OJITOS MIEL

ANSIEDADES COMPARTIDAS

Edición.
Material nuevo.

Se habían cumplido dos días desde el accidente de Minnie y justo también que entró a su baby Space. Las medicinas e inyecciones habían terminado tratamiento pero Minnie aún debía ser revisado por lo que justo ese sábado lo aprovecharían para todos descansar e ir juntos a la clínica.

La cita había sido apartada desde que el doctor de la familia les dió el número del médico especialista en Littles altamente recomendado.

Cómo el día estaba siendo bastante húmedo y caluroso, todos se vistieron con sus mejores galas casuales veraniegas sin dejar el buen gusto de lado. Namjoon fue el encargado de la rutina mañanera de su nene, justo había decidido ponerle un conjunto olivo de shorts con elastico y una camiseta lisa de hombros caídos.

-¿Este o este?- en cada mano Nam sostenía un zapato diferente, en su derecha una sandalia y en su izquierda un calzado ligero sin agujetas.

Minnie botado de espaldas al colchón y chupando su mano, vió los calzados, no supo que le decía pero simplemente tomó el zapato blanco para llevarlo a la boca. De hecho sabía muy bien, algo raro pero bien.

-No no, eso no es para comer -pronto su comida se le fue arrebatada, iba a protestar pero el chupón fue más rápido e impidió sus quejas-. Creo que estos son mejor ¿verdad?

El calzado ligero que llevaba un poco de babas en la punta se colocó en sus pies de manera perfecta. Namjoon observó su obra de arte, era como un mini Nam, solamente le faltaba algo.

-Espera un momento- le pidió, realmente Minnie lo estaba ignorando- no te vayas a mover por favor.

Y sin más salió disparado a su amplió closet, de esa habitación llena de ropas, zapatos y accesorios los sombreros formaban una parte orgullosa en una esquina, allí estaba el viejo confiable, su sombrero de gamusa pueblerino que había comprado en uno de sus viajes a Montana.

Regresó a dónde había dejado a su bebé y afortunadamente este seguía vivo e intacto. Lo sentó acomodando su cabestrillo y la playera, luego su cabello y al final colocando algo en su cabeza.

Minnie quiso saber que era, de pronto sentía peso arriba, elevó su mano tentando algo suave pero rígido.

-Tete amh.

-Perfecto, ahora sí que está todo listo.

Jiminnie seguía ignorando la alegría de papá orgulloso de su adulto, quería ver esa cosa en su cabeza.
Cuando ya estaba por obtenerlo, Namu lo detuvo, sus cejitas se fruncieron en una mala mirada pero volvió a intentarlo y fallar por la misma razón.

-¡Tete AMH!

Si, eso era una advertencia sino quería un berrinche de locos justo ahora. Gracias a Jin que apareció y distrajo a su marido, Minnie consiguió llegar al sombrero y tratar de quitárselo.

-Es hora de irse- le avisó entrando a su habitación.

-Estamos listos, mira -Nam se se hizo a un lado para que Jin pudiera apreciar su linda creación, en Namjoon no cabía una sonrisa más grande y genuina que la que tenía justo ahora-. Es hermoso, como su padre Namjoon.

Jin observo detrás de su marido, ahí en la cama había un bebé sentadito con el sombrero a mitad de su cara, Minnie trataba de quitárselo pero de alguna manera los cordones se atoraron junto a todo. ¡No veía nada y estaba desesperado!

-Parece que alguien necesita ayuda amor.

-¿Mmm?

Y Namjoon volteó hacía Minnie. ¿Cómo había sucedido eso en solo diez segundos?