CAPÍTULO 7

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Narra Jake

Sunghoon se va, y una vez más como en estos últimos tres días,  me pregunto qué ha cambiado. Está raro, serio, y él no es así. No lo conozco lo suficiente como para saber cómo ha sido siempre, pero algo me dice que no todo va bien. Juego con la pequeña y le doy la merienda hasta que suena el timbre. Al abrir la puerta veo tras ella a dos jóvenes, uno tiene unos ojos risueños y mieles, el pelo rosa cae en un fleco delante sus ojos, y el otro joven tiene unos preciosos y poco comunes ojos violetas. El pelo lo tiene de un precioso rubio como el trigo que le cae por los hombros.

-Tú debes de ser Jake. Jeongin y Niki nos han hablado de ti y bueno, Jungwon también. Que casualidad que sean amigos- comenta el de ojos mieles- Me llamo Sunoo y este es Hyunjin. ¿Podemos pasar?-

Abro la puerta del todo, Sunghoon ya me había hablado de ellos y me dijo que seguramente vendrían algún día.

-¿Qué tal está Yeji?-

-Bien, acaba de merendar-

Me siento en el sofá y los observo como cargan a la pequeña. No digo nada, y como siempre me pasa cuando estoy rodeada de gente que no conozco, tiendo a retraerme.

-La estás cuidando muy bien, Sunghoon dice que es una suerte haberte contratado- miro a Hyunjin asombrado porque Sunghoon haya dicho eso de mí y sonrío.

-Y yo a ellos...lo que quiero decir, es que me gano un buen dinero...

Me levanto nervioso, siempre hablo de más, voy a la cocina y empiezo a recoger todo.

-Nos ha dicho Sunghoon que pintas muy bien-

-No ha visto mis pinturas...- comento sin mirar a Hyunjin

-¿No vas dejando por la casa bocetos?-

Me sonrojo y me muerdo el labio. ¿Me habré dejado alguno de Sunghoon por la casa? No, yo creo que los he guardado todos...

-Sí, a veces pinto en cualquier sitio. Lo hago sin darme cuenta-

Sunoo se pone a mi lado y me ayuda a recoger la cocina.

-No hace falta...

-No es molestia. Estudiabas con Jungwon cuando eras pequeño. Nos lo dijo la otra noche en nuestra noche de pijamas, dulces y películas románticas-

-Sí, íbamos al mismo colegio, pero su padre no...

-Su padre cuando empezaron a crecer lo separo de ti, por que decía que eras una mala influencia-

-Sí-

Me extraña que Jungwon haya contado ese momento de mi vida. Pero si lo ha dicho es porque confía en ellos, Jungwon es de fiar. Recuerdo como su padre le dijo, delante de mí, a Jungwon que nunca más podría jugar conmigo, que yo no era una buena influencia para el hijo de un duque, que mi mente soñadora solo le haría daño. No tenía más de doce años, pero me sentí un bicho raro. ¿Acaso no es normal tener sueños? Jungwon era mi único amigo, e igual que Youngeun, él me comprendía. Siempre he sido muy tímido con el resto de compañeros, y cuando él dejó de venir a mi colegio, yo me encerré más en mí misma. Siempre con el mismo miedo de parecer tonto.

Aparto de mi cabeza esos pensamientos y sigo recogiendo.

-No debía de ser bueno para él-

-Entonces tú también perteneces a su círculo social-

Lo miro.

-Sí, mi padre es un marqués. Pero no encajo en ese mundo, nunca lo he hecho-

-¿Por qué?-

Complete mess | Sungjake |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora