por el placer de mirarlo.

Pasado un tiempo decido darme una ducha tras mirar a Yeji, que también descansa en su cunita.

Al salir de la ducha, que está en mi cuarto, me pongo una toalla en la cintura para vestirme en mi habitación. Abro la puerta del baño y me encuentro con Jake sentado sobre la cama, mirándome con sus intensos y grandes ojos verdes. Me sonríe y noto como sus ojos bajan por mi cuerpo de manera descarada.

-¿Sabes una cosa?–Me sorprende su pregunta y pienso enseguida que se refiere a algo que ha hecho Yeji.

-No, ¿Qué cosa?-

-Que te quiero–Me dice sin más. Siento como su "te quiero" dicho de esa forma tan casual y normal, se cuela en mí y no puedo evitar acercarme a él y besarlo. Jake sigue mis besos y pronto nos enredamos en un mar de pasión. Nunca tengo suficiente de él, soy tan feliz a su lado, que cuanto más feliz me siento, más miedo me da que esto solo sea un paréntesis en mi vida, y que pronto cada uno vuelva a su sitio, y lo pierda. No sé cómo podría sin él.

Narra Jake

Observo a Hyunjin mezclar patatas de queso con helado, Sunoo al ver mi cara de asombro se ríe.

-Es lo normal en él–Me dice Sunoo haciendo lo mismo.

-Yo ya tengo el estómago demasiado revuelto por sí solo...—Comenta Jungwon, dándose cuenta de lo que acaba de confesar con eso.

Hyunjin grita, Sunoo sonríe y Jungwon al final nos cuenta a todos la verdad.

-Estoy en estado, pero tengo miedo de decirlo y decírselo a todo el mundo por miedo a perderlo. Tengo tantas ganas de tener este bebé que me da miedo que suceda algo y...

-No pienses eso–Le dice Hyunjin, feliz–Todo saldrá bien. ¡¡Tenemos que celebrarlo!! Creo que no he traído suficientes dulces.

Sale de la habitación y miro los dulces que hay sobre la mesa auxiliar de su cuarto, toda llena de bollos, helado y patatas de todos los tipos.

-¿No es suficiente?–Pregunto alarmado, Sunoo sonríe y me dice que me deje llevar–No sé si mi estómago soportará esta comida.

Cuando llega Hyunjin con chocolates nos sentamos alrededor de la mesa y miramos a Jungwon mientras nos cuenta cómo se encuentra. Hyunjin pone su mano sobre el, poco abultado, estómago de Jungwon.

-Que raro es pensar que aquí está naciendo una vida. Es maravilloso-

-Lo es–Jungwon lo dice con los ojos llenos de lágrimas, no ha llorado mientras nos relataba todo, pero está a punto.

-Podemos poner una peli de las de llorar mucho y así te hacemos compañía llorando-

Jungwon se ríe y luego no puede evitar llorar.

-Dichosas hormonas–Dice cogiendo un trozo de chocolate.

-¿Y Jay cómo se ha tomado todo esto? Antes no estaba muy convencido de tener niños–Preguntó Sunoo

-Cuando se lo dije vi cómo sus ojos se humedecían, claro que no lloró–Dice sonriente–Pero le hizo mucha ilusión. Desde entonces, me llama a todas horas desde el trabajo para ver cómo sigo y si necesito algo. Se asustó mucho cuando casi perdí al bebé y ahora me tiene entre algodones.

-Me alegro por ustedes–Le dice Hyunjin–Estamos haciéndonos mayores. ¿No les da un poco de miedo-

-Asusta un poco ver cómo pasamos de ser hijos a ser padres de nuestros hijos–Reconoce Jungwon–Muchas veces me pregunto si seré capaz de darle el amor que necesita, o si él me considerará un buen padre...también pienso mucho en su bienestar. No quiero que nada le suceda...

Jungwon se seca una lágrima y Hyunjin acaba poniendo una peli con la que acabamos los cuatro llorando, como ya se presuponía. Cada uno con sus problemas, todos tan distintos, pero juntos haciéndonos compañía mutuamente. Salvo Jungwon, nunca he sentido esta conexión con más chicos de mi edad y me gusta.

Pienso en estos días que he estado con Sunghoon, me parece increíble que mañana haga una semana desde que empezamos nuestra...no sé cómo denominarlo, hasta que Sunghoon no termine definitivamente con Heeseung no me siento preparado para decir que somos algo más que amigos especiales. Es como si la sombra de Heeseung empañara mi felicidad. No he podido disfrutar todo lo que quisiera de esta felicidad, pues cuando estaba solo con mis pensamientos me acordaba de mi hermano.

-Jake–Me llama Jungwon–¿Qué tal va todo con Sunghoon?-

-Todo lo bien que puede ir cuando es aún el novio de tu hermano-

Cuando lo digo, noto como si una pesada espada me atravesara el corazón. Soy un traidor. ¿Y si mi hermano lo quiere? Me levanto inquieto, y noto como los demás lo hacen.

-Te puedo asegurar que Heeseung no lo quiere, si es eso lo que te preocupa.

-Nosotros también pensamos lo mismo–Dice Hyunjin por Sunoo y él.

-Ya pero...Tengo miedo. No quiero perderlos–Reconozco.

Me abrazan dándome fuerza, e intento por todos lo medios de no desmoronarme pero es muy difícil ante ellos. Al final se nos hacen tarde hablando de nuestras cosas. Nos quedamos dormidos de puro agotamiento sobre las mantas, en el suelo. Mi último pensamiento es para Sunghoon, pero para mi desgracia él aparece al lado de Heeseung. ¿Es acaso una señal?.

Complete mess | Sungjake |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora