OJITOS MIEL

COMERCIAL

Las vacaciones de veranos eran las semanas más esperadas para todo mundo. Sandías, bebidas frías, albercas, paseos y flojera a su esplendor.

Perfecto.

Perfecto si afuera no estuvieran a casi cuarenta grados. ¡¿Es que a caso el sol se estaba callendo en la tierra?!

No valía la pena exclamar "¡Chispas!", porque cuando iba por la mitad de la palabra, esta ya estaba derretida.

-Jiminnie, mira lo que a traído papá.

La verdad que para este punto, Minnie no tenia las fuerzas suficientes para alzar ni la cabeza, él quería permanecer en el frío y fresco piso de la sala y no despegarse de ahí.

Jin se acercó con paletas heladas en la mano, al igual que todos estaba sufriendo los cambios climáticos que lo dejaban pegajoso.

Desde el piso, Jimin visualizó el conjunto oliva de Jin, se veía fresco pero no suficiente, una playera suelta y unos shorts holgados.

-No traes calzones o son negros- si, desde su perspectiva podía ver por las aberturas de las piernas.

-¡Claro que traigo! Son cafés muy oscuros.

Jimin estaba divertido entre su moribundo ser. Volvió a cerrar los ojos, sintiendo como Jinnie se sentaba a un lado.

-Ten flojo- le movió el hombro ganándose un gruñido cansado-. No me gruñas que no soy Namjoon- Jimin sonrió-. ¿Cuál quieres? Plátano o fresa.

-Fresa.

Esto era lo que necesitaba su sofocado cuerpo, una helada, deliciosa y magnífica paleta de hielo. Aunque claro, eso no significaba que las energías regresarían por lo que se tomó la libertad de apenas mover la mano y comerla mientras descansaba en las baldosas.

Era como tocar el cielo, incluso dentro de casa con el clima encendido podía sentirse como un huevo friendose sobre una gran sartén... Ok, tal vez estaba exagerando un poco mucho y realmente no hacía tanto calor en casa, sin embargo con solo mirar los intensos rayos atravesar la ventana ya se sentía cansado.

Si bien no estaba dentro de su little space, consideraba oportuno usar pañales. ¿Por qué? Pues tenía mucha flojera como para pararse a ir al baño, así que allí estaba, botado tal cual una estrella de mar, con los cabellos esparcidos por el piso, tan solo con una playera enorme de esas que le robaba a su papi Honie y el pañal azulito que le reconfortaba el trasero escondido bajo la ropa.

-¿Dónde están tus calcetas?

-Las aventé por algún lugar- lamió la paleta.

Las cejas de Jin se fruncieron, esa no era una respuesta que quisiera oír.

-Te puedes enfermar niño.

-Papá Yoonie me consentirá si eso pasa.

¡Rayos! Habían criado un monstruo... Que dice verdades por cierto.

-Jin, ¿puedes leerme?

Luego de su momento de descaro, Jimin se volteó apenas un poco para manipular a su adulto con esos ojos de ciervillo y el puchero apenas sobresaliente. Digamos que Park había aprendido muchas cosas en estos meses.

Y efectivamente, SeokJin cayó en sus redes chantajistas.

-¿Qué te leo?- seguido mordió la paleta, estaban muy buenas.

Jimin se ladeó haciendo su mayor esfuerzo para tomar el iPad a su izquierda y entregársela a su adulto, todo esto sin levantarse claro está.

Hace una hora estaba sumergido en la lectura de una nueva historia, comprendía que no era la mejor de los tiempos pero era decente y llevadera para un momentito de distracción, además que toda tierna, le recordaba a sus papis de cierta manera.

Jin comenzó a leer el décimo capitulo, luego el onceavo, el siguiente y al final de unos minutos, llegaron al final de la historia que en sí, no era el final.

-Que bonito libro- Jiminnie canturreó ya con las manos libres-. Papá, ¿por qué no podemos convertirnos en lobos? Sería genial.

-Si, tú serías nuestro lobito.

Hizo cosquillas en el cuello, amaba ver esa sonrisa sincera que escondía sus ojitos miel.

-Nunca había leído esta cosa- Jin volvió a leer superficialmente la pantalla-, ni siquiera sabía que existían estás aplicaciones.

-Es porque eres un viejito.

-Viejito tus abuelos.

Indignación.

Risas.

-Es de mis escritoras favoritas, se llama QuitaraChim- explicó con nitidez, ahora se encontraba boca abajo con las manos en la barbilla-. Cuándo comencé a leerla me gustó y me cayó muy bien, es algo divertida... Creo. El caso es que esta es su actual historia que anda publicando.

-No está completa

-Es que la actualiza cada que quiere- se alzó de hombros- pero la soportó porque me gusta.

-¿La escritora?

-Las historia papá- rodó los ojos, Jin sonrió.

-¿Y como se llama?

-¿La escritora?

-No, la historia- ahora fue turno de que Jin rodará los ojos y Jimin sonriera.

-Ah, BESOS DE LIMÓN Y MIEL. Puedes leerla con Hoseok, a él le va a encantar o mejor no, no, la va a detestar, con eso de que es escritor va a hallar mil errores- rió-. Búscala, está en su perfil y es bastante tierna y dulce, llena de niñitos, amor, daddy issues para regalar y miles de vibes cottagecore.

-Quitando el hecho tu juvenil vocabulario, la agregaré a mi lista de cosas importantes.

-¡Genial! No te arrepentirás... Y ustedes Demis, ¿qué esperan para hacer lo mismo que papi Jinnie? Vayan al perfil de nuestra Diosa Quitara y busquen Besos de limón y miel. ¡Tiene mucho daddy issues y soft de a montón! Si lo hacen, les mando besitos.

-Jimin.

-¿Mmg?

-¿A quién le hablas como infomercial de media noche que no vende nada?

Nuevamente, Park Jimin estaba haciendo de las suyas.

Para los que no entendieron, si, esto es un comercial para mi historia que publiqué ya hace unos días y no, no es abdl, pero tiene muchos brillitos y algodón por doquier, también algo de chilito para darle sabor al asunto.

Hagale caso a Jiminnie ¡y leala!

Bay Demis.

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Come frutas y verduras.